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» Misioneslider
Fecha: 18/06/2025 13:00
El impuesto a las Ganancias es uno de los tributos más importantes en Argentina, ya que afecta directamente a miles de trabajadores en relación de dependencia. Con la actualización de las escalas que se aplica dos veces al año, es fundamental estar al tanto de cuáles serán los nuevos montos y cómo impactarán en los contribuyentes. Según estimaciones de tributaristas, se espera que a partir de julio de 2025, aquellos trabajadores que perciban sueldos brutos mensuales superiores a los $2.3 millones comiencen a pagar el Impuesto a las Ganancias. Con una inflación estimada del 1.5% para junio, el ajuste de los valores se calcula sobre una suba acumulada del 14.96% en los primeros seis meses del año. Esto impactará directamente en el mínimo no imponible del impuesto, siendo los nuevos pisos salariales estimados los siguientes: – Soltero sin hijos: desde $2.329.287,39 brutos, o $1.933.316,83 netos – Soltero con 1 hijo: desde $2.520.039,89 brutos, o $2.091.633,11 netos – Soltero con 2 hijos: desde $2.710.782,39 brutos, $2.249.949,38 netos – Casado sin hijos: desde $2.707.526,86 brutos, $2.247.247,29 netos – Casado con 1 hijo: desde $2.898.269,36 brutos, $2.405.563,57 netos – Casado con 2 hijos: desde $3.089.011,87 brutos, $2.563.879,85 netos Estos cálculos toman en cuenta una alícuota promedio de retención del 17%, e incluyen la parte proporcional del aguinaldo. Es importante tener en cuenta que el valor final puede variar dependiendo de cómo termine la inflación de junio y la interpretación final de la normativa por parte de ARCA. Además de la actualización del impuesto a las Ganancias, los contribuyentes también deben prestar atención a los vencimientos de las declaraciones juradas anuales de Ganancias y Bienes Personales, que originalmente estaban previstos para el 23 y 24 de junio. Ante esto, ARCA otorgó una prórroga mínima de tres días hábiles, lo que ha generado quejas por parte de los contadores, quienes solicitan una extensión hasta el 30 de junio. En cuanto al nuevo régimen simplificado de Ganancias para personas físicas, se espera que en los próximos días se incluya una novedad importante: la posibilidad de adherir incluso si se obtienen rentas del exterior. Hasta ahora, la norma era limitante y dejaba afuera a los contribuyentes con renta del exterior. Con este cambio, se abrirá la posibilidad para que más personas puedan acceder al régimen simplificado, aunque deberán declarar la parte correspondiente a la renta extranjera. En resumen, a partir de julio de 2025, más trabajadores comenzarán a pagar el Impuesto a las Ganancias debido al ajuste de escalas semestral. Es importante estar informado sobre los nuevos montos y condiciones, así como cumplir con los plazos establecidos por ARCA para las declaraciones juradas. Además, la inclusión de contribuyentes con rentas del exterior en el régimen simplificado representa un avance en la simplificación y equidad del sistema tributario. En medio de la complejidad y exigencia de las obligaciones tributarias, es común que tanto profesionales como contribuyentes busquen alivio en los plazos para cumplir con sus responsabilidades fiscales. La presión de presentar declaraciones, pagar impuestos y cumplir con las normativas puede resultar abrumadora, especialmente en épocas de crisis económica o situaciones imprevistas que afectan la estabilidad financiera de las personas y empresas. La importancia de los plazos flexibles En este contexto, es fundamental que las autoridades tributarias consideren la posibilidad de otorgar plazos flexibles y alternativas para que los contribuyentes puedan cumplir con sus obligaciones de manera oportuna y sin quedar expuestos a sanciones por demoras. La flexibilidad en los plazos no solo beneficia a los contribuyentes que se encuentran en situaciones complicadas, sino que también contribuye a fomentar el cumplimiento voluntario de las obligaciones fiscales, promoviendo así la transparencia y la confianza en el sistema tributario. El impacto de la pandemia en las obligaciones tributarias La crisis sanitaria provocada por la pandemia de COVID-19 ha tenido un impacto significativo en la economía mundial, afectando tanto a empresas como a trabajadores independientes. Las restricciones de movilidad, el cierre de negocios y la disminución de la actividad económica han generado dificultades financieras para muchos contribuyentes, quienes han visto disminuidos sus ingresos y enfrentan problemas para cumplir con sus obligaciones tributarias en los plazos establecidos. En este sentido, la extensión de plazos para la presentación de declaraciones y el pago de impuestos se ha convertido en una medida necesaria para aliviar la carga financiera de los contribuyentes y garantizar la continuidad de sus actividades económicas. La flexibilización de los plazos tributarios ha sido clave para mitigar el impacto económico de la crisis y brindar un respiro a aquellos que se han visto afectados por la situación actual. La importancia de la colaboración entre autoridades y contribuyentes La colaboración entre las autoridades fiscales y los contribuyentes es fundamental para encontrar soluciones que permitan cumplir con las obligaciones tributarias de manera efectiva y sin poner en riesgo la estabilidad financiera de los contribuyentes. La comunicación transparente y la disposición al diálogo son clave para establecer plazos flexibles que se ajusten a las necesidades de cada contribuyente, considerando sus circunstancias particulares y ofreciendo alternativas viables para cumplir con las obligaciones fiscales. Además, es importante que los contribuyentes sean proactivos y busquen asesoramiento tributario para gestionar de manera adecuada sus obligaciones fiscales y aprovechar las opciones disponibles para cumplir con los plazos establecidos. La planificación fiscal y la correcta gestión de los recursos financieros son fundamentales para garantizar el cumplimiento de las obligaciones tributarias de manera eficiente y sin contratiempos. Conclusiones En definitiva, la flexibilización de plazos para cumplir con las obligaciones tributarias es una medida necesaria en situaciones excepcionales que afectan la estabilidad financiera de los contribuyentes. La colaboración entre autoridades fiscales y contribuyentes, la comunicación transparente y la planificación fiscal son clave para encontrar soluciones que permitan cumplir con las obligaciones tributarias de manera efectiva y sin generar impactos negativos en la economía de las personas y empresas. Por tanto, es fundamental que se sigan implementando medidas que alivien la carga tributaria de los contribuyentes y fomenten el cumplimiento voluntario de las obligaciones fiscales.
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