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» Diario Cordoba
Fecha: 17/01/2025 02:39
Las declaraciones contradictorias que este jueves realizaron la actriz Elisa Mouliaá y el exportavoz de Sumar Íñigo Errejón han trasladado dos versiones diametralmente opuestas al juez Adolfo Carretero, que investiga al exdiputado por una presunta agresión sexual. Mientras ella trató de completar los lapsus que podían detectarse en su versión inicial, explicando que estaba "muy bebida" y que incluso pudo haber sido intoxicada por Errejón -quien le dio "dos o tres copas"-; el exdiputado, que calificó la denuncia como "falsa", insistió en que la relación sexual que mantuvo con la denunciante fue en todo momento "consentida", porque ella pudo abandonar la habitación en cualquier momento. Por eso, los representantes legales de Mouliaá y Errejón ya han anunciado que en los próximos días tienen intención de entregar al instructor nuevas "pruebas" que, según las versiones que trasladan las fuentes consultadas, podrían afianzar sus versiones en detrimento del oponente. En el caso de la letrada de Errejón las pruebas tratarán de evidenciar las mencionadas "contradicciones" de la actriz. Y por eso, la abogada ya ha adelantado que presentará un acta notarial protocolizando una conversación que ambos habían mantenido "en la que consta que fue ella la que borró los mensajes que le envió entre octubre de 2021 y abril de 2023", antes de interponer la denuncia, según informa Europa Press. Con esta evidencia la defensa del exdiputado trata de desmentir, tal y como ha declarado Mouliaá, que Errejón borrase todos los mensajes intercambiados en Instagram, conservando solo unos pocos. El psiquiatra La defensa de Errejón destaca el hecho de que, "en contra de lo declarado antes las cámaras en noviembre", la actriz dice ahora que el incidente sí le afectó y que acudió a recibir atención a un psiquiatra. Precisamente Mouliaá justificó la tardanza en denunciar la presunta agresión sexual -más de tres años-, por expreso consejo de su psiquiatra, quien le dijo que hasta que no estuviese preparada no acudiera a la Justicia. Sin embargo, las denuncias de otras mujeres le animaron a hacerlo, declaró. Las fuentes consultadas explican a esta redacción que ante las dos versiones contrapuestas las declaraciones de los posibles testigos de ambos tendrán una mayor relevancia. Por eso, explican que tanto Mouliaá como Errejón podrían proponer al juez Carretero como pruebas las comparecencias de personas que conozcan los hechos, y que puedan respaldar su versión. Fuentes cercanas a la defensa de la actriz han asegurado a esta redacción que en los próximos días presentarán diferentes pruebas, que no han querido concretar por estrategia procesal. En este sentido, el instructor ha otorgado un plazo de cinco días para que las partes identifiquen a los posibles testigos o anuncien las pruebas que quieran entregarle. Precisamente, este jueves por la tarde se ha conocido, por un mensaje en la red social 'X', que Mouliaá acudirá al programa de televisión 'De Viernes', de Telecinco, para explicar su versión de los hechos. En su comparecencia la denunciante explicó que tras la presentación del libro Errejón la citó para tomar una cerveza. Y pese a sentirse "incómoda" por este ofrecimiento, ella acabó aceptando. Y en el taxi, cuando estaban a punto de llegar al lugar de la celebración, el exportavoz de Sumar le dijo "las tres condiciones", que eran no alejarse de él, regresar rápidamente si se hacía, y finalmente, darle un beso. En su bebida Y cuando entraron en el ascensor, siempre según el relato de los hechos trasladados por fuentes presentes en la declaración a esta redacción, Errejón se lanzó contra ella de forma "violenta" para darle un beso. Y como en la fiesta le dieron mucho de beber, y ella no estaba acostumbrada a ello, porque hacía poco que había estado embarazada, resultó bastante afectada. En el mismo sentido, ha apuntado la posibilidad de que Errejón le pudiera haber introducido "algo" en su bebida, pues fue este quien le llevó "dos o tres copas. No sé si llegó a echarme algo", dijo. Precisamente, en este punto la defensa de Errejón detecta otra "contradicción", pues no consta en la denuncia policial que estuviera borracha o que sufriera algún tipo de intoxicación. En sentido contrario, Jorge Piedrafita, presidente de la Asociación Defensa Integral Víctimas Especializada (Adive), que ejerce la acusación popular en el procedimiento, ha defendido que la comparecencia de la denunciante fue en todo momento "coherente". Sobre si la habitación en la que sufrió la presunta agresión sexual estaba cerrada con un pestillo, como se especificaba en la denuncia que presentó ante la Policía, Mouliaá ha explicado que no se acordaba de ello, pero que Errejón sí le hizo el gesto de que la puerta no se podía abrir. También este aspecto ha sido desautorizado por la letrada de Errejón.
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