06/09/2025 22:55
06/09/2025 22:54
06/09/2025 22:54
06/09/2025 22:53
06/09/2025 22:53
06/09/2025 22:52
06/09/2025 22:52
06/09/2025 22:52
06/09/2025 22:52
06/09/2025 22:52
» Voxpopuli
Fecha: 04/09/2025 13:15
La medida, que implica un alivio fiscal de más del 50% para las empresas, abre una doble expectativa: para los comerciantes, que ven un posible respiro en sus bolsillos; y para el gobierno provincial, que podría enfrentar una merma en la recaudación en un momento de por sí crítico. Un alivio para la industria en medio del temporal La decisión, pedida por el gobernador Hugo Passalacqua e impulsada por la titular de la ATM, Belén Gregori, busca incentivar la formalización y dar un empujón al sector industrial, uno de los más golpeados por la crisis. Las empresas que operan bajo el Convenio Multilateral y se inscriban en un nuevo padrón de proveedores industriales podrán acceder a esta alícuota reducida. Para los industriales, el beneficio es claro: una menor carga fiscal que les permitirá tener más capital de trabajo en un momento donde la demanda interna se ha desplomado. Es una medida que, en teoría, busca evitar la asfixia del sector productivo. El riesgo de un «súper cepo» a la recaudación Sin embargo, la otra cara de la moneda genera preocupación. En un escenario de recesión donde la recaudación de impuestos nacionales ya está en baja, una medida de alivio fiscal, aunque bienintencionada, podría tener un impacto negativo en las arcas provinciales. La merma en los Ingresos Brutos, la principal fuente de ingresos propios de la provincia, podría complicar la capacidad del gobierno para sostener los gastos corrientes y los servicios públicos. Es una apuesta de riesgo que el gobierno misionero parece dispuesto a tomar, confiando en que el alivio a la industria se traduzca en una mayor actividad económica que compense la menor recaudación inicial. Expectativa en el sector productivo La noticia ha sido recibida con cautela pero con optimismo por parte del sector empresarial. Los industriales esperan que esta medida les dé el oxígeno necesario para sortear la crisis y evitar recortes de personal. El nuevo padrón de proveedores, además de la reducción fiscal, es visto como un paso hacia la formalización y la transparencia. Aún así, la pregunta sigue en el aire: ¿será este alivio fiscal suficiente para contrarrestar los efectos de una recesión que se ha vuelto un fantasma omnipresente en la economía argentina? El tiempo dirá si la audaz decisión de Misiones es un salvavidas para su economía o una medida que terminará por profundizar sus propios problemas fiscales.
Ver noticia original