Contacto

×
  • +54 343 4178845

  • bcuadra@examedia.com.ar

  • Entre Ríos, Argentina

  • Máximo Jacquet “Acá sentía que había tocado techo y ahora estoy disfrutando de nadar”

    Concepcion del Uruguay » La Calle

    Fecha: 25/08/2025 01:20

    El joven uruguayense se abrió camino en la vida universitaria de Estados Unidos a través de su pasión: la natación. Por Manuel Iconicoff Quienes han visto nadar a Máximo Jacquet coinciden en que te magnetiza. Sus brazadas parecen arte bajo el agua; limpias, seguras y precisas. No rompen la armonía. Con apenas 19 años, este uruguayense encontró en la natación la llave para cumplir un sueño: estudiar y competir en Estados Unidos, donde combina deporte, universidad y trabajo. En diálogo con La Calle, Jacquet contó cómo fue el proceso para conseguir una beca deportiva, la adaptación a una nueva vida, y qué significa hoy para él la natación. Máximo ha conquistado casi todo lo que un nadador juvenil puede soñar: títulos en Entre Ríos, consagraciones en torneos nacionales, récords que se mantienen y una proyección que lo convirtió en una de las promesas de la natación argentina. Sin embargo, él mismo sabía que en el país había tocado techo. “Nunca pensé que iba a poder vivir de la natación, pero sí usarla como herramienta”, admite. Ese pensamiento lo llevó a tomar la decisión de cruzar fronteras y apostar por Estados Unidos, donde encontró un escenario competitivo a la altura de sus ambiciones. Momentáneamente entrena en el patio de su casa, la pileta de Regatas Uruguay, mientras renueva su visa para volver a la Universidad de Lynchburg, en Virginia, donde cursa la carrera de Finanzas. Jacquet se afianza como pieza clave del equipo de natación universitario, en un sistema donde cada competencia entre instituciones se vive como una final. Una joya que en la Argentina parece haber quedado al margen del radar oficial. – ¿Cómo surgió la oportunidad o la posibilidad de conseguir esa beca en Estados Unidos? – Desde un principio, cuando tenía trece o catorce años, cuando veía a los nadadores como en su momento Santiago Grassi, nadador olímpico argentino. El estaba estudiando y viviendo en Estados Unidos adentro de la universidad. Miraba sus redes sociales y era algo que a mí me había encantado. Observar eso me motivó bastante. A los quince años me contactan empresas dándome a entender que tenía algún potencial para poder ir a Estados Unidos para poder estudiar y conseguir una beca deportiva. Yo estaba chocho. Así que fuimos hablando con mi papá y la familia. En 2019 tuve la oportunidad de ir a conocer una universidad, de poder entrenar con un equipo, ver las facultades en Miami y Fort Lauderdale. Tuve la oportunidad de poder entrenar, de poder hacer gimnasio con el equipo y la verdad que fue una locura, me gustó muchísimo. Yo tenía 14 – 15 años casi recién cumplido y fue una experiencia que me gustó bastante. -Sin embargo tenías que seguir estudiando acá el secundario y seguir compitiendo en Regatas algunos años más… – Bueno si, pasaron los años, yo seguía entrenando en Regatas y bueno, cuando empezamos a mover un poco más las fichas fue en 2022-2023, ya estando en quinto y sexto año del secundario. Me siguieron escribiendo diferentes empresas de Venezuela, de Estados Unidos, de Argentina. Y bueno, con mi papá terminamos decidiendo por una empresa de Argentina, contratamos el servicio para que nos faciliten el contacto con los entrenadores y las facultades. Terminamos definiendo con la Universidad de Lynchburg en Virginia. Obviamente la empresa facilitó todo lo que es el tema de visa y la adaptación. Yo había terminado la secundaria en noviembre de 2023 y ya en enero del 2024 estaba en la facultad. – Qué nos podés contar de la llegada, la adaptación y el inicio en un mundo nuevo para vos. – Me voy el primero de enero del 2024 después de año nuevo porque el coach quería que haga la pretemporada en Miami. Llegué, no pude conocer la universidad pero ya estaba en una pileta entrenando. La verdad que me costó bastante porque era un tipo de entrenamiento distinto, conceptos distintos que por ahí no entendía, estaba medio perdido, te soy sincero. Me costó bastante arrancar. Llegué a mitad de temporada, todos tenían su grupito y yo era el nuevo. Era el único extranjero en natación y esa adaptación me costó bastante. Por suerte hubo algunos chicos que entendieron la situación y me pudieron ayudar pero bueno después de la pretemporada ya vuelvo a la universidad y ya en la universidad había más argentinos. Me pude afianzar más. Bueno después en mayo me vengo para Argentina a pasar las vacaciones después del primer cuatrimestre porque sentía que necesitaba estar con la familia. Me voy nuevamente a Virginia, pasé las fiestas allá y arranqué con otra mentalidad. – ¿A qué te referís con otra mentalidad, en lo deportivo? Tanto en lo deportivo como en lo académico. Tuve buen promedio y en la natación estando dentro de los primeros tres mejores nadadores del equipo masculino. Y bueno también el proyecto me permite trabajar dentro de la Universidad. Por ejemplo me pude ir al mundial de clubes, soy hincha de River y pude hacer ese viaje. -¿Qué es lo que buscaste al momento de tomar la decisión de irte? – Sinceramente yo lo que busqué es usar la natación, que es un deporte que amo, que disfruto que me gusta un montón, usarlo como herramienta para poder tener una mejor calidad de vida. De chico veía que las cosas estaban complicadas en Argentina, que tenía la posibilidad de crecer mucho más estando afuera y bueno, eso fue lo que me motivó. Yo desde