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Federal » El Federaense
Fecha: 09/05/2025 18:35
El presentador de televisión Marley, cuyo nombre real es Alejandro Wiebe, se ha visto envuelto en una intensa polémica tras compartir la historia del nacimiento de su hija, Milenka. En un tono desenfadado, el conductor de Telefe narró detalles sobre el proceso del parto, dejando de lado la mención fundamental de la mujer gestante y priorizando su deseo de un parto natural. Esta forma de contar su experiencia ha generado una ola de críticas en redes sociales. Durante su relato, Marley expresó: “Fue un parto natural. Fui antes, porque me dijo que sus dos hijos varones nacieron dos semanas antes de lo previsto”. Aunque se refería a la madre de su hija, su omisión de su papel en el proceso fue notoria, lo que desató el desacuerdo de muchos oyentes. Cotidianidad y Complicaciones Médicas Continuando con su anécdota, Marley relató cómo transcurrió el tiempo desde el inicio del trabajo de parto, señalando: “Empezó a las siete de la tarde y a las tres de la mañana nació Milenka. Era el fin de semana antes de Año Nuevo y el hospital estaba medio vacío. Tardaron mucho en encontrar al anestesista, ya que no había nadie”. Esta descripción de la situación retrató lo que debería haber sido un momento de alegría rodeado de cierta tensión y ansiedad. Momento de Alarma en el Parto El fragmento más debatido de su relato llegó cuando mencionó los signos de alarma que se presentaron durante el trabajo de parto. “Había mucho sangrado y el doctor me habló de un aparato que parece una aspiradora para acelerar el momento. Yo quería que fuera un parto natural”, dijo Marley, obviando la importancia de la opinión médica y el bienestar de la persona gestante. A pesar de cerrar su exposición con una tierna imagen de unión, donde relató que se sentó sin camiseta, apoyando a su bebé en el pecho, esta parte fue eclipsada por el tono desenfadado de su relato. Para muchos, su intento de convertir un momento delicado en un relato humorístico no fue apropiado. El video en el que relata esta experiencia no tardó en volverse viral, acentuando la crítica hacia su estilo y la percepción de desinterés por los aspectos serios que rodean un parto.
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