13/07/2025 11:17
13/07/2025 11:17
13/07/2025 11:16
13/07/2025 11:16
13/07/2025 11:16
13/07/2025 11:16
13/07/2025 11:15
13/07/2025 11:15
13/07/2025 11:15
13/07/2025 11:15
Buenos Aires » Infobae
Fecha: 13/07/2025 04:37
Alberto Fernández y Héctor Martínez Sosa fueron procesados por la causa seguros. Mauro Tanos (a la derecha) está acusado de recibir coimas. Luego de un año y medio de investigación, la Justicia dio por probado que en la maniobra de los Seguros que terminó con el procesamiento de Alberto Fernández y otras 30 personas se pagaron coimas. Un ex funcionario de Nación Seguros, Mauro Tanos, promovido por el actual gobierno y luego echado por el escándalo, está acusado de haber recibido sobornos millonarios a través de un sistema de cooperativas. Con ese dinero, compró propiedades, autos, viajes, y hasta plateas en el estadio de River Plate. También quedaron en la mira dos ex funcionarios de Casa Rosada que habrían recibido fajos de dinero. Las pruebas aparecieron en el teléfono de María Cantero, la histórica secretaria del ex presidente. El nombre de Tanos surgió al comienzo de la causa a partir de un allanamiento en la “sede” de la empresa San Ignacio, una de las beneficiadas por la póliza de la ANSES. Cuando la Policía llegó al lugar, apareció un abogado y entregó dos cajas repletas de documentación. Los efectivos sospecharon de la maniobra, siguieron el auto, y terminaron en la casa de un empresario, Alfredo Del Corro, donde había dos camionetas Jeep Commander. Una de ellas, tenía una cédula azul a favor de Tanos. Era solo el comienzo. Ese mismo empresario le pagó un viaje de Tanos, junto a toda su familia, a Miami y canceló varias cuotas de un departamento, en pozo, en El Salvador al 4300. Cuando declararon ante la Justicia, ambos afirmaron que eran “préstamos” por su relación de amistad. La Justicia probó que el dinero entregado a Tanos eran coimas por los contratos con el Estado. Lo más llamativo es que todo se hizo en blanco, por transferencias bancarias, utilizando un grupo de cooperativas como intermediarias. Solo la cooperativa, “7 de Mayo”, recibió un total de $376.928.239 de varias aseguradoras. De ese total, casi $239 millones provenían de San Ignacio, la empresa puesta a dedo en la póliza de la ANSES por un ex funcionario, Federico D’Angelo Campos. Los dueños de San Ignacio argumentaron que las transferencias estaban motivadas en supuestos servicios de catering. Pero no pudieron aportar ni una sola prueba de esos eventos. Mauro Tanos provenía de La Cámpora y había tenido otros cargos antes de llegar a Nación Seguros. Entre los que habrían pagado los sobornos mediante ese mismo mecanismo también se destaca la empresa San Cristóbal, también involucrada en la póliza de la ANSES, y el empresario Diego Nicolás Rosendi, procesado por los delitos de cohecho activo, defraudación y negociaciones incompatibles con el ejercicio de la función pública. “Se ha comprobado que las cooperativas eran un eslabón central de esa ingeniería y cumplían la función de ocultar el verdadero origen del dinero y hacerlo circular en el mercado para poder darle distintos usos”, sostuvo Casanello en la resolución conocida este jueves. Según pudo reconstruir Infobae a lo largo de la investigación, Del Corro era el emisario de Tanos para negociar con los empresarios de los seguros. Si llegaban a un acuerdo, las coimas se pagaban a través de las cooperativas. Y ese dinero era distribuido entre los miembros de la organización. Tanos había ingresado a Nación Seguros en 2021 pero luego fue promovido a gerente general durante el gobierno de Javier Milei. En abril del año pasado, apenas comenzó el escándalo, fue echado junto al ex gerente de compras Marcos Eufemio, ahora citado a indagatoria. El juez Casanello también llamó a declarar a dos ex funcionarios de Casa Rosada que habrían recibido pagos de parte del empresario Héctor Martínez Sosa, pareja de María Cantero, al histórica secretaria de Alberto Fernández. Se trata de Ariel Palmieri, de la Secretaría General de la Presidencia, a cargo en ese entonces de Julio Vitobello, y Hugo Paz, de Casa Militar. El dinero lo entregaba