17/06/2025 03:26
17/06/2025 03:26
17/06/2025 03:26
17/06/2025 03:25
17/06/2025 03:25
17/06/2025 03:25
17/06/2025 03:24
17/06/2025 03:24
17/06/2025 03:23
17/06/2025 03:23
» LaVozdeMisiones
Fecha: 16/06/2025 21:40
Hoy se cumplen 70 años del Bombardeo a Plaza de Mayo de Buenos Aires, cuando miembros sublevados de la Fuerza Aérea Argentina mataron a más de 300 personas y dejaron más de mil heridos con la idea de derrocar a Juan Domingo Perón, un hecho histórico que abordó el cineasta misionero Maximiliano González en su miniserie “Las palomas y las bombas” (2016), proyectado ayer en el Centro Cultural Jean Lloret. “El bombardeo es como una respuesta simbólica al 17 de octubre de 1945”, reflexionó González. Esa mañana del 16 de junio de 1955, la Fuerza Área debía participar de un sobrevuelo como parte del acto de desagravio, luego de que una marcha por el Corpus Christi se izara y se quemara una Bandera Argentina, en medio de una tensión en escalada entre el gobierno, diversas facciones políticas y la Iglesia Católica. Uno de los picos se habían traducido con la suspensión de la enseñanza religiosa en las escuelas públicas. Como consecuencia, esa trágica mañana, más de cien bombas -entre 9 y 14 toneladas de explosivos- fueron arrojadas sobre la población civil. La jornada estaba nublada, algo que retrasó el despegue de los pilotos complotados con parte del Ejército que planeó el golpe contra Perón, algo que se consumaría tres meses después, con la autodenominada Revolución Libertadora. “Hay dos ejes que son fundamentales para entender del bombardeo y el post-bombardeo”, analizó González. “En primer lugar, es uno de los hechos probablemente más trágicos de la historia argentina, y ha sido invisibilizado tanto tiempo. No se estudia en las escuelas”, lamentó. “No hay tantas ficciones sobre el bombardeo, no hay muchos libros, no hubo muchas obras”, detalló. En el bombardeo a la Plaza de Mayo en 1955 “murieron entre 300 y 400 personas, hubo cerca de mil heridos. Un hecho inédito. Jamás en la historia del mundo el ejército bombardeó y mató a civiles de su propio país”, criticó el realizador. Para González, “el bombardeo es como una respuesta simbólica al 17 de octubre del 45. Funciona como eso: como esa reacción de los poderes reales, sumado al Status Quo diez años después”. El cineasta y escritor misionero indicó que, “cuando el pueblo irrumpe en esa plaza es por primera vez en la historia para tomar las divisiones políticas en sus manos”, y “eso fue lo que nunca le perdonaron. Fue como una represalia, un disciplinamiento de los que siempre, a lo largo de la historia, habían tomado las decisiones, y que en esos diez años no lo hicieron”. Asimismo, con la idea de trazar una comparación con el presente, que tiene a la expresidenta Cristina Fernández como protagonista, González sostuvo que “los hechos históricos se repiten, no son exactamente lineales, no son las mismas herramientas. Pero me gusta analizarlas siempre como si fuera con una cámara un poco más alta para ver qué realmente está pasando”. “Ahora no hace falta bombardear, pero el concepto de, por lo menos mi análisis, es muy parecido”, apuntó sobre la condena a CFK por el caso Vialidad, hecho que la deja fuera de la carrera política y sin ninguna otra oportunidad de demostrar su inocencia en tribunales. Por eso, para el director de “Las palomas y las bombas”, que los tres miembros de la Corte Suprema de Justicia ratifiquen el fallo es “el hecho de proscribir, de condenar a una líder política que, durante un proceso de doce años confrontó con todos esos poderes: los fácticos, el económico y las Embajadas; el poder real, el Círculo Rojo que está en todos los países”. Para el realizador nacido en Iguazú, son esos poderes los que respondieron en las distintas etapas argentinas: “En el caso del 55, con el bombardeo; en el 75 con el Golpe de Estado, y en este caso la proscripción y la condena a quien representaba ese desafío al tocar los intereses del poder”. Por otra parte, a 50 años del Plan Cóndor que urdió golpes militares en Sudamérica, Maximiliano González presentará en Paraguay su última película sobre el tema. “El Cóndor y la niebla” se estrenará en Asunción, el 21 de junio, en el Centro Cultural Manzana de la Rivera, a las 18:30, con entrada libre y gratuita. Un día antes, a la misma hora y en el mismo espacio asunceno, González presentara su otro filme: “Quiero volverme tiempo. Víctor Heredia y Latinoamérica“, sobre la vida y la obra de una de las voces más comprometidas de la música popular.
Ver noticia original