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Parana » El Once Digital
Fecha: 14/07/2025 22:30
En una noche fría y húmeda, un grupo de voluntarios del colectivo Suma de Voluntades llevó a cabo su habitual recorrido solidario para asistir a personas en situación de calle. La actividad incluyó la distribución de viandas calientes, en su mayoría guiso de arroz, a lo largo de distintos puntos de Paraná. Elonce acompañó al equipo y registró los testimonios de quienes cada semana sostienen esta tarea desde el corazón. Alejandra Rettore, una de las voluntarias, expresó con emoción: “Es algo del corazón y cuando hay más de 300 personas en la calle, hay muchos niños, y ellos vienen con todo el amor del mundo, te agradecen, te bendicen. Nosotros aprendemos de ellos, yo aprendo de ellos”. La acción se realiza sin interrupciones, incluso en condiciones climáticas adversas, reforzando la urgencia de asistir a quienes no tienen un techo. Foto: Elonce. El operativo de entrega contó con la participación de integrantes del Centro de Mediación, la Defensoría del Pueblo de Paraná —con la presencia de Marcia López y su adjunta Cecilia Pautas—, y un grupo estable de mediadores y colaboradores. “Nosotros que hemos recorrido la calle, que hemos llevado la información, también tenemos que ver esta parte en donde ellos están muy solos”, reflexionó Rettore. Guiso caliente, abrigo emocional La preparación de las viandas estuvo a cargo de Nicolás, quien forma parte del voluntariado desde hace años. En diálogo con Elonce detalló: “Se están haciendo entre 350 y 400 porciones. Los ingredientes son pollo, pechuga de pollo, muy abundante verdura y arroz con sus condimentos”. El menú es elegido pensando en lo calórico y nutritivo, clave para quienes duermen a la intemperie. Foto: Elonce. Nicolás relató cómo se sumó a la causa: “Siempre estaba suelto, cocinábamos con mi señora, con mi familia en distintos barrios. Después conocí a Anabela por situaciones de la vida y compartí muchas cosas. Hace más de 7 u 8 años que estoy colaborando con Suma en distintos lugares”. Su testimonio refleja cómo el compromiso personal se convierte en red comunitaria. El voluntariado apunta no solo a llevar un plato de comida, sino también a ofrecer compañía, contención y un momento de dignidad para quienes viven en extrema vulnerabilidad. “Apuntamos siempre a entregar una comida sustanciosa, más con estos fríos que se avecinan ahora en esta semana”, remarcó Nicolás. Foto: Elonce. Una invitación abierta a la solidaridad Los voluntarios invitaron a más personas a sumarse. “Hace frío, hay humedad. Qué lindo esto de venir acá, de ayudar al que no tiene”, destacó Alejandra. La iniciativa se sostiene con donaciones, trabajo conjunto y el deseo de cambiar la realidad de muchas personas en situación de calle.
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