en mano la propia Cantero. En su teléfono aparecieron las fotos de los fajos de dinero y varios chats que la incriminan desde 2020 hasta 2024. - Cantero: “Gordito acordate lo que le doy a mis chicos en la oficina. Xfa” - Martínez Sosa: “Okkk. Te llevo el mes pasado y este” La foto fue enviada por María Cantero a su pareja Martínez Sosa. En abril de 2023, se registró otra conversación con el nombre de uno de los involucrados. -Martínez Sosa: “Meri ahí me pas. Estoy con Chicho, ahí en el auto de él. Estamos yendo a al CCK. Pregunto. ¿Cómo se llama el hombre que, que trabaja para vos? El que tengo que ver.” - Cantero: “Hugo Paz” - Martínez Sosa: “Meri. Yo entré y estacioné arriba del CCK. Estoy viniendo por Paseo Colón. Ya estoy llegando a Balcarce 24. Ya estamos llegando.” - Cantero: “Ok. Te van a buscar” La propia secretaria de Alberto Fernández recibía pagos de su pareja. Para la Justicia eran compensaciones por su función como lobbista. Maria Cantero, Héctor Martinez Sosa y Alberto Fernandez. Los teléfonos de Cantero fueron como un tesoro para los investigadores. La ex secretaria se sigue recriminando no haber borrado los mensajes y las fotos que almacenaba de su último paso por la Casa Rosada. En ese celular se encontraron decenas de mensajes con Alberto Fernández, con Daniel “El Gordo” Rodriguez (ex intendente de la quinta de Olivos), y con su pareja, Martínez Sosa. También hay chats con varios funcionarios de segundo rango. No eran los únicos. Hay ministros y secretarios de Estado que reconocieron ante Infobae haber recibido los pedidos constantes de la secretaria. Para el juez Casanello, Cantero tenía dos roles: “Podía forzar, a partir de un diálogo directo con el funcionario, la contratación de alguna de las empresas del rubro manejadas por su marido; o podía habilitar un canal de comunicación entre él y el funcionario, lo que abría la puerta a una eventual negociación”. Cantero y Fernández se conocieron a fines de los 80’ en los pasillos de la Facultad de Derecho. Al poco tiempo, la joven estudiante terminó siendo su secretaria en la Superintendencia de Seguros (SSN), durante el gobierno de Carlos Menem. En esas oficinas, Cantero conoció y se enamoró de Martínez Sosa. Pasaron más de treinta años. A partir de ese momento, Fernández y Cantero trabajaron juntos casi toda la vida. “Era como amigos, se peleaban, se amigaban, tenían demasiada confianza”, resume un ex funcionario que integraba ese círculo íntimo. Los chats confirmaron ese ida y vuelta. En mayo de 2019, tras el anuncio sorpresivo de la candidatura presidencial de Alberto Fernández, Cantero vio una oportunidad de negocios y volvió a las oficinas de su jefe. El 18 de mayo le escribió al flamante candidato para expresarle la “felicidad” de su pareja. - Cantero: “Jefe te volviste loco?” / “25 años te cuide para esto?” / “Supongo que a partir de ahora no me vas a contestar mas” / “Un clásico”. - Fernández: “Deja de protestar!!!”. - Cantero: “No te voto” / “Y conmigo comportate que yo soy Coto” / “A vos te conozco” / “Hecky está Feliz”. - Fernández: “Vamos a volver” A partir de ese momento, se sumó otro personaje clave a la trama: Daniel Rodriguez, alias “El Gordo Dani”, quien se transformaría en el nexo entre Fernández y Cantero/Martínez Sosa. Rodríguez conocía a Fernández desde que era jefe de Gabinete de Néstor Kirchner. Retirado de la Policía Federal, por la rama de Bomberos, formó parte de su custodia durante varios años. Luego pasó a encargarse de sus cuestiones personales, una suerte de cadete todo terreno. Y terminó siendo el intendente de Olivos. Rodriguez también había sido empleado de Martínez Sosa cuando Fernández estaba en el llano. El empresario le pagaba un sueldo de manera regular. Cuando aterrizó en la quinta de Olivos, el broker lo visitaba con frecuencia. En los chats aparecieron varios fotos que dan cuenta de esa reuniones. En plena cuarentena, Martínez Sosa se sacaba selfies almorzando y cenando con su ex empleado, que ya se había convertido en la mano derecha del Presidente. El fallo del juez Casanello reveló conversaciones entre Cantero y Rodriguez que hasta ahora no