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Usuhahia » Diario Prensa
Fecha: 25/02/2025 10:58
El imputado había sido denunciado en el año 2019 por hechos ocurridos en 2012. Fue sobreseído en 2021 y ahora condenado en 2025. El sujeto de 37 años fue condenado el lunes último por abusar sexualmente del hijo de su pareja de 4 años de edad, en Río Grande. Impasible, una vez leída la sentencia quedó inmediatamente detenido, luego de 6 años de proceso. El Tribunal de Juicio en lo Criminal del Distrito Judicial Norte condenó el lunes 24 de febrero a Carlos Mallo a la pena de 18 años de prisión por el delito de “abuso sexual gravemente ultrajante con acceso carnal, en concurso con promoción de la corrupción de menores, agravada por la edad de la víctima”. La sentencia fue dictada el lunes 24 de febrero en Río Grande. Según determinó el Tribunal, los hechos ocurrieron en esa ciudad entre los años 2012 y 2013, cuando la víctima, hijo de la pareja de Mallo, tenía cuatro años de vida. Como agravante, se consideró la convivencia del imputado con el niño, en un contexto en el que el acusado era padrastro del menor y por ende, responsable del mismo. Luego de separarse de Mallo, la mujer se quitó la vida, por lo que su padre biológico quedó a cargo del chico. Al ser llevado a una psicóloga por alteraciones en su conducta, la profesional afirmó que su pequeño paciente había sido víctima de abuso sexual, entre otras vulneraciones, iniciándose así un extenso proceso judicial. La denuncia se presentó en 2019 por hechos que habrían ocurrido siete años antes. En un primer momento, el ex juez de instrucción Daniel Césari Hernández sobreseyó a Mallo, por considerar que no había suficientes elementos para inculparlo, pero en 2021 la Cámara de Apelaciones revocó el fallo y permitió la continuidad del proceso. Durante el juicio, se presentaron testimonios de peritos y testigos que describieron la compleja situación psicológica del menor. Una vecina declaró que el padre biológico también ejercía malos tratos y descuidos sobre el niño, mientras que especialistas en psicología forense detallaron que el joven, ahora adolescente, sufre trastornos psicológicos severos derivados de una infancia marcada por diversas experiencias traumáticas. En la etapa final del juicio, el fiscal mayor del Distrito Judicial Norte, Martín Bramati, y la querella, representada por María Ponce Salazar, solicitaron una pena de 20 años de prisión. Sin embargo, el Tribunal aplicó una condena de dos años menos. Además, rechazó los pedidos de nulidad presentados por la defensa, a cargo del abogado Maximiliano Palladino, y ordenó la inmediata detención de Mallo, quien se mostró en todo momento inexpresivo. Tras la lectura del veredicto, familiares y organizaciones contra el abuso sexual infantil, estallaron en aplausos y expresiones de alivio. El Tribunal a cargo de hacer justicia para una víctima que es hoy un adolescente de 17 años de edad, estuvo presidido por el juez Juan José Varela e integrado por los jueces Eduardo López y Pedro Fernández, en carácter de subrogante.
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