15/08/2025 19:06
15/08/2025 19:05
15/08/2025 19:05
15/08/2025 19:05
15/08/2025 19:04
15/08/2025 19:04
15/08/2025 19:03
15/08/2025 19:02
15/08/2025 19:01
15/08/2025 19:01
» Diario Cordoba
Fecha: 15/08/2025 15:05
Javier Lambán, fallecido este viernes a los 67 años de edad debido a las complicaciones derivadas del cáncer que padecía, era un dirigente con opiniones contundentes sobre casi todo. También sobre Pedro Sánchez. Junto a Emiliano García-Page, pero sin buscar tanto la proyección en Madrid, Lambán, que presidió Aragón entre 2015 y 2023, era el principal barón socialista crítico con el secretario general del partido y presidente del Gobierno. Como tantos otros (José Luis Rodríguez Zapatero, por ejemplo) dio su apoyo a Susana Díaz cuando la andaluza intentó desbancar a Sánchez. Pero a diferencia de muchos, no reconstruyó después su relación con el renacido secretario general, ni siquiera cuando este llegó por sorpresa a la Moncloa en 2018, a raíz de la moción de censura a Mariano Rajoy. Al contrario. El ascenso de Sánchez a la Presidencia del Gobierno solo contribuyó a ensanchar la distancia que les separaba. Si algo le molestaba a Lambán era que Sánchez dependiera de partidos independentistas que le marcaran la “agenda”, así que todas las iniciativas destinadas a calmar la crisis territorial en Catalunya (indultos, reformas penales y por supuesto amnistía) contaron con su rotunda oposición. Pero entre uno y otro también había una batalla por el poder orgánico, como se comprobaba cada vez que había que elaborar listas electorales, con el mandatario autonómico colocando a los suyos en los puestos de salida y la dirección del PSOE borrando sus nombres y sustituyéndolos por otros. El pulso interno llegó hasta enero de este año, cuando Lambán se retiró como líder de los socialistas aragoneses pero impulsó a su número dos, Darío Villagrasa, para enfrentarse a la candidata de Sánchez, Pilar Alegría, ministra de Educación y portavoz del Gobierno. Asumiendo que contaba con escasos apoyos, Villagrasa acabó dando un paso a un lado de la carrera, que se resolvió sin primarias ni grandes enfrentamientos. Aun así, Lambán señalaba antes y después de esos días, en público y privado, que el hecho de que una ministra liderase la oposición a un presidente autonómico (Jorge Azcón, del PP) suponía una “anomalía”. La "coherencia" A pesar de los continuos choques, los colaboradores de Sánchez en el PSOE defendían la acción de Lambán como presidente autonómico. También reconocían que buena parte de las iniciativas pactadas por el jefe del Ejecutivo con el independentismo catalán eran “difíciles” de explicar en un territorio como Aragón, y en cualquier caso señalaban que Lambán, en el fondo, era “coherente” en sus posiciones, aunque estuviera "equivocado". Coherente, se entiende, en su rechazo frontal a las medidas de Sánchez para atraer al independentismo y al mismo tiempo desinflar su apoyo entre los catalanes, una estrategia que ha terminado dando resultados, como prueba la llegada de Salvador Illa al Palau de la Generalitat. Aquí, un breve repaso de las frases más tajantes en este campo por parte del recién fallecido dirigente socialista. Sobre la ley de amnistía, que rechazó votar cuando tenía que hacerlo en el Senado, protagonizando una espantada que provocó que el PSOE le impusiera una multa de 600 euros: “Vulnera la igualdad ante la ley, quiebra la separación de poderes y socava la autoridad moral y política del Estado para hacer frente ahora y en el futuro al independentismo”. Sobre la financiación singular catalana pactada entre el PSC y ERC: “Es un desatino. Si Madrid pidiese lo mismo, el resto tendríamos que irnos en patera a Mauritania”. Y sobre el propio presidente del Gobierno, a quien llegó a acusar de “caudillaje”: “A España le habría ido mejor” si Javier Fernández [expresidente de Asturias] hubiese sido líder del PSOE. Lo cual, evidentemente, quiso decir que a su juicio el país y el partido estarían mejor sin Sánchez. "Recibimos con gran pesar la noticia del fallecimiento de Javier Lambán. Su trayectoria y compromiso dejan una huella imborrable", ha destacado el jefe del Ejecutivo en su cuenta de X. También el PSOE ha optado por dejar a un lado las diferencias. "Fue un socialista fiel a sus valores y principios hasta el último de sus días. Gobernó Aragón pensando en todos y todas, y su legado sigue vivo hoy en esa tierra", ha destacado el partido. Suscríbete para seguir leyendo
Ver noticia original