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Parana » Informe Digital
Fecha: 03/09/2025 23:44
Interna salvaje El próximo domingo se llevará a cabo la elección de legisladores provinciales bonaerenses, un capítulo crucial tanto para el Gobierno nacional como para el conjunto del peronismo, que apunta a conseguir una victoria y revivir, en medio de su pelea abierta con la administración de Javier Gerardo Milei y de la interna salvaje entre el cristinismo y las huestes de Axel Kicillof. En el justicialismo bonaerense han mejorado los rictus: varias encuestas lo dan ganador en la elección del próximo fin de semana. De todos modos, algunos alertan sobre ese optimismo y recuerdan que, hace pocos días, los números que manejaban tanto Cristina Elisabet Kirchner como Sergio Massa daban al peronismo entrando en el balotaje en la provincia de Corrientes, donde finalmente hicieron la peor elección en veinte años. Allí, se impuso en primera vuelta el radical Juan Pablo Valdés, hermano de Gustavo -el actual mandatario- con el 51% de los votos, lo que significó victoria en primera vuelta. Las facturas políticas sobre ese fracaso peronista en Corrientes recayeron en José Ottavis, el curtido dirigente peronista radicado en esa provincia, y que asignaba grandes chances de pelea a su pollo político Martín “Tincho” Ascúa. Y fue un golpe para varios dirigentes de La Cámpora, que tenían el bolso preparado para viajar a esa provincia mesopotámica para festejar un logro electoral. A seguir participando… Sergio Massa junto a Axel Kicillof y Wado de Pedro en 2023. Foto Federico Lopez Claro Búnker caliente Volviendo a la pelea bonaerense, en los pocos puentes que quedan en pie entre el axelismo y el cristinismo, algún enviado del gobernador pidió -con prudencia- que Máximo Kirchner no vuelva a aparecer públicamente para no complicar la elección. Vale recordar que su última declaración fue en Quilmes, donde le facturó al gobernador que no le enviara a ese distrito gobernado por La Cámpora los mismos fondos que recibe la ciudad de La Plata, donde manda el axelista Julio Alak. Ese día de las duras palabras de Máximo, Mayra Mendoza asentía y el candidato nacional Jorge Taiana ponía cara de póker. Y pidió algo más determinante: que no aparezca el eje “Cristina libre” en escena en el tramo decisivo de la elección bonaerense. Ahora, la discusión vigente -mientras los intendentes del conurbano afilan su ejército de punteros barriales, taxis y remises para el traslado de votantes asegurados- será sobre el búnker del próximo domingo, el lugar donde el peronismo recibirá los resultados. El elegido hasta el momento es el Hotel Grand Brizo, enfrente del tradicional Teatro Argentino de La Plata. Las lecturas en la principal fuerza opositora son varias: ¿se festeja haber obtenido más votos que La Libertad Avanza a pesar de haber perdido distritos claves, como podría ser la Primera Sección Electoral?, ¿o se sube al escenario de modo triunfante si la victoria o derrota está en el margen de los tres puntos, en virtud de que hace 15 días, todo el mundo hablaba de una victoria de LLA por 15 puntos? Lo que no tiene respuesta clara aún es si, en caso de haber triunfo peronista en la sumatoria de votos general, se verá una foto de unidad con Axel Kicillof, Sergio Massa y Máximo Kirchner o si el cristinismo le dará la espalda a la lectura que hará la gobernación bonaerense: que habrá sido una buena decisión separar las elecciones bonaerenses de las generales previstas para el mes de octubre. En cambio, si hay derrota clara del peronismo -y victoria de La Libertad Avanza-, la quiebra será una realidad en el peronismo y varios de los intendentes de esa fuerza empezarán a mirar con otros ojos el armado nacional de los gobernadores de “Provincias Unidas”, que ya conforman los mandatarios Nacho Torres, Maximiliano Pullaro, Carlos Sadir, Martín Llaryora, Claudio Vidal y Gustavo Valdés. Barajar y dar de nuevo… 80 años de Clarín: Gustavo Valdés, Gustavo Sáenz, Martín Llaryora, Marcelo Orrego, Gerardo Zamora, Alberto Weretilneck, Jorge Rendo, Sergio Ziliotto, Jorge Macri, Maximiliano Pullaro, Claudio Poggi, Raúl Jalil y Ignacio Torres Análisis amarillo El expresidente Mauricio Macri fue una de las principales figuras que dijeron presente en la celebración de los 80 años del diario Clarín, que se dio en el Teatro Colón, el último lunes. Macri, acompañado de su esposa Juliana Awada, estuvo cerca de su exministro Guillermo Dietrich y del gobernador entrerriano Rogelio Frigerio, ambos también acompañados por sus esposas. Y hasta saludó a Sergio Massa, archienemigos políticos desde los tiempos del gobierno de Cambiemos. El expresidente intercambió su mirada sobre la situación política actual con varios de los presentes -empresarios, políticos y consultores- y concluyó que “esa interna nuestra fue una catástrofe”, en referencia a la pelea salvaje que se dio en el PRO entre Horacio Rodríguez Larreta y Patricia Bullrich, hoy ambos claramente distanciados del exmandatario, uno en la oposición porteña y la otra, ministra mileísta y candidata a senadora por CABA en octubre. A Macri se lo notó muy preocupado por lo que está pasando en el Gobierno y llamó la atención sobre el dato del riesgo país, recordando que a esta altura de su mandato presidencial, su gestión estaba en los 300 puntos contra los casi 900 actuales, ya habiendo liberado el cepo. Para el hoy titular del PRO, “no todo es riesgo kuka” sino que mucho del momento actual se debe a los factores de mala gestión tanto económica como política. Sobre esto último, uno de sus interlocutores citó el asunto de los audios de Diego Spagnuolo, y Macri recordó una frase que había pronunciado en el acto del cierre de la campaña presidencial de Patricia Bullrich por el PRO, sobre el armado libertario de Milei: “Es un grupo sin experiencia y fácilmente infiltrable”. Vamos al VAR… Clarín 80 años en el Colón: Macri y Awada. Foto Clarin Guau guau Un dato que se conoció también en la gala del Colón -en las conversaciones entre empresarios-. Se trata de un encuentro que habrían mantenido el presidente Milei con los directivos del IAEF, el influyente Instituto Argentino de Ejecutivos de Finanzas. Esta asociación, integrada por ejecutivos, directores y gerentes de empresas e instituciones de relevancia, mantuvo un encuentro con el jefe de Estado. Y, para quedar bien, le obsequiaron cuatro bastones, uno para cada uno de los perros del Presidente de la Nación. Todos saben lo sensible que es el tema para el actual mandatario, quien habla siempre de sus “hijos de cuatro patas”, pero sobre los que evita dar precisiones, hasta de su número. La última referencia al respecto era que serían cinco: Conan, Murray, Milton, Robert y Lucas, más allá de que, durante la campaña electoral, él mismo señaló que su primer mastín, Conan, había fallecido en 2017. Pero la confusión reinó en el momento del obsequio del IAEF. Al ver los cuatro bastones, Milei alertó: “Falta el de Conan”. Las miradas fueron de confusión, nadie supo qué responder y el Presidente rechazó marcialmente el obsequio y los bastones quedaron allí abandonados. Un presente fallido…
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