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Buenos Aires » Infobae
Fecha: 21/08/2025 20:38
Así fue baleado Bastián en Wilde Juan Alberto García Tonzo, el policía bonaerense que se enfrentó a los tiros con delincuentes y mató a Bastián Escalante Montoya en la localidad de Wilde, será juzgado desde el 22 de septiembre y durante tres jornadas por el crimen del nene de 10 años, ocurrido en julio del año pasado. El fiscal Juan Ignacio Colazo, de la UFI del Fuero de Responsabilidad Penal Juvenil N°2, le había pedido la elevación a juicio oral a la jueza de Garantías Estela del Carmen Mollo y el debate ya tiene fecha en Tribunal Oral en lo Criminal N°2 de Avellaneda y la fiscal de juicio es Mariela Montero. García Tonzo llega imputado por el homicidio con dolo eventual de Bastián y por el intento de homicidio en exceso de la legítima defensa cuando repelió el robo. Sin embargo, la querella pide la máxima condena: perpetua. Quieren que sea sentenciado por el homicidio agravado por el uso de arma y también por haber sido cometido por un integrante de una fuerza de seguridad. El menor recibió dos disparos por la espalda cuando andaba en bici con su madre (NA) “Nosotros vamos a buscar Justicia, que se lo condene por el homicidio”, dijo Matías Morla, abogado de la mamá de Bastián, Johana. El caso Eran cerca de las 20 de ese 10 de julio de 2024 y, en la intersección de Caxaraville y Friuli, en Wilde, García Tonzo fue abordado por al menos cuatro sospechosos que intentaron robarle su moto. Eran todos menores: dos tenían 16 años, uno 14 y el mayor 17. El policía entonces repelió la agresión inicial con su arma reglamentaria, pero continuó disparando cuando los atacantes ya se escapaban. En ese momento, uno de los proyectiles alcanzó a Bastián, que iba en bicicleta junto a su madre por la calle Caxaraville. La herida fue fatal. En su indagatoria, el propio García Tonzo admitió haber disparado entre seis y siete veces, aunque afirmó no haber visto a la víctima ni a su madre durante el enfrentamiento. El arma del policía “Cuando salí a perseguirlos ya no estaba disparando. Yo directamente dejo de disparar cuando la moto de los que me habían abordado choca con el auto. Ahí me moví para el lado de enfrente, de donde estaba parapetado, rodilla en tierra, de la mano de enfrente, sobre Caxaraville. Es decir, cuando me pongo en movimiento, dejé de disparar”, declaró por entonces el acusado. La madre de Bastián recordó que intentó resguardarse junto a su hijo al percibir la situación, pero durante el trayecto escuchó las detonaciones y el nene cayó herido. “Cuando llegamos a la esquina de Rondeau, volviendo para el club, ahí fue cuando mi hijo me dice: ‘Ay ma’. Y se cae al piso, sobre Rondeau y Caxaraville, ahí en la esquina. Y quedó ahí tirado en el piso y le preguntaba qué le dolía. Cuando vi dónde tenía lastimado, me di cuenta de que era en el cuello”, recordó con dolor Johana. Uno de los vecinos, testigos de lo sucedido y que aportó imágenes de cámaras de seguridad, dijo: “Veo al policía disparar, se producen una serie de tiros y yo me tiré atrás de un árbol que tengo en la puerta de mi casa. Escuché unos cuantos tiros, por lo menos entre ocho y diez tiros”. Bastián hace cinco años junto a sus dos hermanas Las pericias La pericia balística determinó que todos los cartuchos hallados en la escena del crimen, incluido el proyectil que causó la muerte del niño, correspondían al arma de García Tonzo. El informe oficial señaló: “La totalidad de la cartuchería encontrada y secuestrada en el lugar del hecho pertenecen al arma de Juan García Tonzo imputado, incluyendo el proyectil que impactara en el niño Bastián Escalante causándole la muerte”. La calificación legal impulsada por el fiscal Colazo contra el policía contempla dos figuras: tentativa de homicidio en contexto de exceso de legítima defensa, en concurso ideal con homicidio con dolo eventual. Para Colazo, si bien la primera reacción del policía podía encuadrarse en la legítima defensa, la continuidad en el uso del arma, una vez neutralizada la agresión, configuró un exceso que puso en riesgo a terceros, lo que derivó en la muerte del niño. El fiscal también rechazó la posibilidad de un juicio abreviado debido a la gravedad de los hechos y a que las penas previstas superan los 15 años de prisión.
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