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  • Ovnis derribados en todo el mundo

    » El litoral Corrientes

    Fecha: 20/04/2025 10:24

    n El ataque por parte de las fuerzas armadas de casi todos los países contra los Ovnis es tan frecuente que se diría que estamos en una continua batalla contra un enemigo desconocido que hasta ahora no demuestra agresividad de ningún tipo. Porque de ser así, con la tecnología que ellos evidentemente tienen y ha sido comprobada en innumerable ocasiones, no tendríamosningún tipo de defensa contra ellos. Hay muchos casos en los que se pone de manifiesto la verdadera intención que ocultan las grandes potencias mundiales al atacar a un enemigo que según ellos, no existe, pues constantemente niegan la existencia de estos aparatos extraños a los que llamamos Ovnis. Entonces, ¿en qué quedamos? Por un lado niegan la existencia de los Ovnis y por el otro dan la orden a sus pilotos de combate para que los derriben. Hay un contrasentido en esto, ya que están acostumbrados a mentir y ocultar todo al público en general. Hubo numerosos casos de enfrentamiento de aviones de combate de las grandes potencias especialmente, con extraños objetos voladores, a los que atacaron incluso con misiles, logrando derribar a algunos, pero de esto no se habló oficialmente ni se reconoció el hecho. Es común que entre los pilotos de combate, ellos reconozcan que han tenido persecuciones contra Ovnis con la intención de derribarlos, pero en muchos casos no pudieron hacerlo al ser superados totalmente por la tremenda velocidad que desarrollaban estos aparatos. Los Ovnis no son aparatos convencionales terrestres, esto queda claro, por sus maniobras y alta velocidad, que rompen los esquemas de la física terrestre conocida, y los gobiernos del mundo lo saben y lo niegan, vaya a saber porqué razón desconocida para el común de la gente. Las potencias los tratan de interceptar pero al no poder lograrlo, descargan todo su poder bélico sobre ellos. Es indudable que tratan de capturar algunas de estas naves, para poder estudiar su estructura y su funcionamiento, su procedencia, su movilidad y saber de dónde vienen estos extraños objetos desconocidos. Hay un caso impactante, uno de tantos, en el que un oficial de un barco lanzacohetes destacado en el Atlántico Sur, de la Marina de los Estados Unidos, de nombre John Smith, narró en primera persona lo que le tocó ver en directo en 1963. Según el relato, un día que la nave se hallaba estacionada, con mar calmo, un ovni se aproximó al barco, llegando a una altura de nos 2.000 metros sobre la nave, flotando suavemente sobre ella. Un mensaje urgente fue enviado en código secreto al Departamento de Guerra de la Armada, que ordenó que de inmediato se ataque al objeto. Fue lanzado un proyectil superficie-aire, logrando un impacto pleno y destruyendo por completo al extraño aparato. Nunca se supo donde cayó ni que pasó con sus restos. Como siempre, no se informó del incidente ni qué paso con sus restos si fueron recuperados. El primer incidente A lo largo de la historia del fenómeno Ovni, siempre se ha querido tener entre las manos, uno de esos extraños objetos volantes no identificados. Con ese fin, en la mayoría de las Fuerzas Aéreas de todo el mundo, especialmente las de las grandes potencias, se dio la orden terminante de tratar por todos los medios, de derribar uno de estos aparatos, disparando sin vacilar. El día 7 de julio de 1947, una formación de varios Ovnis de regulares dimensiones, sobrevoló lentamente el Parque Nacional Yellowstone, en los Estados Unidos, a unos 10.000 metros de altura. Temiendo que se tratara de un ataque por sorpresa y obedeciendo a las órdenes recibidas, un avión militar Mustang P-38 bajo el mando del teniente Vermond Baird, se acercó a la formación y disparó sobre uno de ellos, derribándolo. Fue una especie de episodio bélico absurdo, porque los restos del objeto, que se estrelló contra el suelo tras partirse en dos como la valva de una ostra, no fueron hallados ni recuperados nunca, según la información oficial. En esa época comenzaba ya la política de ocultamiento que siempre distinguió a los estamentos oficiales de la USAF con respecto al tema Ovni. Según el testimonio del teniente Baird, el objeto tenía la forma de una ostra aplanada, con un diámetro de unos cinco metros y un metro de grosor aproximadamente. Su velocidad era muy grande pero no hacía ningún ruido que fuera perceptible para los testigos y dejaba tras de sí una tenue estela luminosa. Cumpliendo con la orden establecida para estos casos, abrió fuego y el objeto al ser alcanzado de lleno, se partió en dos y cayó como aleteando. Fue en ese preciso momento cuando la tripulación del avión se dio cuenta que estaban sobrevolando una formación compuesta por lo menos por doce discos similares al derribado. Su distribución dispersa hacía recordar a una formación de aviones caza dispuestos a entrar en combate. Los objetos eran metálicos, del color del aluminio y su parte superior se hallaba coronada por una cabina semiesférica transparente. Desaparecieron a gran velocidad pocos instantes después de que el primero de ellos fuera derribado por los disparos del avión agresor, como siempre, el episodio fue negado oficialmente por las autoridades. No obstante, se logró saber que hasta la actualidad, han sido muchos los casos de ovnis derribados por aviones de combate, en la mayoría de los casos sin que los aviones terrestres hayan sido atacados por los ovnis. De acuerdo a estudios e investigaciones de todo el mundo, hay más de una docena de casos de derribamientos de ovnis y se estima que la fuerza aérea norteamericana tiene en su poder los cuerpos de al menos 20 seres extraterrestres como así también los restos de las naves derribadas. Todos estos elementos y testimonios de la presencia alienígena, estarían custodiados en el Area 51 y la base aérea de Wright Patterson, sin contar otras bases no muy conocidas.

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