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» Data Chaco
Fecha: 30/06/2025 20:36
A inicios del año, el Gobierno argentino anunció la implementación de un sistema de flotación cambiaria entre dos bandas: 1200 como mínimo y 1400 como máximo. La flotación será libre dentro de ese límite, pero si toca una de las bandas habrá intervención del Banco Central para bajar o subir el tipo de cambio según lo que suceda. El objetivo del Gobierno es mantener estable el tipo de cambio y evitar fluctuaciones bruscas. Ahora, es momento de preguntarse la viabilidad de este sistema y si existe algún ejemplo en el mundo que sea caso de éxito. La respuesta, en principio, es sí, pero con matices. India, Singapur, Perú, Turquía e Indonesia aplican este método, pero el presidente Javier Milei tiene en la mira el modelo de competencia de moneda implementado en el país sudamericano, que permite que el sol peruano (la moneda de la nación andina) se mantenga estable y no pierda su valor a pesar de los vaivenes políticos y económicos. Lo principal es la independencia del Banco Central, algo que no sucedió casi nunca en Argentina, al que los gobiernos recurrían constantemente para tapar el déficit fiscal y llegar a las elecciones cada dos años. El sol peruano es la moneda que menos valor pierde frente al dólar con respecto al resto de las divisas de América Latina y no tiende a devaluarse frente a eventos económicos adversos en la región. Guillermo D. Olmo, corresponsal de la BBC en Perú, explicó que en el sistema flotante "el tipo de cambio se mueve libremente, ya que el banco central no interviene nunca en el mercado cambiario. Es el que siguen los países europeos que comparten el euro, o en América Latina, por ejemplo, Chile. Esto puede dar lugar a grandes oscilaciones influidas por la coyuntura o factores económicos externos". Luego de ese modelo está la flotación sucia, aplicada en Perú, sistema en el que el tipo de cambio fluctúa pero de forma restringida debido a una intervención limitada del Banco Central de Reserva del Perú (BCRP). El economista de la Pontificia Universidad Católica del Perú y ministro de Economía en el Gobierno de Francisco Sagasti (2020-2021), Waldo Mendoza, señaló a BBC Mundo: "El banco central rema en contra de la corriente en el mercado cambiario. Tiende a comprar dólares cuando el tipo de cambio baja, y tiende a vender cuando el tipo de cambio sube". De esta forma, se logra mantener estable el valor de la divisa. LA REFORMA MONETARIA DE PERÚ Y LAS DIFERENCIAS CON ARGENTINA Con la idea de salir de la hiperinflación, el Gobierno de Alberto Fujimori creó una nueva moneda en 1991 llamado nuevo sol (aunque se le dice sol). Al comienzo se implementó el modelo de tipo de cambio fijo, pero después se flexibilizó y se estableció la flutación sucia. Obtener una inflación de un dígito le llevó a Perú cinco años aproximadamente, aunque al tercer año logró una significativa estabilidad. En los primeros años, se regirstraron intervenciones limitadas y ocasionales. Desde el 2002, el BCRP estableció el Esquema de Metas de Inflación, que se trata del objetivo de mantener los niveles de inflación entre 1% y 3%, y de esa forma la flotación sucia permaneció como modelo. Actualmente, la inflación de Perú es del 1,69%, según el BCRP. En Argentina, el Banco Central tiene una política más restrictiva del tipo de cambio ya que interviene regularmente. Debido a la falta de reservas heredada de la gestión kirchnerista, el Gobierno avanzó hacia un esquema de flotación administrada, lo que no quiere decir que no se pueda flexibilizar más esta política. Para ello, el Gobierno tiene el desafío de mantener el equilibrio de las cuentas públicas y dotar de más independencia al Banco Central. Notas Relacionadas
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