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Concordia » Entre Rios Ahora
Fecha: 28/02/2025 11:30
El conflicto laboral en la Planta La China de Concepción del Uruguay de Granja Tres Arroyos, el frigorífico avícola de mayor envergadura del país, se cerró en armisticio: la empresa acordó en la Secretaría de Trabajo de la Nación mantener la planta de 1.000 trabajadores sin variantes por un plazo de un año aunque sí aplicar podas salariales, tal como lo había expresado en el procedimiento preventivo de crisis que hizo público en diciembre y que desató el malestar de los obreros. La tregua se selló luego de una menguada asamblea que se realizó en el Camping El Espinillo del Sindicato de la Industria de la Alimentación, en Concepción del Uruguay: los trabajadores de Gran Tres Arroyos votaron, en forma secreta, si aceptaba o rechazaban la oferta empresaria. La mayoría votó por la aceptación, aunque los que perdieron con su moción quedaron malquistados e hicieron correr la versión de que “la burocracia sindical” había traicionado a las bases. El lunes 24, fin de la conciliación obligatoria dictada por Trabajo luego de los 80 despidos de trabajadores, hubo una contraoferta empresaria. Esa propuesta fue bajada a una asamblea el martes 25 en la que se votó aceptación. La votación ocurrió en un clima de tensión, de tensión en aumento. “Los que perdieron la votación se enojaron -cuenta Miguel Klenner, secretario general del Sindicato de la Alimentación, en diálogo con el programa Puro Cuento de Radio Plaza 94.7-, Un grupo, que estaba bastante alterado, empezó a insultarme verbalmente. Para ensuciarme, dijeron que el gremio no hizo las cosas bien. Pero siempre todo se trató en asamblea. Bueno, terminó la votación y es una lástima que lleguemos a esto en, un desbande cómo terminó, con agresiones, con insultos. A mí no me importó que me insulten. Encaré la lucha como la encaré, y sabía que mi persona corría mucho riesgo de todo sentido y me la jugué. Bueno, hoy día los 1.000 trabajadores de la planta de Tres Arroyos siguen trabajando”. -¿Ahora Tres Arroyos retomó la actividad. ¿Qué pasó con los 80 que estaban despedidos? -Esos despidos que daron sin efecto. Todos fueron reincorporados automáticamente. Fue uno de los puntos que siempre estuvieron en claro. Si aceptábamos el preventivo de crisis, tenían que tomar a todos los compañeros. Están todos trabajando. -¿Para ustedes es una lucha ganada, aún cuando haya tenido que rescindir derechos? -Acá hay que tener algo en claro: hay un gobierno nacional que no apoya a los gremios. Quedé solito, solito y solo, con todo en contra. Aceptamos el descuento salarial, fue decisión de los compañeros y hay que respetar la decisión democrática de los compañeros. Los compañeros votaron volver a trabajar. Veremos de acá a un año cómo seguimos cuándo nos sentemos de vuelta, porque esto va a durar un año, me refiero al preventivo. -¿Por qué decis que te dejaron solo? -Muchos dijeron: “Yo te acompaño”, Pero ese “yo te acompaño” solo fue hasta la puerta del cementerio. No entraron. Pero ya está: lo que pasó está filmado, está escrito, acá no hay manera de escaparse. Sabemos quién estuvo y quién no estuvo. Es la realidad. Acá lo que a mí me deja la conciencia tranquila, la paz en el corazón, es que la peleé con la gente, la peleamos todas. No me ayudó la Ley Bases, no me ayudó la situación en la que estamos en el país: el país está en crisis. Lo bueno es que comprometimos a la empresa para que no eche a nadie, y hoy estamos con trabajo. -¿Qué representatividad tiene entre los trabajadores de Granja Tres Arroyos la Izquierda? En la manifestación del domingo 23 estuvo el diputado nacional Nicolás del Caño. sindicalmente en Tres Arroyos la izquierda? Ahí estuvo Nicolás del Caño. Cuestionaron mucho lo hecho por el sindicato. -La Izquierda, acá, no tiene nada que ver. Ellos vinieron para la foto. Eso sí, vos lo ves, se meten en todos lados. Pero ellos no representan a nadie en el país, representan a una minoría, y acá en Uruguay son una minoría. Acá somos peronistas, después hay gente radical, y bueno, ahora ganó Milei, como todos sabemos, sin estructura en todo el país. Pero acá no vino nadie de Milei. Les importó poco el tema. Aunque para mojarle la oreja a más de uno, en la marcha del domingo destaqué que estaba Nicolás del Caño. Y pregunté: ¿dónde están los míos?. No vino ninguno. Bueno, así estamos. Veremos en las próximas elecciones qué peso tendrá esta ausencia. Los diputados y senadores me decían: `Mirá, Miguel, nosotros estamos peleando ahí adentro, legislando las leyes, y tenemos mil problemas y solucionando temas en el país. Pero, bueno, un ratito decís: `Che, acá estoy, después me voy`. Pero ojo, la pelota no se mancha, este sindicalista hizo bien las cosas, y acá decidió la gente, decidieron los compañeros, no el sindicato. De la Redacción de Entre Ríos Ahora
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