07/06/2025 08:11
07/06/2025 08:10
07/06/2025 08:10
07/06/2025 08:09
07/06/2025 08:08
07/06/2025 08:08
07/06/2025 07:57
07/06/2025 07:56
07/06/2025 07:55
07/06/2025 07:54
» Diario Cordoba
Fecha: 06/06/2025 16:56
Pedro Sánchez se comprometió en la última Conferencia de Presidentes, celebrada el pasado mes de diciembre en Santander, a avanzar en una propuesta de reforma del modelo de financiación autonómica. En la cumbre celebrada en Barcelona este viernes, “ni eso”, lamentaba a la salida del encuentro un presidente autonómico. Ni compromiso, ni plazos, ni intención de poner sobre la mesa una propuesta que desencalle una situación que cumple más de once años encallada. Se trata de una reclamación transversal de todos los presidentes autonómicos de la que el propio Pedro Sánchez dio síntomas de desistir ante el clima de confrontación política. Durante el plenario, el presidente del Gobierno asumió la falta de acuerdo para reformar el sistema de financiación autonómica, pero quiso desvincularla del color político del Ejecutivo. En una respuesta al presidente de Murcia, Fernando López Miras, tras pedirle elecciones por no ser capaz de reformar el sistema de financiación autonómica, Sánchez replicó que "el sistema de financiación autonómica caducó ya en 2014”. Por aquel entonces, añadió, “gobernaba un presidente del PP con mayoría absoluta y aun así, no fue capaz de actualizarlo. Nadie le pidió que adelantara las elecciones por ello. Tampoco los barones populares". Desde el ministerio de Hacienda, que dirige María Jesús Montero, defienden que para reformar el modelo debe producirse antes un acuerdo en el seno del PP para poder avanzar. Los territorios apuestan por criterios distintos de cara a un nuevo modelo de financiación y, en ocasiones, hasta contrapuestos. Con las legislaturas autonómicas llegando al ecuador, y comicios previstos para el próximo año en Castilla y León y Andalucía, las posibilidades de acercar posiciones se alejan todavía más. Otro de los presidentes que participaron en la XXVIII Conferencia de Barcelona subrayaba tras la cita el elevado tono de confrontación política y el “ambiente preelectoral”. Un escenario por el que argumentaba su falta de optimismo para llegar a un acuerdo sobre el que no ha habido ningún avance en lo que va de legislatura. “Esta legislatura es un laberinto sin salida, desde el principio”, resumía en privado este mismo presidente para concluir que “no se habla de nada en positivo” ante una polarización y crispación política creciente. Los populares, además, subieron además una marcha más en su presión para conjurarse a pedir al presidente del Gobierno un adelanto electoral. Un mensaje que se lanzó de forma unánime, aunque con diferentes matices para justificarlo, a pocas horas de la manifestación convocada este domingo en Madrid por el PP contra Pedro Sánchez. Una protesta para exigir la salida del presidente del Gobierno bajo el lema “mafia o democracia”. El Gobierno ya evitó en su propuesta inicial de orden del día incluir la reforma de la financiación por la evidente falta de consenso. Una forma de tirar la toalla que se volvió a ratificar en la cumbre de Barcelona, sin margen para aterrizar propuestas de reforma en el seno del Consejo de Política Fiscal y Financiera. Rechazo al plan de vivienda Frente a la brecha en materia de financiación, el Ejecutivo acudió a Barcelona intentando resituar el foco en la vivienda. Igualmente, sin éxito, y evidenciando la incapacidad de Pedro Sánchez para controlar esta agenda. El presidente del Gobierno lanzó una propuesta de resolución que no encontró consenso por parte de las comunidades autonómicas sobre las que recaen la mayoría de competencias en vivienda, principalmente en lo relativo a la ejecutivo. Sánchez intentó llegar a un acuerdo para triplicar la financiación en vivienda, a cambio de blindar la vivienda protegida y que las comunidades autónomas asumiesen un 40% de los fondos del nuevo plan. Se pasaría así de los 2.300 millones a los 7.000 millones. La Comunidad de Madrid, presidida por Isabel Díaz Ayuso, se opuso incluso antes de debatirlo. Sin embargo, no fueron solo los presidentes del PP quienes se desmarcaron. Las fisuras se produjeron también dentro del PSOE. El presidente socialista de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, mostró su rechazo al oponerse a asumir más inversión propia en el plan. Para el presidente del castellano-manchego, lo vivido este viernes en Barcelona mostraría además una situación política convertida en "un callejón sin salida. Siguiendo con las metáforas, ya durante su valoración posterior ante los medios de comunicación, lo comparó con un "puzzle roto, con muchas piezas averiadas y prisionero de un ambiente de frentismo asfixiante, que hace estéril cualquier intento" de acuerdo. Paradójicamente, el presidente de la Xunta de Galicia, Alfonso Rueda, mostró más disposición a estudiar y renegociar propuesta sobre vivienda en la que Pedro Sánchez quiso centra la cumbre de presidentes. “Si se flexibilizan las condiciones de ejecución del plan y se aumenta el plazo”, avanzó que estaría dispuesto a negociar con el ministerio de Vivienda, sin descartar el marco bilateral. Educación gratuita de 0 a 3 años El enfrentamiento político, las escenas de tensión con Isabel Díaz Ayuso abandonando la sala en protesta por el uso del vasco y el catalán que hiceron el lehendakari Imanol Pradales y el president de la Generalitat, Salvador Illa, respectivamente, dejó enterrados algunos anuncios del presidente del Gobierno. El principal, la creación de un fondo de 175 millones de euros para las comunidades autónomas destinado a subvencionar el acceso a la educación infantil de 0 a 3 años. La financiación de este primer ciclo educativo era una de las cuestiones que los presidentes del PP propusieron abordar en la Conferencia de Presidentes y el jefe del Ejecutivo ha recogido el guante con el anuncio de este fondo. Los recursos provendrán del Fondo Social Europeo Plus y, según ha avanzado Sánchez durante su intervención en la cumbre que se celebra en Barcelona, se orientará al “alumnado de familias con rentas bajas” para garantizar el acceso a la educación de 0 a 3 años.
Ver noticia original