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» Diario Cordoba
Fecha: 04/03/2025 20:06
Varios testigos del incendio que el 1 de octubre de 2023 arrasó dos discotecas en Murcia en las que fallecieron 13 personas han corroborado ante el juzgado que en la sala Teatre, donde presumiblemente comenzó el fuego, se utilizaron máquinas de fuegos fríos con chispas que llegaban hasta el techo, y que no había luces de emergencia ni sistemas antincendios. En total han pasado este martes por el juzgado número 3 de Murcia, que instruye el caso, seis testigos, clientes de la discoteca, que han narrado que la noche del incendio funcionaron dos de las citadas máquinas de fuegos fríos cuyas chispas llegaban a impactar en el techo o en los focos de la sala, según ha explicado a los periodistas tras la sesión la abogada Rosa Egea, que representa a una de las víctimas mortales y a media docena de supervivientes. Asimismo, los testigos han referido que fue precisamente en las zonas donde impactaban las chispas donde comenzaron a ver humo, cenizas e incluso algunas telas ardiendo, ha detallado el también abogado de una de las víctimas mortales Pedro López Graña, que ha agregado que estos testigos han confirmado además que en la sala no había ninguna medida de seguridad, como luces de emergencias o sistemas de detección como aspersores. Para el abogado de tres de los fallecidos, José Manuel Muñoz Ortín, estos testigos han corroborado la información que la investigación había ya puesto sobre la mesa sobre el origen y posible causa del incendio. 13 posibles homicidios imprudentes El letrado ha puesto el foco en la ausencia durante toda la fase de instrucción del Ministerio Fiscal que, ha lamentado, solo ha estado presente en dos de las sesiones al inicio de este procedimiento, a pesar de la gravedad de los hechos que se investigan, trece posibles homicidios imprudentes. En su opinión, es “incomprensible” que el fiscal no haya solicitado, casi un año y medio después de la tragedia, ninguna diligencia, pruebas, declaraciones o documentos cuando, ha apuntado, en un caso de esta envergadura, debería estar impulsando la investigación más allá de la que promueven las propias víctimas. Ningún responsable municipal ha sido citado a declarar Por su parte, el abogado que representa al propietario de la sala Fonda Milagros, donde se produjeron las 13 muertes, Francisco Javier Verdú, ha manifestado su incomprensión por el hecho de que ningún responsable municipal haya sido citado a declarar en esta fase de instrucción a pesar de que el propio Ayuntamiento reconoció la situación irregular de las dos salas de fiestas, que compartían una misma nave industrial y tenían una única licencia de actividad a pesar de ser dos negocios diferentes, y además tenían una orden de cese de actividad. Verdú ha insistido en la necesidad de que los responsables municipales expliquen por qué no se ejecutó esa orden y por qué se permitió funcionar a locales que no cumplían con las medidas de seguridad establecidas en la ley, algo que es “un hecho notorio” por el que es necesario, al menos, que se den explicaciones. El propietario de Fonda Milagros, ha subrayado, no va a eludir su posible responsabilidad en este caso, pero “el Ayuntamiento es tan responsable” como cualquiera de las personas a las que se está investigando, seis en total, por lo que ha llamado a la reflexión sobre esta ausencia. Los abogados de las víctimas mortales ya solicitaron en su día que se incluyera al Ayuntamiento en la causa, lo que fue rechazado por la jueza. El asunto ha sido recurrido en la Audiencia Provincial, que no se ha pronunciado todavía sobre si se abrirá o no esa investigación contra la administración local. Este jueves está previsto que testifiquen también en la causa varios empleados de la sala Teatre.
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