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» Comercio y Justicia
Fecha: 23/06/2025 14:26
A través de un estudio genético, analiza el desarrollo interno de pupas de mosca halladas en cadáveres. La herramienta podría aportar mayor precisión a las pericias y procesos judiciales Una innovadora investigación encabezada por Ana Pereira, científica del Conicet Patagonia Confluencia, busca convertirse en una herramienta clave para los procesos judiciales. El estudio, que acaba de ser publicado en la revista International Journal of Legal Medicine, propone un nuevo enfoque para determinar el momento de la muerte de una persona a partir del análisis genético de “pupas de mosca” encontradas en el lugar del hallazgo del cuerpo. Pereira trabaja en el Centro de Investigaciones en Toxicología Ambiental y Agrobiotecnología del Comahue, y su línea de investigación se centra en una familia particular de insectos: los califóridos. Estas moscas, conocidas por alimentarse de materia orgánica en descomposición, son las primeras en llegar a un cuerpo sin vida. Depositan allí sus huevos, generalmente en cavidades naturales o heridas, dando inicio a un ciclo biológico que puede aportar información valiosa en investigaciones forenses. Según explicó, el ciclo comienza cuando las hembras depositan los huevos. Luego, nacen las larvas, que atraviesan tres estadios de crecimiento alimentándose del cuerpo. Una vez alcanzado cierto desarrollo, entran en la fase de pupa, donde dejan de moverse y se inicia la metamorfosis completa dentro de una cápsula protectora. Es justamente este estadio inmóvil el que presenta mayores desafíos para los entomólogos forenses, ya que las transformaciones ocurren dentro del pupario y no son visibles externamente. Avances Hasta ahora, la edad de las larvas podía estimarse observando su tamaño y otras características morfológicas. Sin embargo, esas referencias no resultan útiles una vez que el insecto alcanza la etapa de pupa. Ahí es donde el estudio de Pereira abre nuevas posibilidades. Propone utilizar la actividad génica de las pupas para estimar con mayor precisión el tiempo que llevan sobre el cuerpo. Durante el estadio pupal, el ADN de la mosca “enciende” y “apaga” genes específicos necesarios para la metamorfosis, como los que forman alas, patas y órganos internos. Este patrón de expresión génica varía con el paso del tiempo, y eso es lo que Pereira y su equipo decidieron estudiar. Miden cómo se expresan seis genes diferentes a lo largo del desarrollo pupal. Por ejemplo, el gen wingless, que participa en la formación de las alas, tiene alta actividad en los primeros días y luego disminuye. Esa dinámica nos permite construir una línea de tiempo genética. El método consiste, entonces, en tomar una muestra de pupa recolectada como evidencia forense, detener su desarrollo y analizar en el laboratorio qué genes están activos y en qué grado. Al comparar esos datos con los patrones previamente establecidos en el estudio, es posible estimar cuántos días lleva desarrollándose esa pupa sobre el cuerpo. Esta información resulta crítica para determinar el intervalo post mortem con mayor exactitud. Ciencia básica y práctica judicial Finalmente, la científica concluyó: “Gracias a esa información, pudimos crear herramientas gráficas que permiten estimar en qué momento del desarrollo se encuentra una pupa. Por ejemplo, si llega una muestra al laboratorio, ahora podemos decir con mayor precisión si está en el primer cuarto del desarrollo, a la mitad, en el tercer cuarto o en la etapa final”. Y agrega: “Esto lo hacemos combinando la expresión de dos o tres genes. Y eso ya representa un gran avance, porque nos permite acercarnos mucho más a datos que antes no podíamos estimar con tanta exactitud”. En conclusión, este enfoque representa un salto cualitativo respecto a los métodos tradicionales basados únicamente en la morfología del insecto. Desde el punto de vista legal, una mayor precisión en la estimación del intervalo post mortem. Esto podría fortalecer peritajes y aportar evidencia científica más robusta en causas judiciales. Para el ámbito jurídico, el estudio resulta particularmente relevante: no sólo plantea una herramienta innovadora para los equipos de investigación criminal y peritos forenses, sino que demuestra el potencial del cruce entre ciencia básica y práctica judicial.
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