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Parana » Bicameral
Fecha: 18/09/2025 21:51
Por Fernando Cibeira (*) La casualidad quiso que justo en el aniversario de aquella cena de agasajo de Javier Milei en Olivos a los “87 héroes” que respaldaron su veto al aumento de las jubilaciones aprobada por “degenerados fiscales” en el Congreso, la misma Cámara de Diputados rechazara con una cantidad de votos sorprendente los vetos a la leyes de Financiamiento Universitario y la emergencia para el Garrahan. La nueva derrota parlamentaria dejó al descubierto la progresiva pérdida de apoyos del Ejecutivo, tanto en la propia bancada de La Libertad Avanza, del PRO, de los radicales afines y de los partidos provinciales. Muchos factores influyeron en ello, pero destaca la ceguera política de un Gobierno que se creyó dueño de la voluntad popular y se dedicó a maltratar a sus propios aliados. Cuesta imaginar cómo recuperará un esquema de gobernabilidad. Hay distintos cálculos que se pueden hacer sobre la electrizante pérdida de apoyos sufrida por el gobierno de Milei. Uno podrían ser los 147 votos con que fue aprobada la ley Bases en Diputados en junio de 2024. Fue gracias al respaldo de una oposición dialoguista, que estaba más que dispuesta a facilitarle al Ejecutivo las “herramientas” para llevar adelante sus políticas de ajuste. De ahí en más empezaron las pérdidas, al compás de los insultos de la Rosada. Para septiembre de 2024 podía confiar todavía en los 87 héroes que le permitirían gobernar a fuerza de vetos y decretos, agrupados de los bloques de LLA y el PRO, más los llamados “radicales con peluca”. Muchos de ellos no tuvieron el lugar que imaginaban en las listas que se votarán octubre, hubo gobernadores que rompieron negociaciones por las exigencias de la Casa Rosada -como el radical correntino Gustavo Valdés- y otros sufrieron la motosierra en sus cuentas y obras provinciales, sin que encontraran algún despacho oficial que atendiera sus problemas. Para más, Milei perdió encanto con la progresiva caída de popularidad, algo que terminó de quedar de manifiesto en las elecciones bonaerenses. Por eso, los miles de millones de pesos que la Casa Rosada desembolsó en los últimos días a cuatro provincias para intentar revertir el rechazo al veto, no generó ningún beneficio. Un desplante impensado apenas unas semanas atrás. La magnitud de la derrota en el caso del Garrahan -181 votos a sólo 60- sorprendió hasta la Casa Rosada, un fracaso de la política oficial y un pésimo debut del ministro del Interior, Lisandro Catalán. El financiamiento universitario fue referendado por 174 votos afirmativos y 67 en contra. Varios legisladores hasta hace poco afines al oficialismo, no vieron ganancia en acompañar al veto contra la universidad pública y la salud pediátrica, dos temas de alta sensibilidad. Hubo ex diputados de La Libertad Avanza, del PRO, de la UCR y de partidos provinciales que dijeron hasta aquí llegamos. La movilización en los alrededores el Congreso, impactante como había sido en las dos ocasiones anteriores que se debatió el tema, también influyó en el ánimo en el recinto. Parte de las pérdidas vinieron desde el propio bloque oficialista que sufrió dos desmembramientos. Cuatro diputados del bloque Coherencia y dos del MID -en ambos casos se trata de ex integrantes de la bancada de La Libertad Avanza- votaron a favor del presupuesto universitario y de la salud pediátrica. Además, hubo tres integrantes de la actual bancada de La Libertad Avanza que se ausentaron. Entre las cuentas libertarias circulaban a manera de escrache los nombres de los diputados Rocío Bonacci, Florencia Klipauka Lewtak, Oscar Zago, Eduardo Falcone, Marcela Pagano, Gustavo Gerardo González, Carlos D’ Alessandro y Lourdes Arrieta, bien como traidores al mandato por el que fueron electos o también como una nueva recriminación