Contacto

×
  • +54 343 4178845

  • bcuadra@examedia.com.ar

  • Entre Ríos, Argentina

  • Era entrerriano y fue el primer argentino en invernar en la Antártida

    Chajari » Chajari al dia

    Fecha: 14/04/2025 19:25

    Tenía 21 años cuando se transformó en el primer argentino en invernar en la Antártida dos años. Uno de esos años sin comunicación alguna. Lo hizo junto a la expedición científica sueca, comandada por el Dr. en Geología Otto Nordenskjöld. Otro dato para nosotros importante: era entrerriano. José María Sobral nació en Gualeguaychú el 14 de abril de 1880 y su casa natal se conserva aún en la calle San Martín 633. Curiosamente, Sobral también falleció un 14 de abril. Fue en el año 1961 en Buenos Aires. Vivió 81 años. Fue el mayor de una familia de ocho hermanos. En el año 1895 ingresó en la Escuela Naval y egresó como Guardiamarina. Efectuó el primer viaje de instrucción en la Fragata Sarmiento que duró 22 meses entre 1899 y 1900. Entre 1901 y 1903 participó en la expedición polar del Dr. Otto Nordenskjöld que quedó aislada en la Antártida durante dos años y que finalmente fue rescatada por la corbeta Uruguay en noviembre de 1903. Esta misión marcó el inicio de una etapa fundacional para las tareas en la Antártida Argentina. El hecho fue una verdadera proeza, ya que los exploradores tuvieron que sobrevivir dos años en el continente blanco, atravesando inviernos con temperaturas de 40 grados bajo cero y utilizando la grasa de foca como combustible para calefaccionarse. Allí estaba el entrerriano Sobral. ¿Cómo fue que el joven Sobral llegó a la Antártida? Antes de emprender la travesía a fines de 1901, Otto Nordenskjöld y su grupo pararon en Argentina. El gobierno de entonces, con Julio Argentino Roca como presidente, les dio suministros para invernar durante un año. A cambio debían incluir a un oficial de la Armada Argentina. Ese oficial fue el alférez José María Sobral. A su regreso al continente, Sobral fue tratado como un héroe, que lo era realmente. En el año 1904 el entrerriano pidió la baja de la Armada y viajó a Suecia para estudiar geología en la universidad de Upsala donde se doctoró en el año 1913. El 6 de septiembre de 1906 se casó con Elna W. Klingström; con ella tuvo nueve hijos (cuatro suecos y cinco argentinos). En 1914 regresó al país. Fue el primer geólogo argentino con título universitario y el mejor petrólogo a nivel mundial de su época. A su regreso al país en el año 1914 ingresó en la Dirección General de Minas e Hidrografía donde llegó a ser Director General en el año 1924. En 1930 fue nombrado Cónsul General en Noruega y a fines de 1931 ingresó como geólogo en YPF (Yacimientos Petrolíferos Fiscales) donde se jubiló en 1935. Desde entonces y hasta su muerte en el año 1961 continuó recorriendo el país haciendo estudios geológicos y dando conferencias sobre esos temas. Fue autor de importantes libros, entre ellos, “El Futuro de Nuestra Armada”, “Problemas de los Andes Australes”, “Sobre Cambios Geográficos”, “La Frontera Argentino-Chilena en el Canal de Beagle” y “Dos años entre los hielos”, donde concluyó esta última obra con estas palabras: “El hombre nunca debe contentarse con la victoria adquirida; el éxito no solo no debe ofuscarle sino que debe darle nuevo aliento para atacar lo más difícil, porque precisamente en eso se encuentra el placer de la vida”.

    Ver noticia original

    También te puede interesar

  • Examedia © 2024

    Desarrollado por