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» Jackemate
Fecha: 18/02/2025 00:52
Comparte este Articulo... La salud del Santo Padre se complica hora a hora, y es por eso que la Conferencia Episcopal Argentina (CEA) lanzó un llamado a toda la comunidad católica para unirse en oración por la pronta recuperación del Papa Francisco, quien se encuentra hospitalizado en el Policlínico ‘Agostino Gemelli’ de Roma, como consecuencia de una infección respiratoria persistente, la que fue diagnosticada inicialmente como bronquitis, pero en los últimos días ha sido actualizada como una infección polimicrobiana en el tracto respiratorio. Se trata de una condición más compleja que involucra la presencia simultánea de varios microorganismos patógenos, según trascendió de fuentes vaticanas, donde ya se organizan y coordinan acciones futuras en el caso de empeorar la salud de Francisco. «Un breve período de impedimento no genera ningún problema», indicó al respecto la profesora de Derecho Canónico en la Universidad de Bolonia y consultora de la oficina jurídica del Vaticano, Geraldina Boni. La especialista puntualizó en que «la maquinaria de la curia continúa operando normalmente con la administración ordinaria» En tanto, según explicó el padre Filippo Di Giacomo, experto canónico y comentarista de textos eclesiásticos, «el Papa sigue actuando, incluso desde el hospital o cuando enfrenta momentos dolorosos como este, su poder actúa sobre la gente a la que le dio potestad ordinaria vicarial». Recuerdan desde el mismo Vaticano que el canon 335 declara que cuando la Santa Sede queda «vacante o impedida completamente», no puede alterarse nada en el Gobierno de la Iglesia. Sin embargo, no definió qué significa para el Vaticano estar «totalmente impedido» ni qué cláusulas podrían implementarse si alguna vez lo estuviera. El derecho eclesial tiene protocolos para cuando un obispo se enferma y no puede manejar su diócesis, pero ninguna en el caso del Sumo Pontífice. Por eso, en caso de que el Vaticano buscase relegar a su principal mandatario, necesitará una renuncia del excardenal Jorge Bergoglio. Unirse en oración por la salud de Francisco Por otra parte, la Iglesia argentina invitó a todas las comunidades a unirse en oración: “Pedimos al Señor que le conceda su pronta recuperación, con gratitud por su servicio incansable a la Iglesia y al mundo, lo acompañamos espiritualmente en este momento de internación y reposo”, indicó la CEA en una invitación firmada por su presidente, Marcelo Daniel Colombo, arzobispo de Mendoza, y el secretario general, Raúl Pizarro, obispo auxiliar de San Isidro. La noticia sobre el deterioro de la salud del Sumo Pontífice ha preocupado no solo a los fieles de todo el mundo, sino también a figuras políticas y religiosas que han expresado su apoyo. Ante esta situación, el mensaje de la CEA subraya la importancia de la solidaridad espiritual en momentos de dificultad, destacando la influencia del Papa en la Iglesia y el mundo entero. La cadena de oración, que comenzó a convocarse en las primeras horas de la hospitalización, busca fortalecer la fe y la esperanza en la recuperación de Francisco, quien a sus 88 años enfrenta una complicada lucha por su salud. El Vaticano, asimismo, informó que las condiciones del Papa son estables, aunque su estado sigue siendo delicado. Los médicos continúan ajustando su tratamiento en función de los resultados de las pruebas realizadas, mientras el Pontífice sigue un riguroso régimen de descanso y terapia. La Conferencia Episcopal Argentina manifestó su solidaridad con el Papa Francisco y resaltó la importancia de acompañar al Pontífice en este difícil momento a través de la oración. Es por ello que, en un comunicado oficial, la CEA hizo un llamado a todas las parroquias, comunidades religiosas, movimientos laicales y fieles argentinos a sumarse a una cadena de oración en la que se eleve una plegaria por la salud del Papa y por su pronta recuperación. Además, la CEA invitó a todos los fieles a dedicar un tiempo especial durante la misa para pedir por la salud del Pontífice, así como a organizar momentos de oración dentro de las comunidades y los hogares. Infección respiratoria polimicrobiana Por otra parte, el Vaticano informó que el estado de salud del Papa es complejo pero estable, mientras permanece en tratamiento médico riguroso La infección respiratoria polimicrobiana se caracteriza por la presencia simultánea de múltiples microorganismos, como bacterias, virus, hongos o parásitos, que invaden las vías respiratorias. La presencia de varios patógenos puede agravar la infección, ya que un microorganismo primario puede permitir que otros gérmenes lo sigan, creando un nicho para que se desarrollen más bacterias y virus. Esto puede desencadenar complicaciones graves, especialmente en pacientes de alto riesgo como el Papa Francisco. El tratamiento de estas infecciones respiratorias suele involucrar antibióticos de amplio espectro para tratar las bacterias implicadas, como los macrólidos (eritromicina, azitromicina) y otros fármacos como la clindamicina o la lincomicina. En algunos casos, también se usan antibióticos contra ciertos virus o bacterias resistentes. Sin embargo, debido a la resistencia bacteriana, el tratamiento puede ser más complejo y requerir una vigilancia constante para evitar complicaciones graves como insuficiencia respiratoria o sepsis. A medida que avanzan los días, se han proporcionado detalles adicionales sobre el estado de salud de Francisco. En los últimos partes médicos del Vaticano, se mencionó que el Pontífice sufre de una infección respiratoria grave que, aunque tratable, presenta ciertos riesgos debido a su edad avanzada y antecedentes médicos. El portavoz del Vaticano, Matteo Bruni, informó el domingo que, si bien las condiciones del Papa son estables, su tratamiento ha sido ajustado debido a la complejidad de la infección. A lo largo de su vida, Francisco ha enfrentado varias afecciones que lo han puesto en una situación de vulnerabilidad. En su juventud, sufrió de una neumonía complicada con un empiema, lo que resultó en una resección pulmonar. Más recientemente, ha tenido que lidiar con caídas y problemas de movilidad, lo que lo ha llevado a usar una silla de ruedas. Estas condiciones, sumadas a la edad, complican aún más su recuperación y hacen que su hospitalización se alargue más de lo esperado. A pesar de la incertidumbre sobre la duración exacta de su hospitalización, el Vaticano ha asegurado que los médicos están haciendo todo lo posible para asegurar una recuperación completa. Las autoridades vaticanas no han proporcionado una fecha precisa para la reanudación de las actividades del Papa, ya que dependerán de la evolución de su salud. (Agencias/Jackemate.com)
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