23/02/2025 17:08
23/02/2025 17:07
23/02/2025 17:00
23/02/2025 17:00
23/02/2025 17:00
23/02/2025 17:00
23/02/2025 17:00
23/02/2025 17:00
23/02/2025 17:00
23/02/2025 16:58
» Diario Cordoba
Fecha: 23/02/2025 11:30
-Tu nuevo single se llama ‘Bien de amores’ y es un canto a la autoestima y al amor a uno mismo. ¿En quién piensas cuando cantas esa canción? -Cuando la canto, siento que estoy celebrando un desamor y siento que no se acaba el mundo, sino que empieza mi mundo. Eso es lo que quiero transmitir, que hay que celebrar los desamores también, que a veces tiene que romperse algo para que algo nuevo nazca. -¿El que canta al principio de ‘Bien de amores’ es tu abuelo? -Sí. -¿Cómo ha sido grabar con él? -Ha sido maravilloso, lo he disfrutado muchísimo. Hablabas de celebrar el desamor. ¿El amor te ha dado más alegrías o más tormento? -El amor propio muchísimas alegrías. El otro tipo de amor, el del mito romántico, todo tormento. ¿Entonces no crees en el amor de pareja? -En el mito del amor romántico no, ni en el amor para toda la vida, yo creo que la persona más importante de tu vida eres tú mismo porque eres la única que está contigo, a tu lado, desde que naces hasta que mueres. Por eso, antes de tener una buena relación con nadie, hay que asegurarse de tener una buena relación con uno mismo. Cierra una etapa, la de Ultrabelleza, que la colocó en lo más alto, y empieza una nueva con mucha fuerza y un mensaje muy oportuno a pocos días del 8 de marzo -¿Ese planteamiento no es también un poco individualista? -Pero ¿no es mucho mejor dar algo cuando tienes algo bueno dentro que dar? Amar de forma sana es estupendo, pero para amar a otra persona de forma sana primero tienes que aprender a amarte a ti misma de forma sana, ese es el primer paso. ¿Y a partir de ahí sí te parece posible el otro amor? -Por supuesto, pero es que el amor más verdadero que yo he experimentado a lo largo de mi vida, el amor más puro, ha sido el de mis amigas y también el de mi familia ¿y sabes qué? Que ya no me conformo con menos. El otro amor no digo que no llegue, pero no es mi prioridad. -«Vivir contigo, pero no morir por ti», dice la canción. -Exactamente, no tenemos que tolerar ningún desplante. A las mujeres nos han enseñado a aguantar y eso está muy mal enseñado, tenemos que aprender que no hay que aguantar faltas de respeto nunca, que hay que priorizar siempre los vínculos sanos en la vida, en el trabajo, en las amistades, en el amor y, por supuesto, en la familia. En el momento en que una persona te falta al respeto, no merece tu tiempo ni tu presencia. -¿Lo dices porque lo has vivido en primera persona? -Es lo que he aprendido en mi vida. Por eso quiero ante todo vínculos sanos, bien de amores. -Antes del nuevo single, lanzaste dos temas flamencos: una versión de ‘Superpoder’ y otra de ‘Puro teatro’. ¿Qué es el flamenco para ti? -El flamenco lo es todo. Es una forma de vivir, de entender, una filosofía de vida, como el budismo. -¿Quién te enseñó esa filosofía de vida? -Mi abuelo Pepe, el padre de mi madre. Él es una persona muy especial para mí, me dio el mejor de los legados. Somos compañerillos, nos entendemos muy bien y tengo un feeling muy especial con él, un vínculo súper súper fuerte. - ¿Cuál es la lección más grande que aprendiste de él y qué te dice ahora que estás triunfando? -Me dice que mi voz es mía, que aparte de ser bonita tengo que ser dueña de su mensaje y comunicar siempre cosas que estén en coherencia con mi persona. Y que cante, que cobre pero que no me venda. Y está muy contento, se emociona mucho cada vez que ve que hago cosas bonitas. -En ‘Superpoder’ decías que aprendiste a llorar cantando y a cantar llorando. ¿Ser artista y mujer es una forma de ser poderosa y frágil a la vez? Yo creo que todas las personas somos frágiles, lo que pasa es que la fuerza de reconocerlo en público hace que esa fragilidad se convierta en un superpoder. -¿Qué música escuchabas de pequeña y cuál escuchas ahora cuando estás en casa? -De pequeña escuchaba, sobre todo, lo que cantaba mi abuelo. Y la música que salía por la tele y por la radio, la verdad. Ahora escucho todo tipo de música. Desde arambito a música electrónica, clásica, rock y flamenco, por supuesto. -¿Cómo te llevas con la industria discográfica? ¿Es difícil negociar tu espacio en un mundo tan competitivo? -No es que sea competitivo, es que va mucho con las tendencias y yo no entiendo la música como una moda, la entiendo como una expresión más de mi persona, como un legado que dejo en el mundo para que cuando me vaya quede algo bonito y eso no es una tendencia, eso es algo que perdura. -¿Has llegado a sentirte cómoda en ese mundo? -Siento que tengo mi espacio propio. Más chico o más grande, pero mío. -Tú estudiaste en Barcelona con otros músicos de tu generación. ¿Os lleváis bien entre vosotros? -Ay, súper bien. Es precioso poder estar viva en este momento histórico de la música porque hay muchísima