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Fecha: 17/07/2025 21:31
El incidente ocurrió durante la interpretación de Music of the Spheres, cuando el cantante británico reparó en una pareja que evitó aparecer en la tradicional Kiss Cam. Lo que parecía un gesto tímido escondía una verdad incómoda: se trataba de una cita extramatrimonial. Un momento musical se transformó en escándalo luego de que una pareja fuera señalada por el mismísimo Chris Martin durante un show de Coldplay en el Gillette Stadium de Boston. El incidente ocurrió durante la interpretación de Music of the Spheres, cuando el cantante británico reparó en una pareja que evitó aparecer en la tradicional Kiss Cam. Lo que parecía un gesto tímido escondía una verdad incómoda: se trataba de una cita extramatrimonial. Andy Byron y Kristin Cabot, ambos ejecutivos de alto rango de la empresa tecnológica Astronomer, fueron captados en una actitud cariñosa que no pasó desapercibida. Martin, en tono de broma, comentó frente a todo el estadio: “Oh, miren a esos dos, o están teniendo una aventura o son muy tímidos”. La frase, que en otro contexto podría haber pasado como una simple ocurrencia, tomó un significado explosivo cuando se descubrió que ninguno de los dos estaba con su respectiva pareja oficial. La escena no tardó en viralizarse en redes sociales, generando una ola de comentarios. Según sus perfiles en LinkedIn, Byron es CEO de Astronomer —empresa valuada en más de mil millones de libras— y Cabot se desempeña como directora de Recursos Humanos desde hace nueve meses. La relación entre ambos sería reciente, aunque su comportamiento en el concierto dejó ver una confianza que levantó sospechas. Andy Byron está comprometido con Megan Kerrigan Byron, con quien tiene dos hijos y reside en Nueva York. En tanto, Kristin Cabot mantiene una relación con un empresario del rubro de calzado e indumentaria. La exposición pública ha generado un revuelo no solo en sus vidas personales, sino también dentro del entorno laboral que ambos comparten. El episodio demuestra cómo una simple cámara puede exponer mucho más que una muestra de afecto, dejando en evidencia que, a veces, la música no es lo único que habla en un estadio lleno. Fuente: NA
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