se conocían. En plena campaña, la secretaria histórica de Fernández hablaba de su “PYME” y le pedía al ex policía que haga “relaciones públicas” con otros políticos. El siguiente chat se registró el 7 de agosto de 2019. - Cantero: “Gordo necesito 2 favores para nuestra PYME. Se te va a acercar Roxana Bertone. Xq están todos preg como van al acto. Está colgada pobre y hizo x Hecky muchas cosas mientras fue gobernadora. Otra es que ubiques a Melella nuevo gob de Tierra del Fuego y te hagas el simpático y de paso le digas que sos como mi hno y también trabajás para Heccky (...) Se llaman relaciones públicas”. - Rodríguez: “Sí sé que es eso”. La aparición del actual gobernador de Tierra del Fuego Gustavo Melella y de la ex gobernadora Roxana Bertone no es casual. La empresa de Martínez Sosa nació en esa provincia y luego se expandió a todo el país. Cuando fue electo gobernador, Melella le cedió al empresario el control absoluto de todas las contrataciones estatales. El 24 de julio de 2020, tal como reveló Infobae, la empresa del broker firmó un contrato de asesoramiento con la provincia fueguina. A partir de ese momento, todos los seguros pasaron por sus manos y se quedó con millonarias comisiones. Cantero estaba segura que la candidatura de Alberto Fernández era una oportunidad única. El 6 de septiembre de 2019, otra vez le escribió a Rodriguez. -Cantero: “Gordo si no hacemos guita con esto somos unos pelotudos”. - Rodríguez: “Esperemos no serlo”. - Cantero: “Te estaba jodiendo con lo anterior”. El 29 de octubre de ese año, 48 horas después de las elecciones presidenciales que le dieron el triunfo a Fernández en primera vuelta, otra vez la secretaria dejó por escrito su verdadero plan en un mensaje a Rodriguez: “Queremos los seguros. Solo eso me importa de Manzur. Vos sos el que mejor relación tiene con él. Más que cualquiera. Es x nuestra PYME”. La Pyme tenía otros socios. “La Pyme de Vivi, el Gordito y yo”, le escribió Cantero a Martínez Sosa antes de las elecciones. El “Gordito” podría ser su hermano Sebastián, dedicado al rubro inmobiliario, y “Vivi” era Viviana, su hermana. Las hermanas Cantero trabajaron como secretarias de Alberto en el gobierno de Néstor Kirchner. Las dos tenían carácter fuerte pero María siempre tuvo otro perfil. “Le gustaba vestirse como una reina, llevaba carteras de Prada o Gucci. Hasta iba a trabajar en un Audi TT, no lo podíamos creer. En un momento le tuvieron que decir que no deje más el auto en la explanada de Casa Rosada”, cuenta un ex empleado que tuvo trato con ambas. Apenas aterrizó en la Rosada, María se interesó por la agenda presidencial con el fin de hacer negocios. “Quiero seguir manejando la agenda que es lo que me gusta y quiero hacer (...) Están todos de acuerdo en que tenemos que ordenarlo y si ve a Ana puede hacerlo yo pierdo la agenda que es lo que me sirve a mí”, le escribió al “Gordo” Rodriguez el 30 de diciembre de 2019. Fotografía: Adrián Escandar Cantero no operaba sola. Al justificar los procesamientos, Casanello aseguró que Fernández estaba al tanto de las gestiones que desplegaba su secretaria. Pero lo imputó solo por el delito de negociaciones incompatibles con el ejercicio de la función pública, que tiene una pena de uno a seis años de prisión e inhabilitación especial perpetua. “La evidencia reunida mostró, además, que la vinculación entre Fernández, Martínez Sosa y Cantero, tanto en la etapa previa a la asunción del cargo como durante el desarrollo del mandato presidencial, excedió la de una mera relación de amistad y/o laboral. A la par de un trato frecuente y cercano (reflejado en múltiples intercambios por WhatsApp, llamadas telefónicas, visitas y registros fotográficos), se comprobó la entrega de obsequios, flujos dinerarios y gestión de favores personales”, detalló el juez en una resolución de más de 400 páginas. Infobae había anticipado hace dos semanas que el fallo estaba a punto de conocerse. Dos días después, Fernández pidió ampliar su indagatoria. No cambió nada. Ayer, el ex presidente publicó un descargo en redes sociales y denunció persecución “por ser peronista”.
Ver noticia original