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Diamante » Neonetmusic
Fecha: 12/06/2025 10:06
Una serie de ataques coordinados sacudió este martes los departamentos de Valle del Cauca y Cauca, dejando un saldo trágico de al menos cinco muertos, entre ellos tres policías, y más de 40 heridos, incluidos civiles y una niña de cinco años. La violencia, que incluyó explosiones con motocicletas bomba y granadas, ha puesto en alerta máxima a las fuerzas de seguridad y revivido los fantasmas de épocas más oscuras del conflicto armado. La ciudad de Cali fue escenario de tres explosiones casi simultáneas cerca de estaciones policiales, con artefactos detonados en los barrios Mélendez, Manuela Beltrán y Los Mangos. Según el alcalde Alejandro Eder, los ataques causaron graves daños a viviendas, escuelas y comercios, además de cobrar la vida de un cuidador de motos, cuya bicicleta habría sido usada como arma. Las autoridades investigan si estos hechos están vinculados al reciente atentado contra el precandidato presidencial Miguel Uribe. Mientras Cali intentaba reponerse del caos, el Cauca enfrentaba su propia tragedia. Coches bomba estallaron en los municipios de El Bordo y Corinto, destruyendo más de 25 viviendas y locales. Además, en medio de enfrentamientos entre grupos armados ilegales y el Ejército, tres uniformados perdieron la vida: dos en el Cauca (Villa Rica y Caloto) y uno en Antioquia, durante labores de inteligencia. El director de la Policía, general Carlos Triana, calificó los hechos como un “dolor de patria” y prometió una respuesta contundente. El Ejército Nacional responsabilizó a grupos terroristas por los ataques, señalando que su objetivo era sembrar el pánico en el suroccidente del país. En un comunicado, la Tercera División condenó los actos en municipios como Morales, Buenos Aires y Toribio, donde se registraron combates. Mientras tanto, en Buenaventura, otro ataque con granada aumentó el balance de violencia, evidenciando una estrategia de ataques dispersos pero coordinados. Ante la escalada, el gobierno y las fuerzas de seguridad prometieron intensificar operativos para desarticular a los responsables. Sin embargo, las comunidades afectadas exigen mayor protección, mientras organizaciones humanitarias alertan sobre el riesgo de más víctimas civiles. Con el país en vilo, estos hechos reavivan el debate sobre la seguridad y la persistencia de grupos armados que desafían al Estado. Noticia vista: 708
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