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Buenos Aires » Infobae
Fecha: 03/05/2025 06:51
El menor de 16 años fue atropellado cuando cazaba con sus hermanos A casi cinco años de la muerte de Alex Juan Campos, un adolescente de 16 años que murió tras ser atropellado mientras cazaba liebres junto a dos de sus hermanos en un campo de Cañuelas, el único acusado por el crimen, el empresario Pablo Rodolfo Sánchez, será llevado a juicio oral en los Tribunales de La Plata. La elevación a juicio de la causa por homicidio simple fue confirmada este viernes, sin embargo, todavía no fueron sorteadas las fechas en las que se llevarán a cabo las audiencias. La acusación estará a cargo del fiscal Mariano Sibuet, quien no descartaría la posibilidad ampliar la acusación en contra de Sánchez. El empresario fue señalado como el responsable de la muerte del menor de edad, luego de que los testigos aseguraran que había embestido a la víctima con su camioneta Dodge RAM 4x4 el 24 de mayo de 2020. Según relataron, el grupo de hermanos cazaba junto a sus perros en un predio que sería propiedad del acusado, quien al verlos en el lugar habría acelerado sin previo aviso. De hecho, la querella, que será representada por el abogado Maximiliano Rusconi, buscará que la carátula sea modificada. Bajo su punto de vista, consideraron que se trató de un homicidio con alevosía, debido a que Sánchez habría tenido la intención de atropellar a los jóvenes. En caso de que se efectivizara el cambio, esto podría suponer una pena de prisión perpetua. El juicio será celebrado en los Tribunales de La Plata Frente a esto, los abogados del empresario, Fabián y Facundo Améndola, negaron la intencionalidad de darle muerte al plantear que se habría tratado de un exceso en la legítima defensa. Según la información publicada por el medio platense 0221, señalaron que podría enmarcarse como un homicidio culposo e insistieron con la falta de alevosía por parte de su cliente. De acuerdo con las fuentes oficiales a las que accedió Infobae, los hermanos de la víctima aseguraron que no se trataba de la primera vez que cazaban en esa área y que, a lo sumo, habrían recibido retos por parte de otros propietarios que les pedían que se fueran. Sin embargo, esa mañana fue diferente, ya que señalaron que el empresario en ningún momento les habría advertido y habría acelerado presuntamente con la intención de atropellarlos a los tres. Dos de ellos se corrieron del camino y resultaron ilesos, pero esa no fue la suerte de Alex. Luego de que el menor fuera atropellado, los jóvenes le habrían pedido al acusado que lo subiera a la camioneta y lo trasladara a un hospital, pero Sánchez se habría negado rotundamente. “Voy a llamar a la Policía y que hagan lo que tengan que hacer. Ahora, levántenlo y llévenselo”, les habría exigido, para luego denunciar al 911 que habría sufrido un robo en su propiedad. Para ese entonces, el cuerpo del adolescente continuaba tirado en el suelo, mientras uno de los chicos alertó a sus familiares de lo ocurrido. Una vez que los parientes de los jóvenes llegaron al lugar, estos notaron que Alex ya no tenía pulso. “Eso le pasa por venir a robarme. Bien muerto está”, le habría dicho el acusado a una de las tías de la víctima, que habría comenzado a golpear el vidrio de la camioneta. El golpe que había quedado en la camioneta tras embestir al adolescente “Cuando llegamos, ya estaba muerto. El de la camioneta se quería escapar, pero lo retuvimos”, recordó Soledad, la hermana del menor, quien aseguró que el empresario los “miraba como si nada”. Minutos más tarde, un móvil de la Policía Bonaerense se presentó en el campo y detuvo al empresario, quien fue acusado de homicidio simple por la fiscal Norma Pippo, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) N° 2 de la jurisdicción. Luego de que la Policía Científica asegurara que la víctima presentaba signos de haber sido embestido por una camioneta de gran porte, la autopsia constató que el adolescente fue golpeado por un vehículo que iba a 20 kilómetros por hora. De la misma manera, los forenses señalaron que Campos había sufrido lesiones exteriores e internas, ya que detectaron un impacto en la zona del coxis y una luxación en la cabeza del fémur, es decir, a la altura de la cadera. En línea con esto, indicaron que el cráneo estaba gravemente dañado, debido a que encontraron hematomas en la zona del cuero cabelludo, una fractura de 8,5 por cuatro centímetros en la zona de la calota, y otra en el hueso frontal izquierdo. Asimismo, destacaron que el cerebro presentaba una lesión de dos centímetros de diámetro. Respecto a la condición en la que se encontraban sus órganos, la autopsia reveló que el pulmón izquierdo estaba repleto de sangre, tenía un hemotórax masivo, el pericardio roto, el hígado lacerado y desgarrado, e infiltración de sangre en otras áreas. No obstante, remarcaron que el golpe más fuerte fue recibido por los riñones, debido a que ambos tenían laceraciones traumáticas. Por este motivo, consideraron que la explosión de sus órganos le habría provocado un shock hipovolémico originado por un politraumatismo de tórax y abdomen, lo que indicaría que la muerte habría estado relacionada con el golpe y no por el arrastre.
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