03/03/2025 18:12
03/03/2025 18:12
03/03/2025 18:11
03/03/2025 18:08
03/03/2025 18:07
03/03/2025 18:07
03/03/2025 18:07
03/03/2025 18:07
03/03/2025 18:06
03/03/2025 18:06
» Corrienteshoy
Fecha: 03/03/2025 11:40
¿Sabías que las emociones determinan la calidad de nuestra energía durante el día? Por María Antonia Galvaliz Tanto el balance y equilibrio de vida, como la felicidad, la salud, el alto desempeño, el bienestar son cuestión de un adecuado manejo de energía, más que cuestión de administración de tiempo. Para aprender a manejar bien la energía personal es importante entender que como seres humanos tenemos diferentes tipos de energía: la física, la emocional, la mental y la espiritual. Necesitamos hacer un chequeo continuo para verificar y registrar conscientemente cómo están cada uno de estos combustibles o “tanques” de energías. No sólo es importante asegurarnos que contamos con la vitalidad y los recursos necesarios que requieren nuestras metas y objetivos personales; también es indispensable aprender a hacer altos, pausas, para disfrutar más el presente con su aquí y ahora en que nos encontramos. Diferentes tipos de energía Energía Emocional. Cuando la persona puede autorregular y gestionar correctamente sus emociones, se mantienen en su mejor versión, aunque atraviesen por situaciones difíciles. Un recurso para manejar bien la energía emocional es aprender a ver las cosas con lentes y perspectivas diferentes, significa cambiar la historia que nos contamos, “cuando cambiamos la manera de ver y significar las cosas, las cosas cambian de manera”. Ej.: usar un lente largo para ver la situación a la distancia: ¿esto como me va a importar en los siguientes 2 años? Ej.: usar un lente en detalle: ¿qué parte no estoy viendo? ¿qué estoy viendo? Ej.: usar un lente ancho para darle la proporción adecuada: ¿lo que yo agregué a la historia es objetivo o subjetivo? Es común que se tienda a restar importancia a la energía emocional que, a otro tipo de energías, ya que se cree que “bloquearla” o “ignorarla” concentrándonos en otra cosa, podremos ser igual de productivos; pero esto es un error, por lo que se recomienda dedicar tiempo -dentro de la rutina con sus prácticas diarias- para analizar el estado de nuestras emociones que nos abrazan, para identificarlas, entenderlas, aceptarlas y trabajarlas. Energía Mental . La energía mental refiere a dónde ponemos nuestra atención, esto define el foco de nuestra energía; hoy en día se cree que hay que ser multitasking o multitarea para ser más eficiente, sin embargo, está comprobado que cuando interrumpimos lo que estamos haciendo por atender otro pendiente simultáneamente, se incrementa hasta en un 25% el tiempo que nos tomaría terminar la tarea original. Un recurso para manejar bien la energía mental, por ejemplo, seria, asignar un horario durante el día para contestar los mensajes, correos y teléfono; esto permite estar enfocados y terminar las tareas en el tiempo y forma en que se pretende hacerlo. Energía Espiritual. La energía espiritual nos ayuda a establecer la dirección que le damos a nuestra energía. Para canalizar esta energía interna, es importante asignar un propósito, un significado que tenga sentido, tenga peso y sea relevante, que sea trascendente para uno, de aquellas acciones en que estamos centrados u ocupados. Un recurso para manejar bien la energía espiritual, es que te asegures que el trabajo que desempeñas te permita hacer las cosas que amas y en las que eres bueno, porque tienes talento y cualidades para realizarlo. “Ama lo qué haces”. Destina tiempo consciente de calidad a las cosas que son importantes y consideras valiosas, fuera del trabajo cómo ser: familia, salud, hobbies, voluntariado, amistades, formación etc. Vive en congruencia a tus valores personales; esto te ayudará a vivir en integridad y paz interior. El equilibrio de tu energía espiritual te permitirá sentirte realizado y más feliz durante tus actividades cotidianas, también te ayudará a crear un equilibrio entre los pendientes laborales y la vida privada. Energía Física. Nuestra parte física es la fuente de las otras tres formas de energía; tus hábitos de alimentación, el descanso y sueño reparador, el movimiento físico, ayudarán a mantener la pila cargada. Un recurso para manejar bien la energía física, es controlar la ingestión de alcohol, cafeína, azucares, sal, grasas, gaseosas, alimentos procesados con muchos químicos, etc. Come sano, incluir frutas y verduras, alimentos que reciban el rayo del sol, beber suficiente agua e incluir snacks de frutos secos, yogures naturales. Establecer una agenda regular al despertar, al cerrar la jornada, relajar para dormir, hacer una pequeña reflexión con agradecimiento por lo aprendido y vivido en el día. Contribuye el movimiento y ejercicio sostenido en lo posible al aire libre que permita recibir luz natural. Restablece y recupera alguno de los tipos de energía cuando alguna de esas energías está desregulada o decaída, y date tiempo para recargarlas lo antes posible, antes de volver a la acción. Te mando un beso inmenso TG. IG Tona Galvaliz. FB/LinkedIn. María Antonia Galvaliz. Counselor-Logoterapia-Biodecodificación- Coaching Ontológico y Sistémico- Speaker- PNL- Coaching WingWave- Escritora Columnista- Desarrollo Humano personal y organizacional.
Ver noticia original