un principio siempre supe que no iba a poder vivir de la natación, pero que sí podía usar esa herramienta para poder abrirme esa puerta para estar becado en Estados Unidos, poder estudiar, poder tener un título de allá que ni hablar que tiene prestigio. Y nada, la verdad que se me pudo dar. Hoy en día estoy contentísimo. Es otro mundo, una manera de estudiar distinta, otra manera de dar las clases distintas y los entrenamientos completamente distintos; mucho más llevaderos y me encanta, estoy contentísimo de poder lograrlo. -¿Cómo es el día a día en la Universidad? – Mi día a día básicamente a la mañana me dedico a cursar. No más de tres horas por día, clases cortas de cincuenta minutos, una hora y cuarto o un poquito más. Algunos días de la semana tenemos entrenamiento más temprano en el agua, tipo seis o siete de la mañana ya estamos en la pileta o en el gimnasio. Bueno después arranco, le dedico toda la mañana hasta el mediodía al estudio. Por supuesto que el desayuno, almuerzo, merienda y cena todo eso es en el comedor, cuando vos querés pasás y comés. Bueno a la siesta trabajaba, tuve la posibilidad de poder trabajar dos horas al día de lunes a viernes porque es lo que te permite la universidad, solamente diez horas semanales que cada uno de los alumnos elige la carga horaria dependiendo de cómo es tu día. La verdad eso ayudaba un montón. A eso de las 16:00 hs volvemos al agua hasta las 19:00 hs, entrenamos con todo el equipo que somos sesenta. Terminamos y bueno, viste que allá se cena temprano, siete y media estamos cenando y después de la cena es un poco el momento de ocio. A veces voy al gimnasio, me junto a tomar unos mates con los otros chicos argentinos, miro una serie o una peli y si tengo que estudiar me dedico a estudiar. Básicamente termino bastante cansado pero es lindo. -Metiéndonos estrictamente en lo deportivo y la natación ¿Cómo son las competencias y el calendario? – En relación a lo deportivo, allá se manejan por temporadas. La temporada de natación arranca los primeros días de septiembre hasta febrero-marzo. La verdad que me gusta bastante la modalidad porque cada dos semanas tenías algún que otro meet, que básicamente es una competencia de una universidad contra otra, o sea, es uno contra uno en todas las pruebas. Luego en noviembre está lo que se llama mid-season, mitad de temporada, donde se hace un evento más grande, con más universidades y más competencias. En la parte de enero, la verdad que es la parte donde más se sufre, por así decírtelo, porque es la parte de carga, donde están los entrenamientos más pesados; hay doble turno, gimnasio, porque en febrero está la conferencia, que es una de las cosas más importantes que se pelean las universidades para luego ir a los nacionales que son en marzo. Bueno, luego de febrero o marzo, si pudiste clasificar vas a los nacionales o ya quedas liberado y seguís nadando obviamente, pero no volvés a competir hasta septiembre del mismo año. – En la parte de natación ¿qué encontraste de diferente? ¿Motiva mucho más tener más competencias? – Honestamente en lo deportivo me sentía pinchado, la verdad que no había torneos o había pocos nadadores, poca motivación y eso obviamente me pinchó. Pero una vez que llegué a Estados Unidos la verdad que me cambió la cabeza, me quería comer crudo a todos por el simple hecho de cómo son ellos en lo deportivo, tienen una mentalidad impresionante, te cambian la cabeza en lo deportivo cosa que acá no podía lograrlo. Me pinchaba, sentía que no lo estaba disfrutando tanto y ahora estoy disfrutando el doble. Llegué, pude mejorar muchísimo estando y en Argentina sentía que había tocado techo, que no podía seguir creciendo. En los torneos no había muchos nadadores y eso se hacía aburrido. Bueno allá es completamente distinto. Está todo organizado, está todo planificado, entonces vos vas al pie de la letra. Acá vos no sabías si ibas a tener un Nacional, si se iba a hacer en julio o en agosto, si el entrerriano se hacía en Paraná o en otro lado.. o si no se hacía.. – ¿Cuáles son los objetivos? -El objetivo a corto plazo ni hablar que es seguir mejorando en lo deportivo, también seguir manteniendo ese nivel académico y poder recibirme, poder tener un título y poder trabajar de lo que me gusta, estoy estudiando Finanzas. Y bueno, a largo plazo se verá. Obviamente me gustaría poder quedarme algunos años trabajando allá, poder seguir creciendo. Ojalá pueda volver porque se extraña el pueblo, la familia, los amigos que siendo argentinos ese sentimiento no se va, el asado o el domingo en familia que se extraña. – Después de haberte ido del país ¿el ENARD o la CADDA se han contactado, te hacen un seguimiento o consultan por las marcas? – No, nunca más tuve un llamado o alguna relación con el ENARD (Ente Nacional de Alto Rendimiento Deportivo) o la CADDA (Confederacion Argentina de Deportes Acuaticos). Yo creo que, bueno, con la selección Argentina ya es un paso al costado. Siento que ya estoy en otro capítulo y enfocado en otras cosas, como es el estudio, el laburo, prestando más atención a mi familia, amigos, disfrutando otras cosas, disfrutando más que nada más del deporte que enfocarme 100% en la natación y estar compitiendo para la Argentina. La verdad que la natación es un deporte muy sacrificado. Estar allá arriba en los niveles que demanda la selección argentina exige mucho y tenés que dedicarte al máximo y la verdad siento que no estoy para eso, la disfruto de mi manera.

    Ver noticia original

    También te puede interesar

  • Examedia © 2024

    Desarrollado por