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Parana » Uno
Fecha: 17/08/2025 17:40
El Indec informó que los salarios crecieron por encima de la inflación, aunque persiste la pérdida del poder de compra en los últimos años. Los datos de junio confirmaron una tendencia que se viene observando en los últimos meses: los salarios en promedio lograron crecer por encima de la inflación. Según el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec), los sueldos tuvieron un aumento nominal del 3% en el sexto mes del año, frente a una suba del Índice de Precios al Consumidor (IPC) de 1,6%. El dato resulta alentador, aunque esconde fuertes diferencias entre los distintos sectores de trabajadores. El 3% informado es apenas un promedio, que no refleja de manera exacta lo ocurrido en cada categoría laboral. Brechas según sectores Los empleados del sector público apenas alcanzaron un incremento del 1,3% en junio, lo que significa que sus ingresos quedaron 0,3 puntos porcentuales por debajo de la inflación del mes. En contraste, los asalariados privados formales registraron un alza del 1,7%, con una leve ventaja de 0,1 puntos frente al IPC. El panorama más favorable se observó en el sector informal, donde la estadística oficial marcó un aumento del 8,9% en el sexto mes del año. De todos modos, este dato debe leerse con cautela, ya que la serie de sueldos informales tiene un rezago de cinco meses. En consecuencia, la comparación corresponde al IPC de enero (2,2%), frente al cual la mejora aparece mucho más pronunciada. Los salarios en el primer semestre Al observar la primera mitad de 2025, los asalariados privados formales acumularon un alza del 13,7%, es decir, 1,4 puntos porcentuales menos que la inflación semestral. El sector público, en tanto, llegó a un 16,5% de incremento, superando por la misma diferencia al índice de precios. El mayor salto lo registró nuevamente el sector informal, con un aumento del 52,5% en seis meses, más de tres veces el avance del costo de vida. Este contraste se explica por la dinámica propia de los no registrados, que suelen recibir ajustes concentrados y menos previsibles que los convenios colectivos de los trabajadores registrados. Un año de contrastes En la comparación interanual, entre junio de 2024 y junio de 2025, el índice salarial total creció 60,7%. Sin embargo, dentro de esa cifra global hay marcadas diferencias: el sector informal lidera con una mejora del 166,3%, mientras que el sector público subió 47,4% y el privado formal lo hizo en 45,4%. Aun así, los analistas señalan que las variaciones positivas no alcanzan para revertir las pérdidas sufridas en los últimos años. El poder adquisitivo continúa por debajo de los niveles previos a la crisis inflacionaria más aguda. La mirada de especialistas Un informe reciente del Observatorio de la Deuda Social de la Universidad Católica Argentina (UCA) refleja esa situación. Entre diciembre de 2016 –cuando finalizó la emergencia estadística– y abril de 2025, los asalariados registrados perdieron 19,7% de poder de compra. En el mismo período, los empleados del sector público sufrieron una caída del 33,2% y los trabajadores informales un retroceso del 24%. El estudio advierte que, aunque en los últimos meses se observa una recuperación parcial, esta resulta insuficiente frente a la magnitud de las pérdidas acumuladas. Esto implica que amplios sectores de la población mantienen un nivel de consumo muy inferior al que tenían hace casi una década. Los servicios suben La diferencia en la velocidad con que suben los precios de los servicios respecto de los bienes se nstaló como un aspecto central de la dinámica inflacionaria en Argentina. Cada medición oficial confirma que actividades como salud, educación, alquileres y otros rubros vinculados a los servicios aumentan a un ritmo mayor que los productos. Esta tendencia no solo impacta en la vida cotidiana, sino que también modifica estrategias de consumo, expectativas de los hogares y diagnósticos de los analistas sobre el comportamiento de la economía. El último informe del Índice de Precios al Consumidor (IPC) marcó una diferencia significativa entre la evolución de los precios de bienes y servicios en Argentina. Según los datos del Indec, en julio los servicios mostraron un alza de 3,1%, mientras que los bienes solo avanzaron 1,4%. Esta dinámica persiste desde hace varios meses y se apoya en distintos factores, tanto internos como derivados de la política económica actual y los rezagos de aumentos en tarifas y salarios. Lo que falta Los datos recientes muestran una mejora relativa, favorecida por la desaceleración inflacionaria y la vigencia de acuerdos paritarios. Sin embargo, la recuperación todavía no logra consolidarse como un proceso sostenido. En la práctica, millones de familias continúan ajustando sus gastos y resignando consumos que hasta hace pocos años eran habituales. El desafío para los próximos meses será mantener la tendencia positiva y, al mismo tiempo, diseñar políticas que permitan recomponer gradualmente el poder de compra perdido. Poder adquisitivo El análisis del Observatorio de la Deuda Social de la Universidad Católica Argentina (UCA) permite dimensionar la magnitud de la pérdida del poder adquisitivo. Según el relevamiento, entre diciembre de 2016 y abril de 2025, los trabajadores formales privados experimentaron una caída real de 19,7% en sus ingresos. En paralelo, el sector público resultó el más golpeado, con una merma del 33,2% en la capacidad de compra de sus salarios. Los informales también se vieron fuertemente afectados, con un retroceso estimado en 24%. Deterioro profundo Estas cifras evidencian un deterioro profundo que no se corrige con algunos meses de mejora. Aun cuando la inflación cedió terreno y los últimos acuerdos paritarios permitieron pequeñas recomposiciones, las pérdidas acumuladas a lo largo de casi una década siguen pesando con fuerza. La conclusión de los investigadores es clara: mientras no se registre un ciclo prolongado de aumentos salariales sistemáticamente por encima del índice de precios, será muy difícil recuperar lo perdido. Esto explica por qué, pese a que en los últimos meses los ingresos muestran cierta mejora, la percepción social es que el salario todavía no rinde lo suficiente para cubrir las necesidades básicas. Un alivio transitorio De esta manera y según el relevamiento, la recuperación parcial de 2025 representa apenas un alivio transitorio dentro de un proceso más extenso de caída del poder adquisitivo. Para revertirlo de manera estructural, los especialistas consultados remarcaron la necesidad de políticas que combinen estabilidad macroeconómica con una estrategia sostenida de incremento real de los ingresos.
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