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» Diario Cordoba
Fecha: 22/04/2025 11:16
La segunda sesión del juicio contra Jesús León, ex presidente del Córdoba CF, celebrada este martes en la Ciudad de la Justicia de Córdoba, avanzó de forma notable con la exposición de los argumentos de la Fiscalía y la acusación, así como con las primeras testificales. La vista, que tuvo lugar en la sala 10 de la Ciudad de la Justicia, arrancó con antelación sobre la hora fijada, y giró principalmente en torno al desmontaje de las tesis planteadas por la defensa de León en la jornada inaugural del lunes. En este caso también están acusados su esposa, Isabel Madueño, dos de sus hermanos, la ex dirigente de la Fundación blanquiverde y el director financiero. Cuestiones previas La Fiscalía centró su intervención inicial en justificar la legalidad de la detención de Jesús León en 2019, defendiendo que esta se produjo una vez recabadas pruebas suficientes tras el registro domiciliario del acusado. Igualmente negó que existiera una vulneración del derecho a la defensa, como sostiene la representación legal del expresidente, que denuncia que se le detuvo con el objetivo de limitar su capacidad de declarar. En relación con la cadena de custodia, el fiscal rechazó las acusaciones genéricas de la defensa sobre la presunta corrupción de los pendrives incautados, alegando que estos dispositivos fueron legalmente requisados en el domicilio del ex dirigente y que la defensa no ha concretado ni demostrado el momento en que se habría producido la supuesta corrupción de los mismos. Se expuso además que León facilitó voluntariamente los accesos a sus dispositivos electrónicos durante el registro inicial. La Fiscalía también se pronunció sobre otras cuestiones planteadas por la defensa, como la supuesta vulneración del derecho a la intimidad en el análisis de mensajes compartidos entre León y su esposa Isabel Madueño. Para la acusación pública, dichos mensajes no alteran en ningún caso el «arsenal incriminatorio» del procedimiento y carecen de relevancia probatoria. La composición de la sala 10 de la Ciudad de la Justicia este martes, en el juicio a Jesús León. / manuel murillo Asimismo, se abordaron correos electrónicos de figuras como Magdalena Entrenas y María Isabel Tapia, insistiendo el Ministerio Público en que Entrenas actuaba como abogada del club y no de León a título personal. La Fiscalía concluyó su intervención reiterando que en la etapa bajo sospecha llegaron a desdibujarse las fronteras entre el patrimonio del Córdoba CF y el del propio Jesús León. La representación de la acusación particular respaldó las tesis fiscales, asimismo. Negó que existiera ilegalidad alguna en la detención del ex mandatario blanquiverde y tildó de genéricas las afirmaciones sobre fallos en la cadena de custodia. También cuestionó que se intentara aportar testigos que, a su juicio, vulnerarían el código deontológico. Se insistió, además, en que la comunicación telefónica efectuada durante el registro no acreditaba la presencia efectiva de un abogado designado -en ese momento León aún no había sido imputado-, por lo que no se incurrió en ninguna irregularidad. César Ollero, en representación del colectivo de Minoritarios del Córdoba CF, igualmente intervino para sostener la validez de la instrucción judicial y la legitimidad de la acusación popular. Descartó que se produjera indefensión, tal como alegaba la defensa en relación con supuestos plazos caducados, y argumentó que cualquier posible vulneración no fue formalmente corregida en su momento por la parte interesada. También defendió que la acusación por parte de Minoritarios está amparada legalmente y se enmarca en precedentes similares en otros clubes de fútbol. Resolución del tribunal Tras estas exposiciones, el tribunal deliberó y adoptó por unanimidad varias decisiones relevantes. En primer lugar, rechazó la petición de la defensa de Isabel Madueño para que el acto pericial sobre su salud mental se celebrase a puerta cerrada. La sala resolvió que dicho acto será público, como el resto de las sesiones. También ratificó la legitimación procesal de los Minoritarios, entendiendo que su presencia como acusación popular es conforme a derecho. En cambio, la cuestión relativa a la supuesta caducidad del periodo de instrucción quedó reservada para ser valorada en sentencia. La defensa dejó constancia de su protesta en relación con las tres resoluciones. La sesión continuó con las primeras declaraciones testificales, concretamente dos, ambas de agentes de la Guardia Civil a cargo de los primeros pasos del proceso. El entonces jefe de la Unidad de Investigación de Delitos Urbanísticos y Económicos confirmó que todo se inició a raíz de una denuncia presentada por el ya fallecido Joaquín Zulategui. Según el testimonio, existían indicios de una descapitalización del club por valor de un millón de euros, presuntamente desviado hacia cuentas vinculadas a Jesús León. El registro domiciliario, la intervención de dispositivos tecnológicos y la posterior detención fueron, según afirmó, legalmente autorizados. Añadió que la condición de «testaferro» de León respecto a Luis Oliver figuraba en el atestado inicial, y que el ex presidente habría adquirido el club mediante movimientos presuntamente irregulares. El segundo testigo, en este caso la instructora de la unidad, corroboró que 940.000 euros se transfirieron a Grucal -sociedad propiedad de León- y otros 60.000 a Argonsa Proyectos SL, administrada por uno de sus hermanos. También afirmó que el Córdoba CF concedió préstamos a empresas del propio ex presidente, sin que se devolvieran en su totalidad ni se satisficieran los intereses. Confirmó, al igual, la existencia de transferencias a Mencia Projects SL y Tecnoglobal Aplicaciones SL, sociedades vinculadas a los hermanos León, y manifestó la duplicidad de una factura del 2 de abril de 2019. Otro punto destacado de su testimonio fue la referencia a pagos realizados por el club para sufragar el arrendamiento de la vivienda de Jesús León. Imagen de la segunda sesión del juicio a Jesús León, este martes. / manuel murillo Tensión y próximos pasos La jornada concluyó tras más de dos horas y media de testimonios -más de cuatro en total, junto a la fase inicial-, en las que el presidente del tribunal, el juez Rascón Ortega, intervino en varias ocasiones para agilizar los interrogatorios, al estimar que la defensa estaba formulando preguntas excesivamente detalladas para el contexto del juicio. Durante los primeros compases de la mañana, además, llamó la atención al propio Jesús León, considerando que estaba condicionando la argumentación de la Fiscalía con aspavientos y muestras de descontento reiteradas. La vista se reanudará este miércoles 23 de abril con nuevas declaraciones, entre ellas las del actual propietario del Córdoba CF SAD, Carlos González, así como otros antiguos responsables vinculados a la entidad en el periodo investigado. Por otra parte, el resto de testigos emplazados a esta segunda sesión, como son Antonio Romero Campanero, Manuel Garrido Sevilla, Alfredo García Amarado, Juan Ramón Berdugo y Rosa María Agredano, deberán ahora acordar nueva fecha para su intervención. Suscríbete para seguir leyendo
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