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» Diario Cordoba
Fecha: 18/05/2025 15:04
Quiere Iván Ania tener a sus pupilos enchufados hasta el último segundo del campeonato en Segunda División, al que ya tan solo le restan tres jornadas -al menos en cuanto a la agenda regular- para dejar zanjados todos los compromisos de la temporada. Y frente al Mirandés en El Arcángel este lunes (20.30 horas) pretende el entrenador del Córdoba CF seguir encontrando razones para estimular a sus pupilos, que si bien la idea del play off ya les parece una quimera matemática, el tratar de cerrar la Liga con el mejor regusto posible no lo es tanto. Máxime con dos citas en casa. «Claro que tenemos cosas en juego. Nosotros tenemos posibilidades matemáticas, vamos a ver los resultados de la tarde. Reales, pocas. Queremos acabar lo más arriba posible. Somos un equipo ambicioso, si podemos quedar los séptimos, mejor que los octavos. Es importantísimo ganar estos dos partidos de casa», expresó el técnico tras la sesión de este domingo. Un rival «peligroso» Y es que lo que llega es nada menos que un conjunto jabato que se ha destapado como la máxima sorpresa de LaLiga Hypermotion este ejercicio. Si figuraba en casi todas las quinielas para el descenso a comienzos de agosto -incluso tuvo que debutar tirando del filial por no contar con los suficientes efectivos de la primera plantilla-, meses después ha logrado dejar un rendimiento casi inusitado. Solo un punto separa a los de Alessio Lisci de certificar su presencia en play off, mientras que la opción de alcanzar el ascenso directo también está sobre la mesa tras el pinchazo del Elche ante el Huesca. «Jugamos contra ellos en la primera jornada y en la 40. Creo que los dos equipos hemos crecido con la competición, aunque seguimos con el mismo concepto los dos. Ellos sí es cierto que en ese primer partido tenían una defensa clara de cinco, ahora tienen pero presionan muchísimo más alto. Somos dos equipos distintos», insistió. En clave propia, tres jornadas en casa consecutivas lleva el Córdoba CF sin lamentar una derrota. Una anomalía, prácticamente, en una segunda vuelta en la que cada comparecencia en el hogar se acababa transformando de alguna forma en casi un drama. Además, el Mirandés pertenece a ese correoso grupo de «favoritos» en la zona noble de la tabla -del sexto o séptimo en adelante-, una condición de rival que, por norma, se le ha resistido a los de Ania en su feudo, donde solo han logrado rascar dos empates frente al Levante y el Oviedo. «Son realidades... Han pasado por aquí muchos equipos que con su victoria pudieron ponerse en ascenso directo o incluso líderes. Nos gustaría cambiar esa tendencia. Mañana salimos con la intención de ganar el partido, de ser nosotros, de intentar conceder muy poco al rival, porque tiene muchos argumentos en ataque. Tiene área, espacio, bandas... Es un equipo peligroso», subrayó. «Queremos hacer los seis puntos de casa y cerrar bien la temporada, está claro que nos gustaría. Puedes hacer muy buen año, pero si te dejas ir al final, te vas a ir de vacaciones con mala sensación», añadió. El parte de bajas En cuanto a la enfermería, el preparador ovetense reveló que seguirá habiendo piezas entre algodones en esta antepenúltima semana de temporada. El alta médica tienen ya tanto Álex Sala, Carlos Isaac como Rubén Alves, aunque no así Alberto del Moral, que seguirá otro partido en el dique seco, y ya van seis seguidos. «Alberto no está, Matías tampoco, ni Adilson. Los demás están todos disponibles», desveló. Suscríbete para seguir leyendo
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