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Buenos Aires » Infobae
Fecha: 01/07/2025 06:45
Este sorbete casero se elabora combinando frutas congeladas con queso crema y se le puede agregar un toque de miel o azúcar para equilibrar la acidez El sorbete de frutas con queso crema es una de esas preparaciones refrescantes y deliciosas que sorprenden por su textura cremosa, a pesar de no llevar nata ni heladera. Ideal para los días calurosos o como postre liviano pero sabroso, este sorbete se puede preparar en minutos con frutas congeladas y un toque de queso crema que le da una untuosidad irresistible. Esta receta fusiona dos mundos: la ligereza frutal del clásico sorbete italiano y la cremosidad del cheesecake gracias al queso crema. Aunque no es una preparación tradicional, se ha vuelto muy popular en redes sociales y blogs de cocina por su facilidad y resultados impactantes. Admite infinitas variaciones según la fruta elegida —fresas, mango, durazno, frutos rojos— y es ideal para aprovechar fruta madura congelada. Es una alternativa saludable frente a los helados industriales y, además, no necesita máquinas especiales. ¡Perfecto para sorprender en casa sin complicarse! Receta de sorbete de frutas con queso crema Este sorbete casero se elabora combinando frutas congeladas con queso crema, un poco de jugo cítrico y, si se desea, un toque de miel o azúcar para equilibrar la acidez. Todo se mezcla en una licuadora o procesadora hasta obtener una textura cremosa y homogénea que se puede disfrutar al instante o guardar en el congelador. Lo mejor de esta receta es su versatilidad: puedes usar mango para un sorbete tropical, fresas para un sabor más clásico o una mezcla de frutos del bosque para un resultado vibrante y antioxidante. El queso crema suaviza la acidez y agrega cuerpo, haciendo que el sorbete parezca casi un helado, sin necesidad de nata ni huevos. Tiempo de preparación La receta es muy rápida y toma aproximadamente 10 a 15 minutos en total: 5 minutos para reunir los ingredientes y preparar la licuadora. 5 a 10 minutos para triturar todo hasta lograr la textura deseada. No requiere tiempo de cocción, aunque puede conservarse congelado si se desea una consistencia más firme. Ingredientes 3 tazas de fruta congelada (mango, fresa, frambuesas, arándanos o mezcla). 100 gramos de queso crema (a temperatura ambiente). 2 cucharadas de jugo de limón (o naranja si prefieres menos acidez). 2 a 3 cucharadas de miel, jarabe de agave o azúcar (opcional, al gusto). 1/4 taza de agua o leche (solo si la mezcla necesita ayuda para licuar). Cómo hacer sorbete de frutas con queso crema, paso a paso Sacar el queso crema de la heladera 10 minutos antes para que esté más suave. Colocar en el vaso de la licuadora o procesadora la fruta congelada. Agregar el queso crema, el jugo de limón y el endulzante elegido. Triturar todo a velocidad media-alta, deteniéndose de vez en cuando para remover y ayudar a que todo se mezcle de forma homogénea. Si la mezcla está muy espesa, añadir un chorrito de agua o leche hasta que se vuelva cremosa pero firme. Servir inmediatamente como un sorbete suave o llevar al congelador por 1-2 horas si se prefiere una textura más firme. Decorar con hojas de menta, trozos de fruta fresca o ralladura de cítrico antes de servir. ¿Cuántas porciones rinde esta receta? Con las cantidades indicadas, esta receta rinde entre 4 a 6 porciones pequeñas, ideales como postre individual o merienda ligera. ¿Cuál es el valor nutricional de cada porción de esta receta? Cada porción de este sorbete contiene aproximadamente: Calorías: 130 Grasas: 5 g Grasas saturadas: 3 g Carbohidratos: 20 g Azúcares: 15 g Proteínas: 2 g Estas son estimaciones, y los valores nutricionales precisos dependen de los ingredientes específicos utilizados en la preparación y las cantidades de cada porción. ¿Cuánto tiempo se puede conservar esta preparación? El sorbete puede conservarse en el congelador por hasta 7 días en un recipiente hermético. Para servirlo después del congelado, se recomienda dejarlo reposar a temperatura ambiente durante 10 minutos antes de consumir para recuperar su textura cremosa.
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