16/08/2025 05:59
16/08/2025 05:54
16/08/2025 05:53
16/08/2025 05:53
16/08/2025 05:52
16/08/2025 05:52
16/08/2025 05:52
16/08/2025 05:42
16/08/2025 05:41
16/08/2025 05:40
Buenos Aires » Infobae
Fecha: 15/08/2025 18:41
Así recibió Trump a Putin en Alaska El encuentro entre Donald Trump y Vladimir Putin en la Base Aérea Elmendorf-Richardson de Alaska marcó este viernes el regreso del presidente ruso a territorio occidental desde el inicio de la guerra en Ucrania. Ambos mandatarios se saludaron con dos apretones de manos ante la prensa y subieron juntos a un auto oficial antes de iniciar una cumbre cuyo resultado mantiene a la comunidad internacional en máxima tensión. El gesto protocolar simbolizó el inicio de una negociación que podría ser decisiva para el futuro del conflicto en Ucrania, un hecho seguido atentamente por líderes de todo el mundo. Durante la llegada, Putin, acompañado por el ministro de Relaciones Exteriores Sergei Lavrov y el consejero Yuri Ushakov, fue recibido por Trump sobre una alfombra roja desplegada en la pista. Según informó el Kremlin, la delegación rusa se completó tras modificarse la agenda original, que preveía una conversación exclusiva entre ambos presidentes asistidos solo por intérpretes. Finalmente, el mandatario estadounidense optó por sumar a su jefe de la diplomacia, Marco Rubio, y al enviado especial Steve Witkoff, según detalló la portavoz de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, a periodistas que viajaron a bordo del Air Force One. Aviones militares de EEUU volaron sobre la base en Alaska durante el saludo de Putin y Trump Ante los medios, Trump subrayó el “respeto” mutuo con el líder ruso y reconoció que existe buen entendimiento personal. “Nos entendemos bien”, afirmó el mandatario durante el vuelo hacia Alaska. No obstante, remarcó que la reunión podría concluir rápidamente si Putin no muestra disposición para negociar. El presidente estadounidense, que atribuyó recientemente la responsabilidad de la guerra a su predecesor demócrata Joe Biden, también bajó las expectativas afirmando que el encuentro sería una “reunión de tanteo” y calculó que la cumbre tiene solo un “25%” de probabilidades de fracasar. Por su parte, Putin evitó declaraciones sobre el posible desenlace. Lavrov expresó ante la prensa que Rusia “no hace suposiciones anticipadas” y se presentó con una camiseta en la que se leía “URSS” en caracteres cirílicos. El presidente ruso cruza por primera vez el estrecho de Bering desde el inicio del conflicto, en un contexto en que Moscú controla aproximadamente una quinta parte del territorio ucraniano y la cifra de muertes por la guerra se estima en decenas de miles. El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, camina junto al presidente ruso, Vladimir Putin, antes de la conversación sobre el fin de la guerra en Ucrania, en la Base Conjunta Elmendorf-Richardson en Anchorage, Alaska, Estados Unidos, este 15 de agosto de 2025 (REUTERS/Kevin Lamarque) La elección de Alaska para la cumbre guarda un significado histórico. Rusia vendió este territorio a Estados Unidos en el siglo XIX y el Kremlin ha recordado en reiteradas ocasiones este antecedente como ejemplo de intercambios territoriales. Además, la ubicación presenta ventajas logísticas, pues Estados Unidos no es firmante de la Corte Penal Internacional, organismo que mantiene activa una orden de arresto contra Putin por presuntos crímenes de guerra. El conflicto ucraniano se mantiene como eje central de la agenda. El presidente de Ucrania, Volodimir Zelensky, rechazó públicamente las presiones para ceder territorio. “Es hora de poner fin a la guerra, y los pasos necesarios deben ser dados por Rusia. Contamos con Estados Unidos”, remarcó este viernes en redes sociales. La Casa Blanca anticipó que, tras el encuentro, Trump prevé consultar rápidamente a líderes europeos y a Zelensky sobre los temas abordados. El mandatario de Ucrania calificó la cumbre como una “victoria personal” para Putin, mientras que diversos dirigentes europeos manifestaron preocupación, ya que hasta ahora han sostenido que no aceptarán negociaciones sobre el futuro del país euroasiático sin la participación directa de Kiev. Antes de viajar a Alaska, Trump también mantuvo comunicaciones con el presidente de Bielorrusia, Alexander Lukashenko, uno de los aliados más cercanos de Putin y quien permitió el uso de su territorio para la ofensiva militar contra Ucrania. Se espera que tras la reunión bilateral, la delegación estadounidense mantenga un almuerzo con otros altos funcionarios y examine los resultados de la cumbre antes de emitir un comunicado oficial. (Con información de AFP)
Ver noticia original