07/06/2025 08:53
07/06/2025 08:53
07/06/2025 08:53
07/06/2025 08:50
07/06/2025 08:37
07/06/2025 08:35
07/06/2025 08:34
07/06/2025 08:33
07/06/2025 08:32
07/06/2025 08:32
Parana » Ahora
Fecha: 06/06/2025 17:44
El vocal del Tribunal de Juicios y Apelaciones Nº 8 de Paraná, Rafael Cotorruelo, condenó a Esteban Ángel Alberto Scialocomo, más conocido como “Bebu”, a la pena de tres años de prisión de ejecución condicional por su participación en la denominada causa Contratos Legislativos. Además, se comprometió a pagar una multa de 90.000 pesos y una reparación económica en concepto del daño de 6.900.000 pesos. Según el fallo al que tuvo acceso AHORA, Scialocomo fue declarado autor del delito de asociación ilícita y partícipe necesario en once hechos de peculado reiterado. El Ministerio Público Fiscal le imputó haber formado parte de una organización que, al menos desde enero de 2008 hasta septiembre de 2018, sustrajo dinero de la Legislatura Provincial utilizando la figura de contratos de obra con personas que no realizaban ninguna prestación efectiva. El saqueo al estado está calculado en unos 53 millones de dólares. El abreviado aprobado por Cotorruelo fue celebrado entre la fiscal Patricia Yedro y el defensor Cristian Panceri. Dentro de esta estructura criminal, Scialocomo integraba el grupo denominado “Los Particulares”, considerado la “mano de obra” que ejecutaba directivas. Su función prioritaria era gestionar el cobro de los cheques emitidos a nombre de los supuestos contratistas y recolectar el dinero resultante. Los registros bancarios analizados mostraron que entre 2015 y 2018, Scialocomo cobró 178 cheques de Diputados y 122 cheques de Senadores, sumando más de 5.200.000 pesos en ese período. La pericia documentológica confirmó que su escritura aparecía en cuadernos incautados que registraban estas cobranzas. Además, fue aprehendido en flagrancia el 20 de septiembre de 2018 mientras cobraba tarjetas de débito de contratados en un cajero automático, una actividad considerada parte del iter criminis. Scialocomo no quería volver a la cárcel donde estuvo cumpliendo prisión preventiva en el marco de este proceso. El muchacho, yerno de los imputados Hugo Mena y Flavia Beckman, estuvo preso en la Unidad Penal N°1 y en la remisión a juicio el MPF había adelantado que iba a solicitar siete años de prisión. La firma del abreviado es un espaldarazo para la Instrucción Penal Preparatoria (IPP) que realizó el MPF y que el resto de los 18 imputados desconoce. Cotorruelo validó el acuerdo, señalando que, independientemente de la confesión, la abundante evidencia recolectada en la investigación respalda la hipótesis acusatoria. El juez vio como circunstancias que reducen la pena el hecho de que aceptó su culpa en el juicio abreviado y que, aunque participó activamente en el “trabajo de campo”, no tenía poder para tomar decisiones en la asociación ilícita, solo seguía instrucciones. Su falta de antecedentes penales también justificó la ejecución condicional de la pena. Además de los tres años de prisión condicional, la sentencia impone a Scialocomo una multa de 90.000 pesos y diversas normas de conducta por el plazo de tres años. Acusados complicados Los imputados que están esperando conocer su suerte en la actualidad son: Flavia Beckman, Hugo Mena, Gustavo Pérez, Roberto Faure, Sergio Cardoso, Alejandro Almada, Juan Pablo Aguilera, Diego Martín Pagnoni, Mariano Speroni, Hernán Javier Díaz, Marta Aurora Pérez, Maximiliano Degani, Pedro Opromolla, Juan Domingo Orabona, Jorge Enrique De Breuil, Jorge Fabián Lázzaro y José Javier Schneider. Sobre muchos de ellos pesan penas de prisión efectiva en caso de ejecutarse un juicio oral. Es más, desde hace un tiempo, en la cabeza de dos acusados está rondando la idea de firmar un abreviado, pero con pena de prisión condicional. Los que más se niegan a este tipo de estrategia son los hombres ligados a los exgobernadores Sergio Urribarri y Gustavo Bordet. Con el abreviado, la acusación fiscal recibió respaldo tanto por la firma de conformidad y reconocimiento de culpabilidad de Scialocomo en el acuerdo de juicio abreviado, como por la evidencia física de firmas falsificadas o ausentes en los contratos fraudulentos y las anotaciones manuscritas en los cuadernos de cobranza, cuya autoría (escritura) fue pericialmente atribuida a Scialocomo. La función prioritaria de Scialocomo era gestionar el cobro de los cheques y la posterior recogida del dinero colectado. Era un “maletero”. Realizaba un aporte activo en este “trabajo de campo”, como conducir a los cobradores hasta el banco, vigilarlos y trasladar el dinero recaudado a Hugo Rubén Mena o Alfredo Bilbao. Sigue la remisión La causa se reactivará el lunes 9, tras la prórroga que dispuso la jueza de Garantías Marina Barbagelata para que las partes respondan las cuestiones civiles. El viernes pasado las defensas presentaron por escrito sus contra la demanda civil interpuesta por la Fiscalía de Estado. En sus ocho escritos postularon excepciones (prescripción de la acción civil, defecto legal en el modo de proponer la demanda, etc.) y contestaron el fondo de la cuestión y ofrecieron pruebas. Ese mismo viernes 30, la jueza corrió traslado de esto a la Fiscalía de Estado (Actor Civil), que ya respondió. Con esto la jueza está en condiciones de “trabar la litis”, esto es fijar las posturas contrapuestas sobre los diferentes puntos. Fuentes judiciales sostienen que Barbagelata ya está en condiciones de resolver si remite o no la causa a juicio. Hay un sector que quiere evitar que las audiencias sigan en medio de la campaña política y hay otro grupo que espera que esto se extienda y sea motivo de discusión durante la etapa proselitista.
Ver noticia original
 300 x 300 px.gif)
Examedia © 2024
Desarrollado por