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Parana » Informe Digital
Fecha: 01/07/2025 19:01
La última vez que Javier Milei visitó la Exposición Rural de Palermo, hace casi un año, pronunció todo lo que un productor agropecuario anhela escuchar: que el campo es el motor de la economía argentina, que los políticos han abusado históricamente de esa riqueza “para financiar sus aventuras dirigistas” y, por último, que se comprometía a eliminar las retenciones. “Nadie tiene derecho a pedirles nada: sé que han sido saqueados durante décadas”, reafirmó, aunque con una salvedad: “El programa económico tiene tiempos y condiciones”. Esta noción de los plazos genera inquietud y divisiones entre los socios, quienes esperan su regreso el 26 de este mes para la inauguración oficial de la muestra y se cuestionan hasta cuándo deberán aguardar. La impaciencia ha desatado la rivalidad interna. Esto coloca a Nicolás Pino, presidente de la Sociedad Rural Argentina (SRA), en una posición complicada, pues ahora debe decidir el tono del reclamo que lo une al resto de las entidades de la Mesa de Enlace. “Yo sería más enérgico: la dirigencia debe expresar con firmeza lo que representa”, comentó a LA NACION Marcos Pereda, vicepresidente y aliado de Pino. “¿Más enérgico que solicitar en un comunicado una Argentina sin retenciones?”, se preguntan quienes están cerca de Pino. La tensión es evidente incluso en los grupos de WhatsApp. “Sin mencionarlo, buscan retenciones segmentadas: cero para el norte y para la zona núcleo… [más altas]”, escribió alguien el lunes en un chat de socios. Santos Zuberbuhler, productor y exdirector de la entidad, ha estado publicando diariamente en X, exTwitter, desde hace una semana. “DÍA 7. No aflojar. Sigamos reclamando a la CEEA [Comisión de Enlace]. Para eso está. Derechos de exportación 0%. Las medidas y el reclamo, si no hay un liderazgo claro de la dirigencia, serán encabezados por las bases. Sumate, dale Like y Rt”, publicó el lunes. El presidente Javier Milei y el presidente de la Sociedad Rural Argentina (SRA), Nicolás Pino, en el acto inaugural en la exposición del año pasadoFabian Marelli Temas que se discutieron el viernes pasado en Paraná, durante una reunión de la Mesa de Enlace con el gobernador anfitrión, Rogelio Frigerio. Y el 15 de mayo pasado en Santa Fe con Maximiliano Pullaro. “Está todo muy caliente”, insistió uno de los socios. Sin embargo, no es sencillo canalizarlo de manera pública frente a una administración sensible a la crítica. Hace un mes y medio, Luis Caputo, ministro de Economía, canceló una visita a un almuerzo del Consejo Interamericano de Comercio y Producción (Cicyp) en el hotel Alvear, de Puerto Madero, al enterarse esa mañana de que Pereda, aún presidente del Cicyp, lo iba a recibir con un discurso sobre los perjuicios de las retenciones. Retenciones y dólares: tensión entre el campo y el Gobierno “No tengo nada que ganar yendo; tengo mucho trabajo”, expresaron que comentó Caputo en privado, y decidió no asistir. Pereda intentó insistir luego con una llamada personal, pero no hubo respuesta. Los organizadores invitaron en el último momento a otro integrante del Gabinete, Federico Sturzenegger, quien interrumpió otro almuerzo con economistas para estar unos minutos en el Alvear, de donde se marchó sin comer y dejó una respuesta a Pereda: “Todos los impuestos son distorsivos. No me pidan que baje impuestos, pídanme que baje el gasto: cuando una administración gasta poco, puede devolverlo en impuestos. Necesitamos que ustedes sean socios de la motosierra.” Marcos Pereda, vicepresidente de la Rural y expresidente del Consejo Interamericano de Comercio y Producción (Cicyp) A esto se suma una cuestión interna que complica la situación dentro de la Rural. Pino y Pereda llegaron a la conducción con la misma lista y mantienen una buena relación, pero algo ocurrió entre ambos en el tiempo reciente. La tradición no escrita de la entidad sugiere que los presidentes ocupen el cargo por dos períodos de tres años y luego sean sucedidos por el vicepresidente. ¿Sucederá esto en las elecciones de septiembre del próximo año con Pereda? Se supone que sí. Sin embargo, hay productores que temen que Pino busque un período adicional, como sucedió en su momento con Guillermo Alchouron. Recientemente, LA NACION reveló que Pino, por su parte, ha anticipado a sus allegados que se postulará el año que viene. Detalles que no alteran la incógnita central: ¿cómo quejarse de la presión impositiva ante un Gobierno que conceptualmente coincide con todos, pero que al mismo tiempo necesita mantener un equilibrio fiscal? ¿Cómo hacerlo, además, con el propio Milei como invitado? Este es el dilema de Pino, que además tiene una muy buena relación con el Presidente. Fue él quien, a principios de enero, cuando la sequía apremiaba a los productores, le transmitió personalmente al líder libertario la situación, que horas después tuvo una respuesta: el Gobierno anunció una rebaja transitoria en retenciones que, para la soja, el maíz, el girasol y el sorgo, finalizó ayer. Nicolas Pino tiene una buena relación con Javier MileiFabian Marelli La decisión benefició tanto al fisco como al sector. Durante esos seis meses, por ejemplo, el volumen liquidado aumentó un 22% en comparación con el mismo período del año anterior y, según un informe de la Rural, los productores obtuvieron 544 millones de dólares adicionales. Un alivio que ahora nadie desea perder y que incrementa la ansiedad. En este contexto, la Mesa de Enlace emitió un comunicado que, desde el título, reclamaba “Una Argentina sin retenciones”, exigiendo una solución profunda: “No hay más margen para medidas discrecionales de corto alcance, que solo profundizan la incertidumbre y la desazón.” Todos están tan sensibles que incluso la hora en que cada entidad lo publicó en X resultó relevante. Coninagro lo publicó a las 12:30. Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), tres minutos antes: a las 12:27. Federación Agraria, a las 12:51. Los más impacientes corrieron enseguida a la cuenta de la Rural y se obsesionaron. Contaban los minutos. Vieron que incluso antes, a la 1:49, apareció una publicación personal de Pereda desde una cuenta que recién acaba de inaugurar y que necesita tiempo para crecer: tiene 37 seguidores. ¿Y la cuenta de la Rural? Para alivio de todos, apareció a las 3:44. Todo muy elocuente: los tiempos del campo no son los de Milei.
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