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Parana » Informe Digital
Fecha: 04/06/2025 04:08
Se han revelado datos sobre el mercado de agroquímicos en Argentina, incluyendo las empresas que lideraron en 2024 y una proyección de cierre para 2025. De acuerdo con un estudio del mercado al que tuvo acceso LA NACION, y con base en el movimiento de las compañías, en 2024 el sector alcanzó una facturación de US$3133,9 millones, lo que representa una caída de US$1181 millones en comparación con los US$4314 millones de 2023. Las diez empresas líderes de un grupo de aproximadamente veinte fueron: Syngenta, Bayer, Albaugh (Atanor), BASF, Sigma, Corteva, Summit Agro, ACA, ADAMA y FMC. Es importante recordar que 2024 fue un año marcado por una significativa retracción en los negocios. Especialistas del sector explican que esta caída se debió a las compras anticipadas que realizaron muchos productores en 2023 para protegerse ante una posible devaluación. Esta estrategia generó un excedente de stock que redujo de manera drástica la demanda en el año siguiente. El panorama para 2025 tampoco es alentador: se espera que el mercado registre una nueva disminución de entre el 3% y el 5% en valor respecto al año anterior. Esta proyección responde a la continuidad de la tendencia a la baja en los precios de los insumos, tanto locales como importados, en un contexto donde los productores optan por realizar compras más ajustadas y alineadas con el momento real de uso. En términos de volumen, el año pasado el mercado alcanzó los 337,4 millones de litros/kilos, por debajo de los 385,5 millones de 2023. En este aspecto, el top ten de volumen incluyó a: Albaugh (Atanor), Bayer, Syngenta, Sigma, ACA, Corteva, BASF, Agrofina y Surcos. En una conversación con LA NACION, Luis Mogni, socio de Somera y consultor en gestión y estrategia de negocios, detalló la transformación en la dinámica del negocio. “En 2023, el mercado cerró en torno a los US$4300 millones, pero había estado muy distorsionado por las compras anticipadas de productores y distribuidores que querían resguardarse frente a una posible devaluación. En 2024 se volvió a un mercado más normal, con una facturación de aproximadamente US$3100 millones, y en 2025 se profundizará esta lógica: el canal y los productores comprarán en función del uso, en el momento de necesidad”, explicó. Mogni añadió que esta dinámica se desarrolla en un contexto de caída sostenida en los precios. “Los precios de productos tanto locales como de origen chino siguen disminuyendo. Por ello, aunque haya una recuperación en el volumen de algunos insumos, el valor total del mercado podría cerrar entre un 3% y un 5% por debajo de 2024”. En este contexto, Mogni subrayó que empresas como Syngenta, Bayer y Corteva buscarán preservar sus posiciones de liderazgo. Sin embargo, advirtió que será crucial observar el rendimiento de aquellas compañías que están estrechamente vinculadas a proveedores chinos e indios, y que han estado consolidando su presencia con una oferta basada en productos genéricos. Mencionó entre ellas a Sigma, Agroterrum y UPL. Destacó una tendencia de cambio en el mercado. “Muchas moléculas ya han perdido patente, y como la innovación avanza más lentamente, cada vez hay menos especialidades. Por lo tanto, las empresas que se centran en productos genéricos tienen oportunidades de crecimiento. Syngenta o BASF continúan apostando a tecnologías diferenciadas, pero la mayor parte del mercado se está orientando hacia opciones más económicas”, afirmó. Este cambio también está alterando el perfil competitivo del sector. “Hoy la clave es observar qué empresas están más cercanas al canal directo y ofrecen productos a bajo costo. Ese será uno de los enfoques de este año”, aseguró Mogni. Un ejemplo claro es el glifosato, que cerró 2024 con 145 millones de litros vendidos. Se anticipa un aumento en el volumen comercializado este año, aunque no necesariamente en la facturación. “Esto ilustra cómo la disminución de precios impide que el mercado crezca en dólares, a pesar de un aumento en la cantidad vendida”, destacó. Mogni también pronosticó que 2025 podría reflejar un consumo más equilibrado, sin compras especulativas ni fluctuaciones en el stock. “Será un año en el que el canal operará de manera más precisa, centrado en la demanda real. Y esto representará un desafío para muchos, pero también una oportunidad para organizar el negocio”, concluyó.
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