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» Elterritorio
Fecha: 06/07/2025 00:24
Había llegado desde Wanda con su madre para trabajar en la venta ambulante. La Policía intervino y logró reunirlas. El caso reaviva las alertas sobre el trabajo infantil en la ciudad. sábado 05 de julio de 2025 | 15:03hs. El trabajo infantil es una problemática constante en Puerto Iguazú, desde la presencia de niños y niñas de comunidades mbya guaraní hasta menores oriundos de localidades cercanas, como Wanda, que llegan todos los días a la ciudad para vender arbolitos confeccionados con piedras semipreciosas. Muchos de estos chicos deambulan por el centro sin supervisión adulta, lo que los expone a situaciones de violencia, abusos, consumo de estupefacientes y otros peligros. El viernes por la tarde, una niña de 5 años fue resguardada por la Policía de Misiones luego de ser hallada llorando en una esquina por vecinos y turistas que transitaban por la zona. Según relataron los testigos, la pequeña tenía en sus manos dos arbolitos de piedras. Al ser consultada, contó que se había perdido de su madre, con quien había llegado desde Wanda para vender en la ciudad. Afirmó que era la segunda vez que venía y expresó su temor de que su madre regresara sin ella. Las personas que la auxiliaron alertaron a la comisaría, que se hizo presente minutos después. Mientras aguardaban la llegada del patrullero, la niña señaló a otros niños que habían llegado con ella a la ciudad. Dos personas salieron en su búsqueda y lograron dar con dos niñas que dijeron conocerla. Sin embargo, al ver el móvil policial, se asustaron y salieron corriendo: “La policía nos reta”, gritaron. La niña fue trasladada a la Comisaría de la Mujer, donde se activó el protocolo correspondiente para dar con el paradero de su madre. Desde la Comisaría Primera informaron poco después que la mujer se había acercado a buscar a la menor, ya que otros niños le habían avisado lo que había ocurrido. La madre explicó que mientras ella se encontraba vendiendo, los niños estaban sentados en una mesa cercana y les había pedido que no se movieran de allí. Dijo desconocer por qué se alejaron. También manifestó que vive de la venta de piedras y que no suele llevar a la niña con ella para trabajar. La Policía realizó las actuaciones administrativas necesarias para concretar la entrega de la menor.
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