Contacto

×
  • +54 343 4178845

  • bcuadra@examedia.com.ar

  • Entre Ríos, Argentina

  • Joyas escondidas de Andalucía

    » Diario Cordoba

    Fecha: 28/02/2025 17:25

    La comunidad andaluza abre sus puertas al visitante con la persuasión de su rico patrimonio histórico y una amplia oferta cultural, pero también con un legado más íntimo y en ocasiones oculto dispuesto a sorprender incluso a quienes viven aquí. Se trata de pequeñas joyas paisajísticas, arquitectónicas y etnográficas en cada una de las provincias andaluzas. Sinagoga del Agua, en Úbeda (Jaén). / José Pedrosa / Efe Sinagoga del Agua, Jaén Aunque es tarea ardua descubrir una joya dentro del tesoro que es Úbeda, un hallazgo de relativa cercanía en el tiempo (2007) desveló la existencia de una sinagoga escondida entre las estructuras de varias viviendas privadas. Las obras de remodelación de una finca revelaron, entre otras salas de un antiguo hogar judío, la destinada al baño ritual de purificación o Mikveh. Por esta sala se conoce el espacio como Sinagoga del Agua, donde los visitantes pueden asomarse a sus pozos y recrearse en las galerías de aguas subterráneas. Vista de Zuheros, en Córdoba. / Manuel Murillo Zuheros, Córdoba Enclavado en el Parque Natural de las Sierras Subbéticas, Zuheros es uno de los pueblos más bonitos y menos conocidos de Andalucía. Declarado Bien de Interés Cultural en su categoría de Conjunto Histórico-Artístico, gracias a su excelente estado de conservación, la localidad –que otea desde el risco más alto su castillo- invita al paseo y al disfrute de los sentidos. Su entorno permite desarrollar actividades tan diversas como la visita al yacimiento arqueológico de la Cueva de los Murciélagos o rutas de senderismo por la cuenca del río Bailón. El Coto de las Canteras, en Sevilla. / James Narmer Coto de las Canteras, Sevilla El Coto de las Canteras es una explotación de canteras de mármol y piedra caliza de la antigua Urso, que datan del siglo V aC y se encuentran en un estado de conservación excelente, ya que tuvieron actividad comercial hasta los 60. La localidad de Osuna alberga este tesoro de relieves que evocan la majestuosidad de la ciudad de Petra en Jordania y dan testimonio de la labor de los sillareros y de su historia, que quedó tallada en la piedra. Corta Atalaya, en Huelva. / Julián Pérez / Efe Corta Atalaya, Huelva Dentro de las actividades turísticas que ofrece el Parque Minero de Riotinto (desde la visita al Museo Minero o al antiguo barrio inglés de Bella Vista, pasando por el paseo en tren a través de paisajes lunares por la cuenca del río Tinto), quizá sea la visita a Corta Atalaya una de la menos conocida y más interesantes. Incluida desde 2012 como Bien de Interés Cultural, esta localización minera está considerada como la más grande de las explotaciones a cielo abierto de Europa. Solo las dimensiones de la elipse que forman los estratos de la cantera dan cuenta de la espectacularidad del paisaje: 1.200 metros de largo, 900 metros de ancho y 345 metros de profundidad. Corrales de pesquería, en Cádiz. / Rafael Avilés Corrales de pesquería, Cádiz Los corrales de pesca o corrales de pesquería son un conjunto de construcciones sobre la orilla de las playas de Rota y Chipiona, ligadas a un arte de pesca tradicional al menos desde la época romana, aunque no se sabe si su origen es fenicio o árabe. Estos diques levantados por el hombre, construidos en piedra seca sobre plataformas de abrasión de antiguos acantilados, aprovechan las mareas y facilitan la captura de peces y mariscos que quedan encerrados entre sus muros de piedra. El límite del monumento queda definido por una línea poligonal que incluye una pradera de plantas fanerógamas y los ocho corrales (sobreviven cinco) que integraban el conjunto protegido como Monumento Natural desde 2006 por atesorar valores culturales, arqueológicos y naturales. La visita a los corrales permite acercarse a un arte de pesca milenario y asomarse a una de las playas más bellas de la costa gaditana como la de Punta Candor. Casa Cueva de Ginés, Bobastro, ern Málaga. / Pedro Cantalejo Bobastro, Málaga Por la carretera de Álora a Ardales, cerca del famoso Caminito del Rey, el enclave del Parque Natural Desfiladero de los Gaitanes da paso a Bobastro, un complejo rupestre del siglo IX. Este fortín inexpugnable para las tropas de los Omeyas conserva las ruinas de una antigua iglesia mozárabe. Los cristianos que vivieron bajo el dominio islámico burlaron la prohibición de construir templos levantando iglesias rupestres como la que se conserva aquí. La de Bobastro fue destruida por Abd al-Rahman III tras la toma definitiva del enclave y la derrota de los que se opusieron a los Omeyas de Damasco Omar ibn Hafsún a la cabeza. Vistas de Capileira, en Granada. / Ayuntamiento de Capileira La Alpujarra, Granada Aunque cada vez sea menos desconocida, la Alpujarra sigue siendo una de las zonas montañosas de Andalucía de belleza más singular que destaca por los pueblos blancos, la tradición, la artesanía y los productos locales. Dicen que Pampaneira es el pueblo más bonito de la sierra, pero tampoco debe perderse Capileira, Órgiva, Lanjarón o Bubión. Los vientos fríos de la cima de la Península y el pasado morisco convierten este rincón, a la sombra del Veleta, en uno de los imprescindibles de la provincia. Sorbas, en Almería. / Turismo de Andalucía Sorbas, Almería Se conoce como la Cuenca chica por sus casas colgadas de una formación rocosa muy singular. Sorbas (en árabe olla de arena) está situada en una montaña de 40 metros de altura rodeada por un barranco y el río Aguas. Las viviendas se asoman al cortado, al igual que los visitantes que se acerquen a los numerosos miradores repartidos por el pueblo. A sus pies se abre un paisaje que bien podría ser escenario de un libro de Julio Verne y que se originó hace 6 millones de años cuando se retiraron de allí las aguas del mar.

    Ver noticia original

    También te puede interesar

  • Examedia © 2024

    Desarrollado por