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  • Hallaron los restos quemados de una entrerriana desaparecida en Buenos Aires

    Parana » Ahora

    Fecha: 02/05/2025 22:27

    Martina Echagüe no veía a su tía entrerriana, María Claudia Sack, desde el 6 de abril pasado. Preocupada porque no tenía noticias suyas, este jueves, fue hasta su casa en el barrio Agustoni, en el partido bonaerense de Pilar. Pero no estaba. Su pareja, Franco Giménez, le dijo que la mujer oriunda de Federal había viajado a Córdoba. Pero todo era una mentira. La mujer, que tenía 65 años y era 33 años mayor que su novio, había sido asesinada, su cuerpo había sido desmembrado y quemado. Los huesos fueron hallados en la basura. Escalofriante caso El macabro crimen de la mujer entrerriana fue descubierto ayer jueves por la noche en la calle El Jilguero al 100. El principal sospechoso es Franco Rubén Giménez, un hombre de Villa Rosa que la Policía Bonaerense detuvo este viernes por la mañana. Está imputado de homicidio doblemente agravado por el vínculo y por mediar violencia de género. La trama de cómo se reveló el hecho, es escalofriante. Ayer, según confirmaron fuentes policiales a Infobae, una sobrina de Claudia se presentó en el lugar, tras dos semanas de no saber nada de su tía. Giménez estaba allí, nervioso ante la visita. -¿Dónde está mi tía?, preguntó la sobrina. -Eeeh, se fue a Córdoba, dibujó rápidamente Giménez. La sobrina, para nada convencida, comenzó a llamar al celular de su tía. No tuvo que ir lejos para oír el tono: estaba en el bolsillo de Giménez mismo, que corrió en el acto. Poco después, la sobrina llamó al 911. Los restos en una bolsa La Policía Bonaerense ingresó al lugar. Allí, hallaron una bolsa con huesos quemados entre la basura del lugar. Cuando llegó el personal policial, la sobrina y los uniformados ingresaron en la casa y, en la basura, encontraron huesos quemados. “Se trataría de los restos óseos de Sack”, explicaron fuentes de la investigación. Así, comenzó un expediente por femicidio, a cargo de la UFI de Violencia de Género de Pilar, con la fiscal María José Basiglio, que ordenó tareas a la Sub DDI de Pilar. Las primeras tareas forenses determinaron que María Claudia -si los restos hallados en su casa efectivamente le corresponden- fue primero descuartizada y luego incinerada. La toma de testimonios en el barrio reveló que María Claudia, registrada en el rubro de limpieza de edificios de ARCA y jubilada, había sido vista por última vez hace dos semanas. Al ser consultados vecinos de la víctima dijeron que la última vez que habían visto a Sack había sido dos semanas atrás. También recordaron que Giménez, durante varios días, hizo fuego en un pasillo de la casa. Para quedarse con la casa La expareja de Giménez le dijo a los detectives, que el sospechoso la había llamado por teléfono y le había pedido “refugio”, porque sabía que estaban tras sus pasos. Y aportó el número telefónico desde donde había recibido la llamada. Una información que resultó clave para poder avanzar en la investigación. “Tras diversas tareas investigativas, se logró establecer que el sospechoso había pasado la noche en la terminal de ómnibus de Retiro y, en algún momento del día, se iba a dirigir hacia José C. Paz”, dijeron fuentes policiales. Se decidió hacer un operativo de control en la estación de trenes de José C. Paz donde, finalmente, fue detenido Giménez. El operativo estuvo a cargo de personal de la SubDDI Pilar. Según las fuentes consultadas, el sospechoso tiene antecedentes por resistencia a la autoridad, violencia doméstica y amenazas. La sospecha de los detectives policiales que participan de la investigación es que el móvil del homicidio tuvo motivaciones económicas. “Giménez habría matado a su pareja para quedarse con la casa”, dijo una fuente de la causa. Fuente: La Nación-Clarín-Infobae

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