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» Primerochaco
Fecha: 30/07/2025 01:18
El chef chaqueño Carlos Losch, conocido por fusionar la tradición culinaria del Chaco con nuevas tendencias, se encuentra recorriendo Europa en una travesía que combina descanso, formación y exploración de sabores. Desde España hasta Italia, pasando por Francia, el cocinero aprovecha cada experiencia para incorporar saberes a su cocina y reforzar la identidad gastronómica regional. Una gira entre sabores y culturas “Vine un poco por paseo, para distraer la mente, pero también para seguir aprendiendo”, contó Losch desde el viejo continente. Su itinerario incluyó ciudades emblemáticas como Madrid y Barcelona, con una próxima parada en Francia para una experiencia intensiva en un restaurante, y luego Italia, cuna de las pastas. Allí espera seguir nutriendo su repertorio culinario con recetas, técnicas y, sobre todo, inspiración. Pero lejos de convertirse en una travesía meramente personal, Carlitos comparte a diario sus vivencias a través de redes sociales, donde gana terreno como influencer gastronómico, mostrando platos, mercados, charlas con chefs y momentos de disfrute. “Tengo la suerte de poder cocinar, comer y viajar. Soy feliz haciendo lo que me gusta”, afirma con entusiasmo. Ñoquis del 29, con impronta chaqueña La excusa para charlar con él fue el clásico de cada 29: los ñoquis. Aunque reconoce la importancia de la receta de la abuela, propone salir de lo habitual: “La mandioca está pidiendo pista. Es momento de animarnos a hacer ñoquis con este producto local, tan nuestro”. Carlitos destaca la versatilidad de la mandioca, que ahora se consigue pelada y envasada al vacío en supermercados y verdulerías, facilitando su uso. Recomienda combinar los ñoquis de mandioca con manteca especiada o salsas suaves de tomate, albahaca y oliva. “La salsa es el 40% del plato. Si está bien hecha, resalta todo lo demás”, remarca. Y para quienes buscan opciones sin gluten, sugiere una alternativa: ñoquis de harina de arroz. “Tanto la mandioca como el arroz son aptos celíacos. Solo tenemos que animarnos a incorporar estos productos”. Entre raíces y nuevas influencias En diálogo con Radio Provincia, Losch reflexiona sobre la mezcla de culturas que nutren la gastronomía chaqueña. “Mi abuela era italiana, mi abuelo español. Y en mi familia también hay raíces austríacas. Resistencia es una ciudad cosmopolita desde sus orígenes. Esa mezcla de tradiciones nos da una cocina muy rica”. A esa herencia europea se suma la impronta guaranítica y quechua de la región: pescados de río, cerdo, arroz y por supuesto, la mandioca. “Nosotros supimos conservar muchas recetas, pero también las adaptamos. Por ejemplo, el cocido madrileño, que en el Chaco lo transformamos con fideos y picantes locales”, explicó. El aceite de oliva y la producción de cercanía Consultado sobre el uso del aceite de oliva —tan común en las cocinas del Mediterráneo—, Carlitos asegura que en Argentina “estamos bien encaminados”. Afirma que la gastronomía chaqueña ha dado un salto de calidad gracias a la incorporación de productos frescos, locales y de cercanía. “Hoy muchos restaurantes ya indican de dónde provienen sus ingredientes. Eso genera identidad y también compromiso con los productores. Estamos entendiendo que un plato también cuenta una historia”, señala. El arte de maridar sabores con experiencias Mientras recorre Europa, Carlitos no se olvida del maridaje. “Todo va acompañado de una buena caña o un vino. La gastronomía acá se vive todos los días, no hay un menú repetido”, cuenta, entre risas y anécdotas. Incluso bromea con su fallido intento de llevar jamón serrano en un vuelo: “Un tío mío quiso subir al avión con una pata entera de jamón… no lo dejaron. Así que ahora viajo liviano”. La cocina chaqueña que viene Desde Europa, Carlitos Losch sigue sembrando el futuro de la gastronomía chaqueña. Con una mirada atenta al detalle, pero también al entorno, propone un camino donde las raíces dialogan con la innovación. “Tenemos todo para hacer una cocina poderosa, identitaria, de la que podamos sentirnos orgullosos”, concluye. Y mientras planea su regreso, los fogones chaqueños lo esperan con hambre de nuevas recetas.
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