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  • Cómo es la nutria gigante que está en peligro de extinción y regresó a los Esteros del Iberá tras 40 años

    Buenos Aires » Infobae

    Fecha: 03/07/2025 18:48

    La nutria gigante volvió a nadar libre en Iberá tras casi 40 años sin registros estables en los humedales de Argentina Después de casi cuatro décadas sin registros permanentes en Argentina, la nutria gigante (Pteronura brasiliensis), una de las especies más emblemáticas de los humedales sudamericanos, volvió a nadar libre en las aguas de los Esteros del Iberá, en la provincia de Corrientes. La reciente liberación de una familia conformada por dos adultos y sus dos crías marca un hito sin precedentes. También conocida como lobo gargantilla, ariraí o lobo grande de río, se trata de uno de los mamíferos más imponentes del sistema acuático sudamericano. Algunos ejemplares pueden alcanzar los 1,8 metros de largo, de los cuales casi un metro corresponde a su característica cola aplanada, y pesar alrededor de los 33 kilos. Es un animal diurno, extremadamente sociable, y vive en grupos familiares que incluyen una pareja monógama y sus crías, según los registros. Con hasta 1,8 metros de largo y 33 kilos de peso, la nutria gigante es el mayor mamífero acuático sudamericano “A pesar de que fue una presencia frecuente en toda la cuenca del río Paraná, los últimos grupos familiares de nutria gigante en Argentina fueron observados en el año 1986”, afirmó uno de los responsables del proyecto, Sebastián Di Martino, director de Conservación de Rewilding Argentina. “La nutria gigante es el principal depredador acuático de estos humedales y su dieta está compuesta casi totalmente por peces, por lo que su presencia aporta significativamente a mantener los ecosistemas saludables, en especial de los sistemas hídricos que habita”. El pelaje es marrón oscuro con una mancha clara en la garganta que varía en forma y extensión entre individuos, lo que permite identificarlos visualmente. Su alimentación se basa principalmente en peces grandes, aunque ocasionalmente incluye serpientes y yacarés pequeños. Además de su tamaño, la nutria gigante se distingue por sus fuertes vocalizaciones, su comportamiento curioso y territorial, y la construcción de madrigueras amplias en las orillas ribereñas. Su nombre científico, Pteronura, hace referencia a su cola en forma de ala (“ptero”, ala; “nura”, cola), una adaptación que le confiere gran destreza en el agua. ¿Cómo fue el proceso de reintroducción? El 30 de junio de 2025 se liberó una familia de cuatro nutrias gigantes en la Laguna Paraná del Gran Parque Iberá (@rewilding_argentina) El proyecto de reintroducción comenzó a gestarse en 2017, aunque su origen conceptual se remonta a 2006. El desafío era inédito: la especie no contaba con ejemplares silvestres ni en cautiverio en Argentina y nunca se había intentado una reintroducción de estas características en ningún otro país. Para avanzar, Rewilding Argentina trabajó junto a especialistas de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) y con el respaldo de zoológicos europeos que colaboraron con el envío de animales. En 2019 llegaron al Iberá los primeros ejemplares desde zoológicos de Hungría, Suecia, Dinamarca, Francia, España y Alemania. Entre ellos, Nima, donada por el Zoológico de Madrid, y Coco, desde el Zoológico de Givskud (Dinamarca), formaron una pareja que en noviembre de 2024 tuvo dos crías: Pirú y Kyra. El 30 de junio de 2025, las cuatro nutrias fueron liberadas en la Laguna Paraná, en el corazón del Gran Parque Iberá. “El proyecto de reintroducción de nutria gigante que llevamos adelante en Argentina y en el Gran Parque Iberá es único a nivel mundial y es la primera vez que se intenta traer de vuelta a una especie de mamífero extinto en Argentina; estas y otras características posicionan a nuestro trabajo a la vanguardia global de restauración de especies y ambientes”, destacó Guillermo Díaz Cornejo, vocal de la Administración de Parques Nacionales. Se usaron arneses de monitoreo y estudios de ADN ambiental para seguir la adaptación de los ejemplares liberados (Gerardo Cerón/Rewilding Argentina) Para garantizar su éxito, el proceso incluyó el diseño de recintos de presuelta, la alimentación con peces vivos para fomentar la caza autónoma, el desarrollo de protocolos sanitarios y un sistema de monitoreo con arneses diseñados especialmente para estos animales. Además, con el apoyo del Instituto Tecnológico de Zúrich, se realizó un estudio de ADN ambiental para establecer una línea de base ecológica de las aguas del Iberá, a fin de evaluar el impacto del regreso de la especie en el ecosistema. Extinción y últimos avistamientos en la región Durante décadas, la nutria gigante habitó gran parte de los ríos Paraná y Uruguay, así como los afluentes del Pilcomayo y el Bermejo. Sin embargo, entre los siglos XIX y XX, la especie fue exterminada progresivamente debido a la caza intensiva, el tráfico de pieles, la pérdida de hábitat y la persecución directa. “Es diurna, muy curiosa, muy ruidosa y, cuando una nutria gigante es herida, el resto permanece a su lado”, explican desde Rewilding Argentina. Estas características la hicieron especialmente vulnerable. Los últimos registros confirmados en Argentina datan de 1986, en la provincia de Misiones. Desde entonces, solo hubo avistamientos aislados. En 2021, una cámara captó imágenes de un macho en el Parque Nacional El Impenetrable. Bautizado Teuco, se cree que nadó más de mil kilómetros desde el Pantanal paraguayo. El proyecto comenzó en 2017 y es el primero que intenta reintroducir un mamífero extinto en Argentina (Frank Hajek) Ese mismo año fue fotografiado en las costas de San Clemente del Tuyú, y en 2022 se obtuvo una imagen de otro ejemplar en Iberá, aunque no volvió a ser localizado. En 2023, pescadores de Villa Ángela capturaron imágenes de otro animal en la confluencia de los ríos Paraná y Paraguay. Entre el último grupo familiar avistado en 1986 y la llegada de la primera pareja a Iberá en 2019 transcurrieron más de 33 años. Ahora, gracias al esfuerzo articulado entre organizaciones nacionales e internacionales, la nutria gigante comenzó a reconquistar su lugar ancestral en los humedales del nordeste argentino. “Al reintroducir a la nutria gigante en Argentina podemos comenzar a restaurar la conectividad entre poblaciones aisladas y ayudar a recuperar esta especie clave en el corazón de Sudamérica”, concluyó Sebastián Di Martino.

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