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Parana » AIM Digital
Fecha: 06/02/2025 19:41
Depurar nuestro estómago con regularidad es un hábito muy beneficioso para nuestra salud, ya que además de eliminar las toxinas que se acumulan en él y mejorar nuestra digestión, combatiremos y evitaremos la aparición de todo tipo de problemas estomacales, como las úlceras. Nuestro ritmo de vida acelerado, el estrés y los problemas personales son los mejores aliados para que aparezcan los ardores, dolores de estómago y malas digestiones, por lo que es importante que además de hacernos limpiezas de estómago cada año para reducir el riesgo de desarrollar otros problemas digestivos más importantes, aprendamos a controlar nuestras emociones y a tomarnos las cosas con más calma. Cómo limpiar y depurar el estómago Agua tibia con limón en ayunas Los beneficios de beber agua tibia con limón cada mañana al despertarnos son muchas, y es que además de ayudarnos a eliminar las toxinas de nuestro cuerpo, es una excelente opción por estas razones: - Favorece la digestión: El agua templada estimula la circulación gastrointestinal, mientras que los limones, por su alto contenido en minerales y vitaminas, nos ayudan a expulsar los desechos y toxinas de nuestro organismo. - Equilibra nuestro pH: nuestra alimentación es generalmente ácida, por lo que es importante que equilibremos el pH de nuestro cuerpo con alimentos como el limón, una fruta alcalinizadora que nos ayudará a contrarrestrar la acidez de otros alimentos. - Refuerza el sistema inmunológico: Además de desintoxicar nuestro organismo, el limón es rico en potasio y vitamina C, dos sustancias que nos ayudan a prevenir enfermedades víricas, así como a estimular nuestro sistema nervioso, cerebro y mantener nuestra tensión arterial en niveles normales. - Ayuda a perder peso: Las personas con una dieta alcalina tienen la capacidad de bajar de peso con mayor facilidad. La fibra del limón además, nos ayuda a sentirnos saciados y evitar picar entre horas. Salvado y linaza Cada mañana, durante un mes, nos tomamos un vaso de agua con una cucharada de linaza, una semilla rica en Omega 3, 6 y 9, perfecta para mejorar nuestra digestión y regularizar nuestro metabolismo. Infusión de manzanilla, té verde u orégano Todas se preparan de la misma manera. Hervimos agua y un puñado de alguna de estas plantas durante unos minutos, colamos y nos la tomamos después de las comidas. Si nos decantamos por el té, hemos de saber que las grandes propiedades antionxidantes del té verde nos ayudarán también a prevenir otro tipo de problemas como el cáncer, la retención de líquidos, las enfermedades bucodentales y a perder peso. Fuente: Soluciones Caseras
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