03/02/2025 19:42
03/02/2025 19:34
03/02/2025 19:33
03/02/2025 19:33
03/02/2025 19:32
03/02/2025 19:32
03/02/2025 19:31
03/02/2025 19:31
03/02/2025 19:31
03/02/2025 19:31
» El Ciudadano
Fecha: 03/02/2025 12:14
Por David Ferrara Hay partidos aleccionadores, que suelen ayudar a bajar los decibeles del entusiasmo, de enviar una cuota de realismo necesaria para todos, y sobre todo para los hinchas. En Argentina no hay rival sencillo, en el fútbol de Argentina no sólo juegan los futbolistas, sino también las canchas, los árbitros, jueces de línea, el VAR, los horarios de partidos y el calendario. Por eso hay que entender que hay partidos en los que un gol seguro puede ser un gol errado, hay duelos en los que los jugadores que dan garantía pueden tener una tarde fatal, hay semanas en las que la carga puede ser inmensa, y pisos que favorecen más a unos y menos a otros. Central jugó mejor que San Martín de San Juan, pero la alegría y expectativa con la que los hinchas se prendieron a la TV se fue apagando con el correr de los minutos, hasta comprender que si bien se podía (y merecía) ganar, también era posible perder. ¿Los highlights? El golpe a la mesa con el blooper de Duarte, el susto cuando Quintana quedó pagando al salir al lateral o el grito cuando Campaz la tuvo y le picó en un hormiguero. A veces sirve bajar la expectativa. Mantenerse terrenales. Para que el golpe de realidad no sea tan duro. O para que no haya golpe de realidad.
Ver noticia original