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Parana » Informe Digital
Fecha: 10/06/2025 16:28
En un contexto donde los insumos biológicos ganan cada vez más relevancia en la agricultura, una de las cooperativas agrícolas más grandes del país ha decidido dar un paso estratégico: destinó US$6 millones a la construcción de su propia planta en Ramallo, Buenos Aires. Se trata de Agricultores Federados Argentinos SCL (AFA), que inaugurará pasado mañana una nueva unidad productiva en el Parque Industrial Comirsa, denominada BioAFA. En diálogo con LA NACION, José Luis Nardia, gerente de Insumos de la cooperativa y responsable del proyecto, explicó que esta iniciativa forma parte de un proceso de transformación en el mercado de insumos, caracterizado por la búsqueda de alternativas más sostenibles y la adopción de nuevas tecnologías. “Esto se enmarca en una tendencia global que otorga cada vez mayor importancia a los insumos más amigables con el ambiente. En ese grupo se encuentran los bioestimulantes y productos biológicos, que además optimizan el uso de fitosanitarios. No los reemplazan, pero complementan su eficacia. Esta mejoría se traduce en menores dosis o en un mayor rendimiento del producto. En casos concretos, los biofúngicos o bioinsecticidas pueden llegar a sustituir agroquímicos, aunque su función principal sigue siendo la de acompañamiento”, indicó. “Durante mucho tiempo hemos comercializado productos, pero siempre lo hicimos a través de convenios con terceros. Esta vez decidimos producirlos nosotros”, agregó. La planta BioAFA comenzó su construcción en febrero de 2024. Contará con una superficie de 1700 metros cuadrados y estará equipada con tecnología de última generación para procesos de fermentación, formulación y envasado. Se espera que durante su primer año operativo produzca aproximadamente 600.000 dosis, con capacidad para abarcar más de 1,5 millones de hectáreas por campaña. “Así como ya trabajamos con una planta de fitosanitarios, también surgió la idea de desarrollar una nueva planta de biológicos. La apuesta es diversificarnos hacia productos elaborados con insumos naturales, destinados a mejorar la productividad, pero con un menor impacto ambiental”, agregó Nardia. AFA ya opera una planta de formulación de herbicidas, insecticidas, fungicidas y coadyuvantes. El primer desarrollo de BioAFA será una línea de inoculantes para soja. Según Nardia, se trata de una formulación “tope de gama” que marcará el inicio de futuras líneas de productos bajo la marca de la cooperativa. Los biológicos ganan presencia en el mundoShutterstock – Shutterstock El crecimiento de este tipo de insumos está influenciado tanto por la demanda interna como por la evolución del mercado internacional. “Ambas circunstancias son relevantes. Por un lado, hay una demanda directa de nuestros socios y productores. Y, por otro, existe el interés de otras empresas”, explicó. En países como Brasil o Uruguay, el uso de biofungicidas e insecticidas naturales está más avanzado, mientras que en Argentina la adopción está en aumento, aunque con ritmos desiguales. A pesar del progreso, Nardia aclaró que los biológicos no reemplazarán por completo a los agroquímicos tradicionales en el corto plazo. “No creo que los biológicos sustituyan a los productos tradicionales, al menos no en el corto o mediano plazo. Quizás dentro de unas décadas sí lo hagan. Hoy son un complemento en una agricultura más amigable, ecológica y sostenible. También deben ser sostenibles a largo plazo, de modo que el productor pueda percibir los beneficios”, señaló. El ejecutivo advirtió que uno de los principales desafíos del segmento radica en los tiempos necesarios para observar resultados. “Yo lo describo como una venta artesanal, porque se requieren productos de calidad, condiciones adecuadas, seguimiento técnico y la posibilidad de que el productor vea los resultados. Esto implica un trabajo de posventa. A diferencia de un herbicida, cuyo efecto se percibe rápidamente al eliminar la maleza, en este caso, los beneficios se manifiestan más adelante: mejor enraizamiento, desarrollo de la planta y mayor potencial de rendimiento al final de la campaña”, explicó. Los biológicos complementan los agroquímicos Con más de 92 años de trayectoria, Agricultores Federados Argentinos cuenta actualmente con más de 36.000 asociados activos, presencia en más de 130 localidades distribuidas en 10 provincias argentinas y una red de 26 Centros Cooperativos Primarios. Su casa central se encuentra en Rosario, Santa Fe, y emplea a alrededor de 1700 personas en todo el país. La puesta en marcha de BioAFA se suma a una serie de iniciativas con las que la cooperativa busca mantenerse vigente, competitiva y al servicio de sus asociados. “No venimos a reemplazar todo lo que se utiliza hoy, sino a añadir una herramienta más. Una herramienta que responde a las tendencias del futuro. Queremos que nuestros productores tengan acceso a esa tecnología desde el primer momento”, concluyó Nardia.
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