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» Rafaela Noticias
Fecha: 28/02/2025 09:00
Juró García-Mansilla como juez de la Corte Suprema, mientras Lijo deberá esperar Por Redacción Rafaela Noticias La Corte Suprema de Justicia de la Nación tomó juramento este jueves a Manuel García-Mansilla, designado por el presidente Javier Milei mediante un decreto, mientras que la asunción de Ariel Lijo se postergó al menos hasta la próxima semana. La decisión del máximo tribunal supone un revés parcial para el Gobierno, que esperaba completar la incorporación de ambos magistrados antes del 1 de marzo, cuando Milei abrirá el año legislativo en el Congreso. La llegada de García-Mansilla y Lijo a la Corte generó controversia desde el inicio. Ambos fueron nombrados en "comisión", un mecanismo contemplado en la Constitución Nacional que permite al Ejecutivo designar jueces sin acuerdo del Senado cuando el Congreso está en receso. Sin embargo, esta decisión fue cuestionada por distintos sectores políticos y jurídicos, que argumentan que no se trata de una situación de urgencia que justifique el uso de esta herramienta. Si bien García-Mansilla logró sortear las críticas y asumió su cargo, Lijo sigue envuelto en un mar de objeciones. Su postulación fue objeto de más de 30 denuncias por presunto mal desempeño, y su figura generó un amplio debate en el Senado, donde su pliego fue aprobado gracias a una negociación con el peronismo. No obstante, su nombramiento en la Corte aún está supeditado a la evaluación de un pedido de licencia presentado ante el propio tribunal, en el que argumenta que no puede renunciar a su cargo de juez federal sin la certeza de que su nuevo puesto será permanente. Desde el Gobierno, la demora en la jura de Lijo no es vista como un obstáculo definitivo. La Oficina del Presidente defendió el decreto de designación, asegurando que la Corte no puede funcionar con solo tres jueces y que el Senado debía haber dado su acuerdo a los candidatos. La oposición, en cambio, sostiene que la falta de respaldo legislativo responde a los antecedentes de los postulantes y no a cuestiones meramente políticas. La controversia recuerda un episodio similar ocurrido en 2016, cuando el entonces presidente Mauricio Macri intentó nombrar dos jueces de la Corte por decreto. La fuerte resistencia política lo obligó a retroceder y recurrir al proceso habitual de aprobación legislativa. En este caso, la estrategia de Milei parece firme, aunque aún resta ver si la Corte finalmente avalará la incorporación de Lijo o si la polémica se profundizará en las próximas semanas.
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