conexión, sobre todo, entre las mujeres. Me gusta mucho el panorama flamenco de vanguardia que hay ahora, porque hay muchas razas. -¿A quién te sientes más afín de esos compañeros con quien aprendiste? -Me siento muy afín por ejemplo a La Plazuela. -¿Crees que el flamenco hay que mezclarlo con otras cosas para que crezca? -No, el flamenco crece por sí mismo, pero durante mucho tiempo ha sido muy endogámico, no se ha mezclado con otros géneros. -¿La mezcla que se está produciendo te gusta? -Yo creo que todo suma en la música, pero hay que saber diferenciar lo que es flamenco tradicional de lo que es la visión personal de cada artista. Yo creo que el panorama es tan rico porque los artistas tenemos autodeterminación en lo que hacemos, en lo que escribimos, en cómo lo escribimos y cómo lo plasmamos en la producción. Por eso es tan variado, porque existe una libertad de expresión en la música. -En tus letras, siempre hay mucha reivindicación por la gente del pueblo, por los barrios obreros, por las mujeres. ¿La música tiene que estar comprometida con los problemas de su tiempo? -Sí, porque la música puede cambiar la vida de la gente. De hecho, a mí me la cambió, para mejor. -¿Hay algún género musical que se te atragante? -El heavy metal, porque no consigo cantar guturalmente. -¿Y a la hora de escuchar? -Ninguno. Yo soy muy de canciones, como que me obsesiono con una canción y ya no sale de mi mente durante mucho tiempo. -¿El reggaetón también te gusta? -Hay canciones de reggaetón que me encantan, como Pobre Diabla de Don Omar, esa es mi favorita. -¿Y fuera del reggaetón? -No sé, no podría elegir. Bueno a ver, Nuevo Día, de Lole y Manuel, tiene muchas papeletas. -¿Qué le dirías a las niñas de barrio que quieren volar como tú? -Que valen mucho, que sueñen grande, que ellas pueden, y que son bellísimas, que se quieran muchísimo, y que no intenten encajar en ningún molde, porque para la gente grande no hay moldes. -Se ha cumplido un año del disco ‘Ultrabelleza’. ¿Ese disco fue decisivo en ese cambio de vida del que hablabas antes? -Totalmente, ese disco me ha llevado ya por siete países. -¿Esperabas algo así? -No, esperaba poder compartir mi música con el mundo, pero no me esperaba tanto, estoy muy feliz. -¿Después del éxito experimentado con ‘Ultrabelleza’ te da miedo que haya muchas expectativas con lo nuevo? -No me da miedo la música, me da amor, nunca miedo. La cantante María José Llergo. / Adriana Roslín -¿Quién es la primera persona a la que enseñas tus canciones nuevas? -Mi madre. -¿Y es muy crítica? -No, es muy disfrutona. -¿Cómo consigues mantener los pies en el suelo a pesar de la fama? -Siendo muy selectiva con mis vínculos y cuidando muchísimo mi relación con la gente de siempre, la de toda la vida. Yo sigo muy unida a mis amigos de la infancia, voy muchísimo a mi pueblo, disfruto de mi abuelo, cultivo mi persona para que mi artista esté equilibrada y no se deje llevar por las mieles y las tentaciones de este mundo tan raro. -Has cantado en el Palau de la Música y el Teatro Cirque. ¿Qué supone para una artista actuar en estos escenarios tan imponentes? -Me parece precioso porque yo en Barcelona iba a ver el Palau de la Música, es precioso, con esa arquitectura tan maravillosa de cuento, y me quedaba embobada. Es una pasada saber que puedes cantar ahí, te llena muchísimo y a la vez te dices que tienes que estar impecable. -¿Cuál es el sueño que sigues teniendo a día de hoy? -Tengo muchos, pero sobre todo, mi sueño es mantenerme feliz aunque el mundo se tambalee. He aprendido a vivir con optimismo todo lo que me pasa, incluso los golpes de la vida, y quiero continuar siendo honesta conmigo misma y siendo yo. -En alguna ocasión, has contado que sufriste ‘bullying’. Los artistas estáis también muy expuestos a las críticas a través de las redes sociales. ¿Tus seguidores te tratan bien? -Yo ya tengo 30 años y no me afectan tanto esas cosas, pero entiendo que hay artistas más jóvenes, adolescentes, que aún no han conocido la crueldad tan en primera persona y entiendo que les duela mucho. La verdad es que yo no recibo odio en las redes, al contrario, recibo mucho amor y estoy muy agradecida porque lo que he conseguido cultivar no es nada tóxico y eso es un logro en estos tiempos. -Dices que vas mucho a tu pueblo, a Pozoblanco. ¿Qué tiene el campo, el mundo rural, que no tenga la ciudad? -La pureza de la gente, en mi pueblo estoy todo el día acariciando burritos, alimentando ovejillas, corriendo por el campo, viendo a mi abuelo y a las personas que me quieren desde siempre a las que les gusta lo que hago pero les importa más que nada que yo sea feliz y esto te cura de todo y te hace ver que la vida es maravillosa, que hay personas buenas y que lo que importa es lo que tú tienes dentro. Si viene algo malo, sé que ellos me van a coger entre todos de la manita y me van a acompañar en lo que sea. Suscríbete para seguir leyendo
Ver noticia original