13/10/2025 09:48
13/10/2025 09:47
13/10/2025 09:46
13/10/2025 09:45
13/10/2025 09:45
13/10/2025 09:44
13/10/2025 09:44
13/10/2025 09:43
13/10/2025 09:43
13/10/2025 09:41
Concepcion del Uruguay » La Calle
Fecha: 13/10/2025 07:45
Por: Matías Dalmazzo El femicidio de Daiana Mendieta sacudió a la localidad de Gobernador Mansilla, en el departamento Tala. La joven de 22 años fue hallada sin vida el martes en un pozo camuflado entre ramas, raíces y hojas, a unos 10 metros de profundidad, tras ser buscada intensamente desde el viernes anterior. La autopsia determinó que murió por un fuerte golpe en la cabeza con un objeto punzante, descartando la hipótesis inicial de un disparo de arma de fuego. En el marco de la investigación, se detuvo a un hombre de 55 años que mantenía un vínculo con la víctima y que vivía cerca de su domicilio; permanece en prisión preventiva como principal sospechoso del crimen. La desaparición de Daiana comenzó el viernes 3 de octubre, cuando salió de su casa en un Chevrolet Corsa y perdió contacto con su familia pocas horas después. Su vehículo fue hallado con las llaves puestas en una zona rural a cuatro kilómetros del casco urbano, lo que intensificó un rastrillaje complicado por la geografía aislada y las lluvias de esos días. Más de 130 personas participaron del operativo de búsqueda, incluyendo policías, bomberos, cadetes, perros de rastreo y drones. La investigación, coordinada por los fiscales Emilce Reynoso y Sergio Saliski, incluyó análisis de cámaras de seguridad, entrevistas a testigos y pericias sobre teléfonos y vehículos. El sospechoso, identificado como Gustavo Brondino, fue detenido luego de intentar manipular un arma de fuego durante un allanamiento en un galpón cercano al domicilio de la víctima. Por ahora, la única imputación formal es por atentado a la autoridad y portación de arma de fuego, aunque continúa siendo el principal sospechoso del femicidio. “El Estado se retiró del acompañamiento a las mujeres» Durante un diálogo con La Calle, Daniela Morales, docente y militante feminista oriunda de Gualeguay, reflexionó sobre el impacto del femicidio y la ausencia de políticas públicas efectivas para prevenir y atender la violencia de género. “El femicidio de Daiana Mendieta es una constante que se repite en nuestra sociedad. Por más que vivamos en ciudades pequeñas o grandes, el entramado de la cultura machista está tan hondo que todas somos posibles víctimas de este sistema perverso, en donde ser mujer puede costarte la vida”, advirtió Morales. Sobre los avances del movimiento feminista en la última década, Morales destacó la construcción de redes sólidas y la sanción de leyes importantes: “Desde 2015, el feminismo se expandió y logró crear una red desde la base que intercambia información y acciones concretas para combatir la violencia de género. Ley de Protección Integral, Ley Micaela, Educación Sexual Integral, Ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo, agentes de acompañamiento para mujeres víctimas de violencia y la creación de hogares para víctimas: son conquistas que muestran avances, pero no alcanzan si la sociedad y las instituciones no participan activamente”. Respecto al retroceso en políticas de género, Morales señaló: “Desde 2023, tanto el Estado provincial como el nacional se retiraron del acompañamiento a quienes menos posibilidades tienen. Los casos de violencia y femicidios no surgen de la nada: se desarrollan en un contexto social que ha debilitado las herramientas de prevención y contención, con programas reducidos o desmantelados, líneas de ayuda integradas a canales de reclamos generales y coordinaciones de ESI desarticuladas”. Finalmente, Morales hizo un llamado a la acción: “La lucha contra la violencia de género requiere de movilización social constante, capacitación, prevención y un compromiso sostenido del Estado. No alcanza con las leyes: necesitamos construir una comunidad donde las mujeres puedan vivir sin miedo y con protección real frente a la violencia”.
Ver noticia original