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Chajari » Chajari al dia
Fecha: 13/06/2025 17:34
Por El Loco del Tablón “Crítica más, crítica menos, lo cierto es que la Selección quedó primera en las eliminatorias de la Copa del Mundo. Le sacó 10 puntos al segundo. Además, Lionel Scaloni, contra todos los pronósticos iniciales, sigue demostrando que sabe hacer las cosas. La Selección, bajo su dirección, ganó la Copa América 2021 y 2024; la Finalissima 2022; el Mundial de Qatar 2022; y además tiene el mayor invicto en la historia del seleccionado argentino: 36 partidos”, dijo el Abuelo. “Es una nueva etapa de la Selección. Varios recambios, Messi que lógicamente no es el de antes y no juega el partido completo, jugadores jóvenes que se calzan la albiceleste… Pero se mantiene el estilo de juego y los resultados favorables siguen llegando. Pensaba que este recambio se da justamente a 67 años del ´Desastre de Suecia´… Claro que no hay que ser supersticioso”, apuntó el veterano con una sonrisa. Prendió un cigarrillo, recibió el mate amargo de manos de la Porota y dijo: “Fue en 1958… Para la Argentina fue una vergüenza. Los diarios lo llamaron ´Desastre de Suecia´. La selección de fútbol había quedado eliminada de la Copa del Mundo de 1958, disputada en aquel país. En el último partido perdió nada menos que 6-1 con Checoslovaquia. ¡Y pensar que todos afirmaban que Argentina era gran candidata al título mayor!, pero al final salió a escondidas y para colmo, cuando llegaron a Ezeiza los fanáticos se querían comer crudos a los jugadores… ¡Qué papelón!… La actualidad es absolutamente distintas, más allá que, como dije, se comienza a gestar una nueva etapa por recambios lógicos de la edad”, dijo. “Nadie quiere nio espera que lo de Suecia se repita. Reitero esto porque el 15 de junio se cumplirá un nuevo aniversario, el número 67 más precisamente, de aquella debacle futbolística nacional” explicó agregando que “la albiceleste llegó al certamen como uno de los grandes candidatos, venía de ganar el Campeonato Sudamericano de 1957. Allí dieron cátedra jugando un fútbol de alto vuelo. Eso fue lo que dio tanta confianza a los argentinos -que dicho sea de paso para embalarnos sólo necesitamos una vuelta de rosca, algunas sonrisas y varios aplausos- y así se viajó a Suecia. Pero el rendimiento de los jugadores fue malo en el lejano país europeo. Se salvó Corbata y algún otro. Los resultados no fueron ni por asomo los que se esperaban”. “Si… Fue el 15 de junio de 1958 cuando Argentina afrontó el último encuentro del grupo A. Venía de perder en el debut ante Alemania Federal y de vencer a Irlanda del Norte con tantos de Corbatta, Menéndez y Avio. La definición del acceso o no a los cuartos de final dependía del partido con Checoslovaquia. Si ganaba, seguía, pero si perdía había que subirse al avión y volver a la casa con la frente marchita. Esto último fue lo que sucedió”, narró. “El equipo era dirigido por Guillermo Stábile, director técnico récord con 127 partidos como entrenador, pero los muchachos no hicieron pie en la cancha. Fue un desastre; uno de esos partidos que uno pretende que los 90 minutos pasen lo más rápido posible. Checoslovaquia superó amplia y cómodamente a Argentina. Zikan con 2 goles, Hovorka con otros 2, Dvorak y Feureisl con uno per cápita sentenciaron la goleada. Corbatta descontó de penal y llegó a su tercer tanto en el torneo. La verdad es que 6-1 en contra no solamente no era para compadrear, sino para esconderse”, destacó el veterano. “Lo curioso es que el equipo tenía grandes figuras, pero es evidente que con eso no alcanza. Jugaban Amadeo Carrizo, Pedro Dellacha, Federico Vairo, ´Pipo´ Rossi, Avio, Corbatta, el ´Beto´ Menéndez, Ángel Labruna, José Sanfilippo, entre otros. Por años fueron insultados por aquél Mundial”, dijo. “Checoslovaquia nos dio un baile con aprontes, firuletes y taconeos. Allí descubrimos que los jugadores eran lentos, que les faltaba estado físico y no tenían la menor idea de lo que era trabajar en equipo. El periodista Diego Lucero dijo que nuestro juego era prehistórico. Ricardo Lorenzo aseguró que nuestro equipo había sido superado por rapidez, estado atlético, organización, sobriedad y sentido práctico. Pero el más contundente fue Dante Panzeri, quien escribió que el mito de que somos los mejores del mundo había caducado y agregó que esa caída del fútbol argentino no sería la última. Contundente, pero como tantas veces tenía razón”, apuntó. “Ahora comienza otra etapa en la Selección. La del recambio lógico. Justo a 67 años del ´Desastre de Suecia´… Pero no hay que ser supersticiosos muchachos. Lo mejor está por venir”, indicó.
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