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» Data Chaco
Fecha: 20/01/2025 22:14
El gobierno de Javier Milei anunció, este lunes, la desregulación de la importación y exportación de alimentos mediante el Decreto 35/2025, publicado en el Boletín Oficial. La medida fue presentada como una estrategia para reducir los precios de los productos alimenticios importados y fomentar la exportación. Sin embargo, algunos sectores advierten sobre los posibles riesgos de esta política. La nueva normativa modifica el Código Alimentario Argentino para simplificar trámites relacionados con la importación de alimentos provenientes de países con estándares de control equivalentes y elimina requisitos burocráticos para la exportación. Pese a los cambios, la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT) seguirá supervisando los aspectos normativos que aún se mantengan. En los considerandos del decreto, el Ejecutivo justificó que "toda vez que los países a los cuales se exportan los productos alimentarios fijan sus propios requerimientos y condiciones para perfeccionar la operación, deviene innecesario que el Estado nacional exija requisitos adicionales que afecten dichas transacciones". La visión oficial: menos trabas, más comercio El encargado de detallar la medida fue el ministro de Desregulación, Federico Sturzenegger, quien destacó los supuestos beneficios del decreto. "Buscamos alimentos más baratos para los argentinos y más alimentos argentinos para el mundo", escribió en sus redes sociales. El Decreto 35/25, publicado hoy en el Boletín Oficial, con firma del Presidente @JMilei, @GAFrancosOk y @Mariolugones_ar, implementa una revolucionaria desregulación en la exportación-importación de alimentos. Buscamos alimentos más baratos para los argentinos y más alimentos… — Fede Sturzenegger (@fedesturze) January 20, 2025 En cuanto a las importaciones, explicó que los alimentos certificados en países con alta vigilancia podrán ingresar al país sin restricciones y serán automáticamente incorporados al Código Alimentario Argentino, eliminando trámites relacionados con muestras, productos, establecimientos y utensilios. Respecto a las exportaciones, Sturzenegger afirmó que el Estado ya no podrá imponer requisitos adicionales a los productores, limitándose únicamente a emitir certificados solicitados por los mercados de destino. "El Estado deja de molestar para ponerse al servicio del productor", aseguró. Además, señaló que esta política busca resolver "pericias absurdas" impuestas en el pasado, como la exigencia de montar fábricas antes de certificar muestras o controles minuciosos innecesarios que ralentizaban el comercio. Riesgos y críticas a la desregulación Si bien el gobierno presentó la desregulación como una solución para reducir precios y dinamizar la economía, economistas y analistas advierten que esta medida podría tener consecuencias negativas: Impacto en la producción local: La competencia de productos importados a bajo costo podría perjudicar a los pequeños y medianos productores nacionales, quienes enfrentan mayores costos operativos y carecen del respaldo necesario para competir en un mercado desregulado. Volatilidad en los precios internos: Al vincular los precios de los alimentos directamente con el mercado internacional, el consumo local quedaría expuesto a variaciones globales, lo que podría encarecer productos básicos en tiempos de alta demanda externa. Riesgo para la seguridad alimentaria: La falta de controles podría priorizar la exportación de alimentos hacia mercados más rentables, generando escasez de productos esenciales en el mercado interno. Debilitamiento del control sanitario: La entrada de alimentos sin revisión detallada en el país podría derivar en riesgos para la salud de la población, al depender únicamente de los estándares de otros países, que podrían no ser aplicables al contexto local. Notas Relacionadas
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