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Parana » AnalisisDigital
Fecha: 18/06/2025 08:33
Por Hugo Remedi (especial para ANALISIS) El engendro que recientemente reemplazó al Iosper tan siquiera ha empezado a gatear y ya necesita de urgentes cirugías reparadoras que permitan subsanar los terribles vacíos que tiene el Oser, delatando de modo absoluto que tanto el tema de los altos sueldos como el del manejo irregular del manejo financiero fueron pueriles mentiras que se usaron para avanzar solapadamente con la destrucción de la obra social de los trabajadores estatales de Entre Ríos. Después de todo lo que se fue advirtiendo durante el proceso que llevaron adelante el gobierno, UPCN y legisladores militantes de la obediencia debida y de las otras, conseguidas a buen precio en La saladita de la Cámara de Senadores, ahora resulta que para que la nueva obra social funcione y tenga sustentabilidad, hay que ir al hueso urgente. Antes, ante igual diagnóstico jamás se habló de eso, lo escondieron a sabiendas. Por supuesto haberlo hecho en aquel momento hubiese delatado que, detonar el Iosper con argumentos estremecedores, sensibles socialmente, era solo para sacar del medio explicaciones mucho más válidas que las usadas en su momento por el gobierno para avanzar con la topadora. Por eso, era sabido que tarde o temprano la comadreja iba a saltar y salir de la cueva. El exponencial incremento de los amparos por falta de respuesta en estos 6 meses de la Intervención de Mariano Gallegos, puso en evidencia la mayor de las heridas que el nuevo bodoque tiene que abordar como es la falta de sustentabilidad de la obra social. Y el problema grave se llama: falta mucha plata. Apostar a que bajar sueldos y ordenar todo lo que sea internamente fueran las respuestas de ocasión para poner a la obra social en orden, sería de un abuso tal como jugar al tiro al pichón. Curiosamente (o no claro) quien advierte tal situación con el grito en el cielo como para despegarse del aborto, es nada menos que UPCN. Quién en la mayor de las hipocresías advierte, amenaza que si no se toman algunas decisiones imprescindibles “no tiene sentido” ocupar el cargo destinado a UPCN en el nuevo directorio. "Tiembla Rogelio Frigerio", puede llegarse a suponer ante tamaña desconsideración. O por si acaso también puede suceder que lo que exige UPCN, ya está acordado tal como hicieron cuando implosionaron al Iosper. Algo así como “yo reclamo lo que ya acordamos me vas dar”. En realidad la principal inquietud de los miembros gremiales de la mesa chica del contubernio es saber concretamente de donde va a salir la plata que se necesita para garantizar la verdadera sustentabilidad de la obra social. Es por ello que no vayan a creer que los integrantes del Oser -que no respondan al gobierno de Frigerio- van a poner la cara frente a los afiliados (y sobre todo con lo que intentaron maquillar durante la taimada negociación), si no hay recursos para dar respuestas. Ahora es la face o los flecos. Tanto el gobierno como todos sus socios ahora tienen que medir consecuencias. En verdad a las obras sociales no les alcanza con lo que aportan los trabajadores y la patronal. Si a ello se le suma la creciente incorporación de tecnología de punta y de medicación extraordinaria de altísimo costo es imprescindible entonces que se vaya por una fuente de financiamiento que permita contener el costo creciente. Y entonces la pregunta de rigor es ¿a quien le van a sacar la plata para crear algún fondo de redistribución? ¿a los afiliados que ya tienen el descuento de rigor y en muchos casos el del fondo voluntario? ¿o van a ir por el aguinaldo? ¿o creando un nuevo impuesto? ¿O van a bajar la calidad prestacional? O sea, todas incógnitas peligrosas. Vender miserias relacionadas con lo de los altos sueldos y lo de las irregularidades no tuvo muchos compradores convencidos, y es por ello que hoy los legisladores provinciales ya están metidos hasta los genitales. Pero, sin embargo, como padres de bien, tendrán que hacerse cargo del aborto y de sus consecuencias. Y de ahora en adelante en consecuencia, hacer todas la leyes que les exijan de arriba para limpiar la sangre derramada que dejaron de camino. Ahora no hay marcha atrás: a levantar las manitos todos. Y Frigerio, por su parte, cumplir con la “coherencia” demandada por UPCN, quien ahora pide que por el bien de la humanidad todos se sienten en la misma mesa a solucionar el balurdo que gestaron en una noche moralmente desgraciada y con concurrencia selectiva. Finalmente decir que aunque legalmente sea ahora, un afiliado del Oser, yo seguiré diciendo que mi obra social es el Iosper y lo será hasta que alguien alguna vez, quizás, le vuelva a dar su lugar en la historia.
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