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Gualeguaychu » Reporte2820
Fecha: 05/10/2025 17:25
La segunda edición del Ironman 5150 en Gualeguaychú no solo convocó a más de 1300 inscriptos, sino que además se disputó bajo un clima que puso a prueba la preparación y la resistencia de los triatletas: la lluvia. Cristian, de Buenos Aires, ya con varias competencias en el cuerpo, relativizó la dificultad: “Esta es la quinta vez que hago Ironman, cuarta vez en 5150 y tengo un 73 también. La lluvia complica porque el circuito tiene muchos retomes, se hace más difícil, hay que bajar el ritmo, pero se puede. No me para la lluvia, para nada”, aseguró minutos antes de lanzarse al agua, ya descalzo en la zona de parque cerrado. Desde Santa Fe, Teresita destacó la importancia de la precaución en la bicicleta: “Para mí, la parte de la bici es la más importante, es donde uno tiene que tener mayor cuidado. Hay que prever no tener las ruedas tan infladas y estar con mayor atención. Es mi segunda vez en Gualeguaychú, la primera con lluvia”, contó la atleta, que también reparó en la creciente participación femenina en este tipo de competencias. El desafío cruzó fronteras y tuvo presencia uruguaya. Anthony Chaparro, debutando en la distancia 51.50 bajo la lluvia, remarcó las particularidades de esta edición: “Ya he corrido triatlones más cortos con lluvia, pero es la primera vez en un 51.50. El tema más complicado es la bicicleta: el piso está muy mojado y las cubiertas son muy finas. El circuito es angosto y si se larga con rolling start de tres segundos, hay que tener cuidado con tantas bicicletas juntas”, señaló. La lluvia no detuvo a los triatletas, pero sí sumó una cuota extra de dificultad que volvió aún más desafiante la experiencia del Ironman 5150 en Gualeguaychú.
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