07/06/2025 17:10
07/06/2025 17:07
07/06/2025 17:01
07/06/2025 16:58
07/06/2025 16:55
07/06/2025 16:55
07/06/2025 16:53
07/06/2025 16:52
07/06/2025 16:52
07/06/2025 16:52
» Primerochaco
Fecha: 07/06/2025 12:00
La pizza en Argentina no es solo un plato, sino una parte fundamental de nuestra cultura gastronómica. Desde que los inmigrantes italianos trajeron sus tradiciones a finales del siglo XIX, este manjar se ha transformado en uno de los favoritos de los argentinos. Ya sea en una reunión familiar, un encuentro con amigos o como un antojo de media semana, la pizza casera se ha ganado un lugar en la mesa de todos. La receta de la pizza casera perfecta requiere de paciencia y amor, elementos esenciales en la cocina argentina. La masa, que puede parecer un simple conjunto de ingredientes, es en realidad el alma de la pizza. Con la mezcla adecuada, se logrará una base crujiente por fuera y esponjosa por dentro, todo un arte que se perfecciona con la práctica. Uno de los secretos de la pizza argentina es la elección de los ingredientes al momento de preparar la salsa. El uso de tomates frescos, hierbas frescas como orégano y una buena dosis de aceite de oliva son claves para llevar el sabor a otro nivel. Además, la mozzarella, que debe ser de buena calidad, es el protagonista que no puede faltar. La preparación de la pizza casera se puede adaptar a los gustos de cada uno, desde las clásicas de muzzarella hasta las más innovadoras con ingredientes como jalapeños, ananá o incluso diferentes tipos de quesos. Este carácter camaleónico la convierte en una opción perfecta para cualquier paladar. Para aquellos que se animan a experimentar, la pizza tiene su origen en Nápoles, Italia, en el siglo 18. Pero fue en Argentina donde adquirió su propia identidad, repleta de sabores y variaciones regionales. En Buenos Aires y Rosario, por ejemplo, la pizza suele ser más gruesa, mientras que en otras regiones tiende a ser más fina. Las pizzerías tradicionales, como ‘El Cuartito’ y ‘Los Inmortales’, se han convertido en puntos de encuentro culturales donde disfrutar de este deleite es casi un ritual. La ocasión perfecta para preparar una pizza casera es el fin de semana, cuando la familia y los amigos se reúnen para disfrutar juntos. No hay mejor forma de compartir y celebrar que con una buena porción de pizza en la mano. Al invitar a otros a participar en la preparación, se transforma en una experiencia única que se comparte en comunidad. En resumen, hacer una pizza casera es una actividad que no solo alimenta el cuerpo, sino también el alma. Al colocar los ingredientes sobre la masa, se celebra la herencia cultural y los sabores que nos unen a lo largo de los años. Pasos 1. Mezclar la harina con agua tibia, levadura y un poco de sal para formar la masa. Amasar durante 10 minutos hasta que esté homogénea. 2. Dejar reposar la masa en un lugar cálido durante aproximadamente 1 hora o hasta que duplique su tamaño. 3. Precalentar el horno a 220 °C mientras se extiende la masa con un rodillo y se coloca en una bandeja engrasada. 4. Preparar la salsa mezclando tomates triturados con orégano, sal, y aceite de oliva. Distribuir sobre la masa. 5. Agregar la mozzarella en trozos y cualquier otro ingrediente deseado (como aceitunas, pimientos, etc.). 6. Hornear durante unos 15-20 minutos o hasta que los bordes estén dorados y el queso burbujeante. 7. Dejar enfriar un par de minutos, cortar en porciones y servir caliente. Ingredientes – 500 g de harina de trigo – 300 ml de agua tibia – 10 g de levadura fresca – 10 g de sal – 300 g de mozzarella – 400 g de tomates triturados – 50 ml de aceite de oliva – Orégano al gusto
Ver noticia original