21/03/2025 08:12
21/03/2025 08:12
21/03/2025 08:10
21/03/2025 08:10
21/03/2025 08:10
21/03/2025 08:04
21/03/2025 08:03
21/03/2025 08:03
21/03/2025 08:02
21/03/2025 08:02
Buenos Aires » Infobae
Fecha: 20/03/2025 16:56
Las rutas comerciales más afectadas por la caída en las tarifas y la reducción de capacidad incluyen el tráfico transpacífico y el corredor Asia-Europa (Imagen: Shutterstock) Las tarifas spot del transporte marítimo -aquellas que se negocian en el momento para embarques puntuales, fuera de los contratos de largo plazo- registran una caída del 47%, generando incertidumbre en la rentabilidad del sector y obligando a las principales compañías a ajustar sus operaciones. Según el Índice de Fletes de Carga Contenedorizada de Shanghái, la baja en los precios coincide con una reducción en la utilización de buques en las principales rutas comerciales, con niveles por debajo del 90%. Mientras la rentabilidad sigue siendo posible si la ocupación supera el 80%, la tendencia actual enciende alarmas en la industria. Grandes navieras y alianzas estratégicas han comenzado a retirar rutas transpacíficas y Asia-Europa, en un intento por adaptarse a la contracción de la demanda. La incertidumbre en el mercado se ve agravada por los cuellos de botella en Asia, que aumentan los tiempos de espera en los puertos y afectan la eficiencia de la logística global. La combinación de estos factores complica el panorama para el comercio marítimo, en un contexto donde el equilibrio entre oferta y demanda se mantiene inestable. El impacto en la logística global La brecha entre las tarifas spot y las tarifas de contrato continúa ampliándose, impulsada en parte por el crecimiento del e-commerce y su impacto en la negociación de precios a largo plazo. Actualmente, el ratio del libro de pedidos de portacontenedores supera los 4 millones de TEU, lo que equivale al 27% de la capacidad total del mercado. Esta expansión, junto con la anticipación de la temporada alta, ha profundizado la corrección en las tarifas de flete. Las compañías navieras enfrentan el desafío de equilibrar su capacidad operativa sin generar un exceso de oferta, lo que podría continuar debilitando los precios. Mientras tanto, los costos logísticos fluctúan en función de la volatilidad de las tarifas, lo que afecta la planificación de las cadenas de suministro a nivel global. Reacciones del sector ante la crisis Las principales navieras evalúan estrategias para contrarrestar el impacto de la caída en las tarifas spot. Algunas empresas han optado por reducir frecuencias en rutas clave, mientras que otras buscan ajustar su estructura operativa para mitigar las pérdidas. Sin embargo, los cuellos de botella en Asia siguen afectando los tiempos de tránsito, lo que genera demoras y costos adicionales. El mercado de fletes se encuentra en un punto de inflexión, con una demanda fluctuante y una oferta en expansión. La industria observa con atención la evolución de las tarifas y los niveles de ocupación, mientras se esperan ajustes adicionales en los próximos meses. Un panorama incierto para el comercio marítimo El desplome en las tarifas de flete refleja un cambio en la dinámica del comercio marítimo, donde la oferta de capacidad y la demanda global aún buscan un punto de equilibrio. Las empresas navieras, los exportadores y los importadores deben adaptarse a un escenario de volatilidad que seguirá marcando la logística internacional en el corto plazo. Las rutas comerciales más afectadas por la caída en las tarifas y la reducción de capacidad incluyen el tráfico transpacífico, donde la demanda de contenedores ha disminuido significativamente, y, como se mencionó, el corredor Asia-Europa, que enfrenta ajustes en los itinerarios de las principales navieras. El desplome en las tarifas de flete refleja un cambio en la dinámica del comercio marítimo, donde la oferta de capacidad y la demanda global aún buscan un punto de equilibrio (Foto: Shutterstock) El mercado de transporte marítimo sigue en un proceso de ajuste mientras las tarifas spot continúan en descenso. Según datos del sector, la capacidad total de la flota global de contenedores supera los 26 millones de TEU, con un crecimiento proyectado del 8% para 2025. Sin embargo, la sobreoferta de buques y la desaceleración en la demanda presionan aún más los precios. A esto se suman los retrasos en puertos clave de Asia, donde los tiempos de espera alcanzan hasta 10 días en algunos terminales. Todo este panorama, genera un fuerte impacto en la eficiencia del comercio internacional.
Ver noticia original