hacia quienes se encargaron de armar las listas en 2023, que en verdad son los mismos que lo hicieron para 2025. Pero donde las deserciones quedaron públicamente más expuestas fue en el PRO, aliado electoral del oficialismo. El bloque conducido -o no tanto- por Cristian Ritondo apenas pudo garantizarle al Gobierno 21 votos de sus 35 integrantes. Hubo nueve que votaron con el resto de la oposición a favor del Garrahan, cuatro que se ausentaron y una abstención. Circularon videos que mostraron cómo Ritondo y Alejandro Finocchiaro le recriminaron a Silvia Lospennato su discurso contra los vetos. También Fernando Iglesias y Diego Santilli le expresaron su desacuerdo. “No me van a decir a mi cómo tengo que votar”, les retrucó. Luego, Finocchiaro, ex ministro de Educación y abogado egresado de la UBA, expresó su deseo de que el Congreso fueron como el Parlamento británico así “algunos colegas podrían sin pudor cruzar hacia las gradas de enfrente donde habita la alegre banda populista que quiere tumbar a este Gobierno”. El PRO quedó así en fractura expuesta a poco más de un mes para las elecciones legislativas. De acuerdo al relato de los cronistas parlamentarios, Lospennato le dijo a Finocchiaro “a mí no me decís kirchnerista” y que Iglesias, sentado a su lado, le recriminó que “todos los que votan contra los vetos van a cantar la marcha kirchnerista”. Según una “denuncia” que Iglesias le presentó al jefe de bloque Ritondo, Lospennato le habría dicho: “sos un provocador y ojalá la gente te lo haga notar en la calle”. Iglesias, que suele insultar a todo el mundo tanto en el recinto como en las redes sociales, lo consideró “una intimidación y una amenaza”. En la Casa Rosada quedaron enojados con el comportamiento de sus aliados electorales, que apenas le pudieron arrimar una veintena de votos. Por cierto, Lospennato había participado en la cena en Olivos a los héroes, exactamente un año atrás. En medio quedó la elección de mayo en CABA, en la que Lospennato fue candidatoa legisladora del PRO y víctima de campaña sucia por parte de los libertarios. La Coalición Cívica de Elisa Carrió ya pasó hace rato a la vereda de la oposición, de igual manera que buena parte del bloque radical. Un dato fue que los dos diputados que responden al gobernador de Mendoza, Alfredo Cornejo, otro aliado electoral del Gobierno, votaron por el rechazo al veto. Se trata de Lisandro Nieri y de Pamela Verasay, quien va como segunda candidata a diputada del acuerdo UCR-LLA en octubre. Incluso, el referente más conocido de los “radicales con peluca”, Mariano Campero, votó en contra del veto en el caso del Garrahan. Respecto a los gobernadores que recibieron fondos de ATN en la última semana, había expectativa respecto a qué harían los misioneros que responden al gobernador Hugo Passalacqua y su jefe político Carlos Rovira. Pero los cuatro diputados -que se habían ausentado en el tratamiento de las dos leyes- esta vez estuvieron presentes para votar el rechazo al veto. Este jueves, el escenario de preocupación para el Gobierno se trasladará al Senado, donde la última sesión en la que se revirtió el veto a la ley de discapacidad le hizo comprender que ahí no le quedaban más aliados. Es un hecho entonces que también validarán la media sanción al rechazo al veto contra la ley de ATN que impulsaron los 24 gobernadores. Se supone que temprano hará anuncios el vocero Manuel Adorni, que habrá que esperar si siguen en la línea “Milei bueno”, que se intentó inaugurar el lunes con la presentación del presupuesto, o si el oficialismo vuelve al formato original. Con la inflación mayorista por encima del 3%, el dólar superando el techo de la banda y el riesgo país en suba continua, la deriva política es apenas uno de los problemas que tiene para resolver la Casa Rosada. (*) Publicado en El Destape
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